-Permiso necesito sentarme, uyy perdón Lu...Salvador permiso, si asi muy bien.... Ahora si... Hola Bonita!!- Mire a Francisco no entendiendo que estaba haciendo... había esquivado y pedido permiso a todos para lograr pasar y sentarse a mi lado, entre el chico imitación de Matt Bomer y yo, dándole la espalda a este ultimo.

-Fran que haces hermano? – pregunto riendose el amigo con el que hasta recién estaba pasándola de lo mejor- me tapas a mi compañera de chistes

-Ey –dijo Francisco dándose la vuelta- Ramiro no te había visto, discúlpame- asi que el supuesto Matt Bomer se llamaba Ramiro... interesante, me gusta ese nombre Ra mi ro..- disculpa que me haya sentado aca, no te jode no? Es que tengo que hablar de algo muy importante con Camille

Ramiro puso cara de no entender y me miro a mi cabeceando puesto que el cuerpo de Francisco le impedia verme, por lo que cuando se corrió a la derecha Francisco hizo lo mismo, y cuando repitió la acción hacia la izquierda volvió a moverse.. pero a este que le pasa?

-Francisco que pasa de que queres hablar?- pregunte de malos modos porque era obvio que no teníamos que hablar de absolutamente nada

-Aca no porque hay mucho ruido, veni vamos afuera- y asi sin mas se paro y me tendio la mano esperando que se la tome..dude un rato pero las ganas de estar de nuevo con el a solas me vencieron y tomando su mano me pare y camine tras de el, no sin antes farfullar un lo siento a Ramiro, que me miro sonriendo como si nada pasara.. que chico tan majo! En realidad todos eran lo bastante agradables y me encantaría hacerme amiga de ellos, puesto que mis dos mejores amigas se iban de intercambio por 6 MESES a Inglaterra, me iba a quedar muy sola.

Una vez llegados afuera, Francisco siguió caminando hasta frenarse al lado de mi árbol, digo mio porque pase muchas tardes de verano aquí leyendo o simplemente descasando, pero de la nada me acorde el encuentro con el y automaticamente retire mi mano y le dije sin miramientos que no pensaba quedarme con el sola,alejada de todos y en la oscuridad plena

El riéndose me pregunto si le tenia miedo, que no lo hiciera que solo quería charlar

-No soy ningún violador si eso te preocupa

-No creo que seas un violador, pero puesto que este es el lugar al que traes a tus amiguitas a follar, no me apetece estas aquí ahora.. aunque hayas echo que odie este lugar el cual era mi favorito de toda la estancia

-Okey.. primero que nada, cuando me viste hace un rato con Romina no veníamos de aquí, sino del sauce que esta alla, lo ves? –forzando mi viste mire hacia donde el miraba y vislumbre un hermoso sauce iluminado por la luz de la luna- en segundo lugar no traigo a mis amiguitas asi como lo dices de manera despectiva, yo las aprecio mucho, son amigas bastante amigables eh de decir- esto lo dijo con un aire soberbio que me dio ganas de vomitar por que se sintiera tan contento consigo mismo- y en tercer lugar este también es mi lugar favorito de la estancia, asique supongo que podemos compartirlo juntos mientras estemos aca.

Como no supe que contestar me limite a sentarme en el tronco tal como lo había hecho hoy, cerre los ojos y apoyándome sobre los codos recosté la cabeza hacia atrás.

Pasados unos segundos me aventure a levantar los parpados, puesto que el silencio llegaba a ser algo incomodo, y descubri que Francisco me estaba mirando muy fijamente, y algo en mi interior vibro poniéndome nerviosa

-Despues decis que no sos un acosador... por que me miras asi, de forma tan rara?

-No dije nunca que no era un acosador, y te miro porque sos linda y me gusta las cosas lindas, mejor dicho las chicas lindas

Doy gracias a lo oscuro que estaba por que asi no podía ver como me había ruborizado por la pavada que dijo, si bien solo me dijo linda, para mi fue como si me dijiera de un dia para el otro que era el amor de su vida...pero sin ganas de que me siga tomando mas el pelo me levante de un salto y me acerque a el hasta quedar a menos de 50cm de distancia

-No me digas mas asi!

-Que cosa? ... linda?

-Basta Francisco

-Por que?

-Porque es obvio que no lo decis en serio, sea lo que sea que tenes pensado decirme para ver si voy a caer bajo tu encanto en serio, no lo hagas porque no va a servir de nada

-Uy bonita pero que te hace pensar que quiero que caigas bajo mi encanto? Creeme si me interesara eso, ya te lo hubiera hecho saber

-Entonces porque hiciste lo que hiciste en el Atila, por que me arrinconaste asi? No creo que algo no te haya interesado- porque no aprendia a cerrar la boca de una vez, siempre hablaba antes de pensar, ahora seguro iba a pensar que ella no habia olvidado esa fatidica noche

-No mas que cualquier chica normal, si es por esa noche por la que estas actuando tan raro conmigo y no me hablas como a los demás, tranquila, que no pienso hacer nada, con aquella noche tengo suficiente.. simplemente quería salir a tomar un poco de aire, y puesto que sos la que menos bebio de todos en la fiesta, me parecias la compañía perfecta para que me cuidase

Pude sentir como mis ojos se iban calentando, tanto que si no enfriaba mi mente terminaría por derramar esas lagrimas que este imbécil me estaba causando. "no pienso hacer nada con aquella noche tengo suficiente" Era necesario que le refregase su disgusto para con ella? Que el beso no le había gustado para nada? Eso realmente me dolio, porque atacaba la parte de mi autoestima de por si baja que yo mas temía.

-Claro porque yo ahora soy tu enfermera no te jode.. – y dando media vuelta quise seguir caminando para volver a la casa,pero no alcance a hacer un solo paso que me agarro de mi muñeca impulsándome hacia atrás de modo que mi espalda estaba contra su pecho. Un escalofrio me recorrio por la espalda al sentir su boca junto a mi oreja

-No te vayas...

-Para que queres que me quede? Para que me sigas diciendo que soy tu enfermera y refregarme que lo pasaste tan mal aquella noche que no harías ningún movimiento?

De pronto me dio vuelta con fuerza quedando frente a frente y me miro tan fijo que ni siquiera pude desviar mi mirada de la suya

-Nunca dije que la pase mal, simplemente dije que no intentaría nada... por que eso te molestaría bonita?- pregunto con un brillo de malicia y diversión en su mirada al tiempo que sonreía de costado

-Pero que te crees? Queme molesta ? Sos tan creido y egocéntrico que lo único que pens..-

Y ya no pude decir nada, porque sin darme tiempo a reaccionar, mi boca habia sido callada por Francisco, que me estaba besando. De nuevo.Totalmente de la nada. Y esta vez no me resistí.

Inesperado encuentroOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz