Huellitas Mágicas - El Pasado de Nozomi

Capítulo 3: Puesta en Marcha

Nozomi se siente nerviosa. Quizás, uno de los días más importantes de su vida había llegado. Luego de tanto entrenamiento con Toshio, era hora de dar el siguiente paso: acercarse a los demás, compartir sus pasiones e invitar a sus compañeros a su cumpleaños. Nozomi no está segura de cual tarea es más complicada.

Mientras camina hacia la escuela, se mentaliza. Está decidida a hacerlo. Sin embargo, al llegar al aula, los nervios y los miedos se apoderan de ella, sin dejarla siquiera prestar atención al profesor.

Cuando la clase termina, Nozomi todavía no había hablado con nadie. ¿Así iban a terminar las cosas? ¿Iba a pasar sola su cumpleaños? Seguramente Toshio iba a estar decepcionado.

- ¡Dueña! - se escucha una voz de repente.

No se trataba de cualquier voz. No era una palabra que se podía escuchar en cualquier lado. Nozomi no sabe si mirar. Si ya estaba nerviosa, ahora quería desaparecer.

- ¡Aquí dueña! ¡Vine a verte!

"Trágame tierra", piensa ella. ¿Qué hacía Toshio en la escuela? Y no era sólo eso. Por algún motivo, todos sus compañeros parecen verlo.

- ¿Quién es este tipo? - comentan algunos chicos.

- Es muy extraño - se escucha decir a otros.

Nozomi nota algo diferente en Toshio, pero no puede descifrar rápidamente que es.

"¡No tiene las orejitas ni la cola!", concluye Nozomi. Al verlo más en detalle, nota que parece más grande con esa apariencia, aunque la sonrisa de niño no había cambiando en absoluto.

¿Pero por qué todos lo pueden ver?

Algunas chicas empiezan a cuchichear.

- Oye, es bastante guapo - dice una de ellas.

- Parece que conoce a Nozomi. ¿La llamó dueña? ¿Será el novio? - responde la compañera.

- ¿QUÉEE? - reacciona Nozomi de golpe, llamando, sin querer, la atención de todos. La situación se estaba saliendo de control. Ya no podía ignorar a Toshio. Tenía que hacer algo o iba a terminar mal.

- ¡N-No es mi novio! ¡Es mi primo! - se apura a decir, utilizando la primer excusa que se le vino a la cabeza.

Inmediatamente, se acerca a Toshio y le pregunta, de manera forzada, nerviosa y con una cara de pocos amigos:

- ¡Primo Toshio! ¿Qué haces aquí?

- Pues vine a verte claro. ¡Vengo de muuuy lejos! - responde Toshio, pareciendo seguir el papel.

- Pero podías haberme esperado en casa, no tenías que molestarte en venir. - Nozomi baja la voz y agrega - Pensé que nadie podía verte.

- ¡Claro que tenía que venir! - dice Toshio exaltado, y agrega en voz baja - Decidí tomar esta forma para poder ayudarte y estar más tiempo contigo. Además... - vuelve a levantar la voz - Quería conocer tu escuela y a tus amigos. ¡Wooow! ¡Son muchos! - Toshio parece emocionado - ¿Irán todos a tu cumpleaños?

Lo dijo. Nozomi lo temía, pero no pudo evitarlo. Ahora, no sabe si mirar a sus compañeros para ver su reacción, si golpear a Toshio o si ponerse a llorar. Por el momento, se mantiene congelada, frente a un chico que no para de sonreír.

- ¿De verdad es tu cumpleaños pronto? - dice de repente una de las compañeras de la clase.

Nozomi, sorprendida, se da vuelta para mirarla.

- S-Sí... - responde tímidamente.

- ¡Qué bueno! - comenta otra de las chicas - Las fiestas de cumpleaños son siempre divertidas. ¿Qué harás?