capítulo 2

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Me desperté, miré la hora y abrí mis ojos como platos. Otra vez me había quedado dormido.

Me vestí lo más rápido posible con lo primero que encontré, tomé mis cosas y salí corriendo de casa sin siquiera despedirme de mis padres.

Corrí a la parada de autobuses rezando para que pasara rápido el autobús que me llevaría a la escuela. Por suerte así fue, me subí y me senté cerca de la salida.

Me puse a escuchar música y sin darme cuenta me quedé dormido.

El autobús pasó por un tope y me golpeé la cabeza con la ventana, despertándome. Una señora y un par de adolescentes que también estaban ahí se comenzaron a reír de mí, me encogí en mi lugar y sobé la parte donde me golpeé.

Llegué a la parada donde debía bajar, me bajé y salí corriendo a la escuela. Logré convencer al prefecto de que me dejara pasar y corrí hasta mi salón, por suerte el profesor no había llegado. Me senté al lado de Yan An, como siempre.

–Hola, Yeo One. Otra vez tarde. –me dijo sonriendo y mi corazón comenzó a latir rápido.

–Hola, Yan An. Me volví a quedar dormido.–sonreí y me recosté en la mesa.

–Deberías comprarte un alarma.

–Ya tengo una, pero nunca logra despertarme.–lo miré.

–Se me olvidaba que tienes el sueño pesado.–rió. Me le quedé viendo, admirando su hermoso rostro. El profesor llegó, haciendo que dejara de admirar a mi amigo y prestara atención a la clase.

*

Era receso y me encontraba con Yan An en la cafetería. Me gustaba verlo comer, se veía muy adorable.

–Ya deja de verme así, Yeo One-ssi.– me dijo cubriendo su rostro, sonreí.

–Ya vuelvo, voy al baño. –le dije levantándome, asintió. Caminé hasta el baño, hice mis necesidades y me lavé las manos. Me miré al espejo.–¿Debería confesarme a Yan An...?

–¿Te gusta Yan An? Lo sabía. –volteé y me encontré con Hong Seok, un amigo.

–¿Me escuchaste?

–Hablabas como si estuvieras solo.–me miró mientras se lavaba las manos.

–Oh.

–Pienso que deberías decirle lo que sientes si en verdad te gusta.

–Tengo miedo, ya sabes, de perder nuestra amistad. Yan An es una de las personas más importantes para mí y no quiero perderlo.

–En la vida tienes que tomar riesgos, qué tal si a él le gustas también. Arriesgate, así como yo lo hice con Jin Ho.–sonrió,me palmeó el hombro y salió. Él tenía una amistad parecida a la nuestra con Jin Ho y ahora llevan un año de noviazgo.

Salí del baño, pensando en si debía o no confesarme a Yan An. Llegué a la cafetería y mi ceño se frunció al ver a un chico con Yan An. Hablaban animadamente y se sonreían. Me acerqué rápidamente a ellos.

–Yan An... ¿Quién es este?–dije con tono molesto.

–Oh, Chang Gu, él es Hyung Gu o Kino como le gusta que le digan. Kino, él es Chang Gu o Yeo One.–dijo sonriendo.

–Un gusto, Yeo One. –dijo el tal Kino sonriendo.

–¿Y qué hace en nuestra mesa?–pregunté ignorando al chico y enfatizando el "nuestra".

–Es nuevo y no tiene amigos, ¿estaría bien si se sienta con nosotros por un tiempo?–Yan An siempre tan iluso e inocente que no se dio cuenta de que no quería que ese chico estuviera cerca de él. Pero estaba haciendo la cara, esa cara a la que no me puedo negar.

–Yan An, no creo...–interrumpí a Kino.

–Estaría bien, pero sólo mientras consiga amigos. –y se largue, eso último lo pensé.

–¡Gracias, Yeo One-ssi! –me abrazó y sentí mis mejillas arder.–Eres el mejor amigo del mundo.–auch, justo en la friendzone.

–No hay de que, Yan An. –lo abracé más fuerte. El timbre sonó y Yan An se separó de mi rápidamente.

–Tengo que ir al club de fútbol ahora mismo sino el entrenador me mata. ¿Podrías acompañar a Kino a su salón? –hizo un puchero, sabía cual era mi punto débil y lo utilizaba.

–Claro.–le sonreí.

–¡Gracias!-se levantó.–¡Adiós!–salió corriendo fuera de la cafetería.

–Bien, Yeo One. Veo que no te agrado.– habló mi acompañante.

–¿A dónde quieres llegar con Yan An? ¿Te gusta? Pues déjame decirte que a él no le van los hombres...–sin darme cuenta me herí a mismo. Se me había olvidado que Yan An no era gay.

–No me interesa Yan An. Puse el ojo en otro chico, el japonés, Yuto. Pero por lo visto tú si gustas de el chino.

–¿Qué? Tú no sabes nada de mí como para decir que me gusta Yan An...

–Se te nota y por favor, controla tus celos, eres muy insoportable celoso.

–No estaba celoso.

–Ajá. Ahora acompañame a mi salón. –se levantó.

–¿Qué? ¿No recuerdas dónde está? –me levanté y lo seguí.

–No, si sé pero tenemos Química ahora y no sé donde está el laboratorio. –entró a lo que supuse era su salón y salió con su mochila. Lo guié hasta el laboratorio, que no estaba muy lejos de su salón. Me agradeció y entró.

Caminé hasta mi salón y me senté en mi lugar. Era hora libre y estaba aburrido, no era muy amigo de mis compañeros, sólo era un poco cercano a Jun Hong y a Se Bin, pero ellos estaban sumidos en su mundo de raperos.

Al salón entró un chico, de baja estatura y lucía nervioso. Se sentó en la mesa enfrente a la mía, que era la única sola.

–Disculpa, ¿qué clase tienen ahora? –me preguntó el chico.

–Es hora libre. ¿Eres nuevo?

–Oh, bueno. Sí, soy nuevo.

–¿Por qué llegas hasta ahora? Yo que tú mejor no hubiera venido.–no me di cuenta de que eso sonó grosero.

–Por asuntos familiares. No quería venir pero mi mamá me mandó.–hizo una mueca.

–Que mal. ¿Cómo te llamas?

–Sun Ye In, pero mis amigos me dicen Sun Youl. ¿Y tú?

–Yeo Chang Gu, pero mis amigos me dicen Yeo One. –le sonreí. Seguimos conversando hasta que se acabó la hora libre. Yan An llegó y juro que pude ver el odio en su mirada al verme con Sun Youl. Iba a presentárselo pero me ignoró por completo.

¿Será qué...? No, a Yan An le gustan las mujeres y no puede estar celoso de que esté con otro chico. Simplemente no puede.

¡Hola! Aquí está el segundo capítulo, espero y les guste ^^

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Best Friend | YanOneWhere stories live. Discover now