Todos los presentes quedaron en silencio, sin saber que decir, y con expresiones neutras en sus rostros.

Louis miró a cada uno de ellos y apretó el agarre en la mano de Harry en busca de apoyo.

-Bueno... -Uno de los gobernadores de un reino vecino habló cortando con la tensión.-... Esto es nuevo. -Habló  siendo lo más respetuoso posible.-

-Eso. -Dijo alguien mas.- Usted puede hacer lo que quiera con su vida. -Louis se iba sintiendo un poquitito mejor a cada palabra. Se esperaba una ola de comentarios malos y miradas de asco. Sin embargo, la primera impresión de todos no había sido esa.- Pero es extraño.

-Ya se lo he dicho en privado. -Set se puso de pie.- Pero no esta de mas repetirlo; Grecia cuenta con el total apoyo de Egipto. -Set fijo su vista en los presentes.- Grecia es uno de los reinos más ricos y poderosos de todo el mundo, es rica en todos los sentidos desde minería hasta ganadería. -Él tragó saliva.- Si Grecia es rica nosotros, al ser aliados del soberano, también nos enriquecemos. -Casi todos estaban comprendiendo a lo que Set se refería.- Entonces, ¿Nos va a importar la vida amorosa del futuro rey? ¿Acaso no es más importante como gobernará y de que forma eso nos beneficia a nosotros en lugar de juzgar con quien comparte su cama en la noche?

-Conozco demasiado a Louis. -Intervino está vez Gemma.- Y les aseguro que no encontrarán una persona más sincera, inteligente y sensata que él. Es alguien que se preocupa por los demás, que escucha y entiende, que, si bien es tímido y callado, si se está cometiendo una injusticia no se va a callar. -Ella miró a Louis.- Louis es una de las mejores personas que conozco y es un excelente compañero. -Louis sonrió tímidamente y Gemma volvió a dirigirse a los distintos tipos de gobernantes.- No les pido que crean y confíen ciegamente en él, solo digo que le den una oportunidad, que lo conozcan, y les aseguro que él no los defraudará.

(...)

A lo largo de la noche, diferentes tipos de personas se acercaron a conversar con Louis y tener la oportunidad de apreciar de cerca como era.

Harry se había mantenido a su lado toda la noche, sin muchas intenciones de dejarlo solo con todas esas personas.

-Harry, iré a tomar un poco de aire afuera. -Susurro el ciervo en el oído del mas grande.-

-¿Quieres que te acompañe?

-No, quédate, seria descortés que nos vayamos los dos teniendo en cuenta que somos los... príncipes. -El príncipe sonrió ante lo oído.-

-Está bien, cariño. -Louis sonrió y se fue rumbo a los jardines del reino.-

(...)

La noche estaba hermosa, la luna era sorprendentemente grande, se mostraba en todo su esplendor,  y Louis se encontraba disfrutando de tal espectáculo.

Se sentía presionado, sentía que todo el mundo estaba pendiente de lo que él hacía y tenía miedo de cometer un error.

Después de aproximadamente media hora Louis decidió que debía volver, o sino Harry iría a buscarlo.

A medida que Louis se iba acercando a la entrada al reino iba escuchando pasos detrás de él.

El ciervo volteó al escuchar los pasos cada vez más cerca de él y divisó dos guardias del ejército árabe que habían ido en la caravana del rey de dicho lugar.

-Uhmm... ¿Se les ofrece algo? -Preguntó tragando saliva.-

-Si... -Una tercera voz se escuchó y, de detrás de los guardias apareció el rey Aban Wahid.- 

Antes de que Louis pudiera preguntar algo el soberano hizo una seña a sus soldados y estos lo sujetaron de los brazos.

-Espero que no te moleste es solo una medida de precaución. -Louis entendía con dificultad lo que Aban quería decir gracias al acento cerrado que este tenía.-

"The Kings" {L.S} [M-PREG]Where stories live. Discover now