Capítulo 1:

4.1K 29 0
                                    


Otra noche más sola en casa, haciendo zapping buscando un buen programa sin éxito. Así durante media hora, hasta que me topé con algo que a todos nos entretiene al fin y al cabo.

Es una peli porno. Inmediatamente dejé de cambiar canales y me quedé viendola. Madre mía. Como le pasa ese hombre la lengua por la entrepierna  húmeda de esa muchacha bien abierta de piernas sobre esa mesa en la cocina.

Soy una mujer muy sensual que adora el sexo y además me considero atractiva. Culo redondo y en su sitio, al igual que mis pequeños pero firmes pechos. Tengo un rostro bonito y unos buenos labios para besar de una forma exquisita.

-Joder. Ojalá esa lengua hiciera eso en mi coño ahora mismo-. Hablo en alto mientras miro el programa. Sigue dándole fuerte con su lengua insistiendo en su clítoris y después metió los dedos dentro de ella.

-uf...no debería estar viendo esto...-. La chica gime con fuerza y al confirmarme que lo está disfrutando me excita mucho más la imagen que veo.

Sin darme cuenta mi mano empezó a bajar por mi tronco hasta mi entrepierna, colandose bajo la goma del pantalón del pijama. Tengo ganas de un orgasmo y si no había nadie allí, me lo daría yo misma.

Separé mis labios con los dedos y joder...que húmeda estoy solo con ver un minuto de ese programa. Mi cuerpo pide placer.

Cogí un poco de mis propios líquidos producidos por la exitación y me lubriqué bien mi clítoris. Ya tenía ganas de que lo acariciaran. Me toqué lentamente al ritmo que el hombre pasa su lengua por el de la chica.

-aahh si-. Lentamente...

De repente se puso la pantalla en negro.

*si quiere continuar viendo el programa actívelo llamando al 782 738*

-joder!!! Me estás vacilando?-. Quiero mi orgasmo a estas alturas, pero yo sola, sin video ni nada  tocándome no sería tan divertido. Asi que me imaginaré a mi hombre perfecto. Sí. Mientras me masturbo pensaré en ese pizzero tan absolutamente sexy que tiene turno los sábados, osea, hoy.

Ese tal Justin es demasiado para mi cuerpo de mujer deseosa de sexo.

Es...perfecto. Castaño claro con ese tupé repeinado hacia arriba y brillante. Sus ojos color miel, que pueden mirarte de una forma dulce o de una forma tan sexy que sientes que su mirada se clava directamente en tu clítoris. Su labios...oh joder...sus labios bien carnosos, perfilados y bien humedecidos por esa lengua que quiero que este entre mis piernas. Entre ellos una sonrisa perfectamente cuadriculada y bonita. Si bajamos un poco más nos encontramos con su marcado, fuerte, fibrado, sexy, perfecto y tatuado torso. Ese pecho que se le marca tras el polo de repartidor de pizza, quiero lamerlo. Y sus brazos...mierda...sus brazos...quiero que me sostenga con ellos mis caderas mientras me folla. Su pene es otra cosa de lo que hay que hablar. Ese animal dormido que esconde bajo la cremayera de su pantalón que tantas veces miro...lo quiero dentro de mí y ahora.

Al imaginarme todo eso me dieron muchísimas más ganas de que me estuviera follando más y más intenso cada vez. Y por qué no? Por qué conformarme con tocarme pensando en él?

Es sábado, está en su turno de noche, estoy buena, está bueno, quiero sexo, y por como me mira a veces no descartaría la opción de que él también quiera conmigo.

El Repartidor De Orgasmos Justin Bieber [One Shot Hot And Explicit]Where stories live. Discover now