VEGETA Y BULMA|Un Amor inesperado 2: Tú y yo contra el mundo.

Capítulo 1: "Magia pura"

-¿Amor?, ¿amor donde estas?... ¿vegeta?-Me encuentro en un obscuro pasillo en busca de vegeta, no entiendo porque no esta a mi lado y estoy muy asustada.

-Jajajajaja...

Escucho unas risas y entre mas avanzo mas cerca se escuchan, alcanzo a escuchar dos voces... ¡una es de vegeta! corro hacia el final del pasillo, y se ve que es de noche, llego al final y la escena que veo me desgarra el alma, mi... mi vegeta esta besando a otra, él tiene su mano en su cintura y ella detrás de su cuello, parecen disfrutar el beso.

-¡VEGETAAAAAAAAAAA!-Le grito pero no me escucha, mis lagrimas no tardan en asomarse. Y despierto gracias a Kami sólo fue un sueño.

-¡¿Bulma que pasa?!-Me pregunta Vegeta al mismo tiempo que se sienta así como yo.

Estoy super agitada por lo que soñé, no puedo imaginarme al amor de mi vida en brazos de otra, no a él.

-Tuve una pesadilla amor... Pero sólo eso.- Le respondo con una sonrisa y él no muy convencido me vuelve a preguntar y yo le vuelvo a confirmar que si, nos volvimos a dormir.

A la mañana siguiente...

Me preparo para ir a la escuela, mientras mi querido novio se bañaba yo preparaba el desayuno aún con el recuerdo de aquel sueño, de aquel beso que no era mío, si no de otra. Sentía mis mejillas arder del coraje y se me formo un nudo en la garganta de tan sólo pensar en mi amor en brazos de otra persona, no lo resistiría, lo amo demasiado, somos uno mismo y separarme de él me desgarraria el alma.
Sin darme cuenta huelo a que algo se quema ¡y eran mis huevos!

Rápidamente apago la estufa y saco la sartén pero al momento de tocar el mango me quemo y doy un grito de dolor mientras dejo caer la sartén al suelo, con todo y huevos. Vegeta llega a la cocina con una toalla mal enrollada en la cintura y veo su cara de preocupación.

-¡¿Amor que pasa?¡

- ¡Me quemeeee!- Digo en un chillido de dolor, él se acerca y me toca la mano para dejarla en el lavatrastes y que el chorro de agua fría caiga sobre mi mano, el quejido de dolor no sé hizo esperar

-A ti nunca se te queman los huevos Bulma.- Me dice en tono serio y yo tengo ganas de llorar.

- Me distraje por un segundo.- Contesto y él retira mi mano y la seca para después  sacar el botiquín y ponerme un ungüento y vendarme la mano.

-¿Pensando en?- Me pregunta mientras me ve con sus hermosos ojos negros y que me penetran hasta el alma.

- En la escuela amor, se me hace tarde.- Dije mientras me tomaba una tostada y me la comía mientras iba a mi recámara a terminar de arreglarme.

No quiero que sepa lo que soñé, es más lo olvidaré, fue algo absurdo. Después de arreglarme salgo corriendo a la salida por mi coche después de despedirme de mi Vegeta, si se me hizo tarde y hoy tengo una exposición que entregar.

Al llegar a la entrada encapsulo mi coche y entro justo cuando dan el toque, al entrar al salón se encuentra Roger apartandome lugar donde siempre así que me dirijo hacia él y me siento. Él siempre se a portado bien conmigo desde el primer día de clases, hasta podría jurar que le gustó pero siempre le dejo las cosas en claro, entablamos una pequeña conversación sobre mi mano que termina cuando el profesor azota su bolso en el escritorio, creo que está de malas.

(•••)

Está mañana Bulma estuvo muy rara, sé que fue por el sueño de anoche cosa que no me dijo, espero que ya esté más tranquila para que al rato platiquemos. Ella es lo que más amo y me preocupa todo lo que tenga que ver con ella.