La Historia De Dalia Suzuki [Editando y en pausa]

30

  —Ya que has llegado hasta aquí, Dalia Suzuki, ¡Que empiece el combate! —Exclamó Gerania, dando inicio al duelo.
  El gimnasio de Ciudad Loza era muy peculiar. Situado en un angar en la pista de aterrizaje, tenía un sistema único para llegar hasta la líder. Al fondo del gimnasio había dos hélices de avión que creaban fuertes ráfagas de viento cada cierto tiempo, de modo que había que refugiarse en lugares estratégicos y luchar con determinados entrenadores antes de llegar hasta allí.
  —¿Sabes? Los otros líderes de gimnasio me han hablado de ti. Puede que seas tan hábil como dicen, pero a mí no me ganas. ¡Adelante, Swoobat!
  Dalia registró al nuevo Pokémon en la pokédex, y decidió que la mejor opción era sacar en primer lugar a Servine, para fortalecerla en los combates en los que tenía debilidad respecto al tipo.
  —¡Vamos Servine!
  Servine salió de su pokéball muy animada y decidida. Aunque estuviese  en desventaja, nadie podría hacer frente a su velocidad.
  Gerania pareció quedarse quieta, dudando de si atacar o no. Parecía pensar una buena estrategia, por lo que Dalia prefirió adelantarse.
  —¡Servine, Lluevehojas!
  El vendaval repleto de hojas golpeó a Swoobat de frente, sin apenas causarle daño, mas no era aquella la estrategia de la joven entrenadora.
   —¡Ahora Látigo Cepa! —Ordenó, muy animada.
  "¡Engánchate del techo, y sube a una viga o a cualquier otra cosa! Utilizaremos el factor sorpresa. Con suerte, también haremos creer a Gerania que utilizaremos Látigo Cepa contra Swoobat, pero no será así." Habló Dalia en su mente. Servine asintió, dispuesta a tomar ventaja a la Swoobat enemiga.
  Servine lanzó una de sus cepas hacia el techo, enganchándola en una viga, y cuando el Lluevehojas había desaparecido, Servine se había desvanecido con él.
  —¡¿Pero qué...?! —Exclamó Gerania —. ¡Swoobat, estate alerta, por si algún Látigo Cepa te alcanza, y adelante, usa tu sonar!
  Tras aquella orden, Swoobat soltó un pequeño alarido por todo el gimnasio, y ascendió al lugar en el que estaba Servine.
  —¿Sorprendida, Dalia Suzuki? Ocultarse no te servirá de nada. Con el sonar de Swoobat no hay quien se esconda de ella. Puede percibir las ondas ultrasónicas y guiarse perfectamente en la más oscura de las noches.
  —Bueno, la verdad es que no. Si te soy sincera, esperaba que me encontrases, y confiaba en que tu Swoobat se acercase para atacar. ¡Ahora, Servine! ¡Placaje contra Swoobat!
  Servine saltó de la viga, con la intención de impactar contra Swoobat con todo el peso de su cuerpo, pero no llamaban en vano a Gerania una chica de altos vuelos, y no sólo era por sus dotes de aviación, sino por las excelentes cualidades aéreas de sus Pokémon. Swoobat esquivó sin problema el ataque de Servine, que se precipitó en picado hacia el suelo.
  Gerania soltó un grito de triunfo, mientras que Dalia esbozó una media sonrisa.
  Servine no había caído al vacío como Gerania pensaba, sino que se había sujetado de una de las vigas del techo con Látigo Cepa, y con el gran impulso de la caída cogió aún más fuerza de impulso con el suelo y tras saltar logró impactar contra Swoobat; que perdió el equilibrio en el vuelo, y chocó con fuerza contra una de las paredes.
  Servine se soltó del techo, y aterrizó sin problema en el suelo.
  —¡Perfecto! Muy bien Servine, has llevado a cabo la estrategia al pie de la letra.
  —¡Sorprendente! Has elaborado una estrategia muy buena para hacer frente a la desventaja de tipos, sin embargo, no te servirá de mucho. ¡Swoobat, usa Acróbata!
  Swoobat parecía haberse recuperado muy rápido del impacto recibido contra la pared, y comenzó a agitar sus alas.
  Un fuerte vendaval provocado por Swoobat impactó fuertemente contra Servine, propulsándola varios metros hacia atrás, en una de las zonas en las que las turbinas lanzaban fuertes ráfagas de viento.
  —¡Bien hecho, Swoobat!
  "¡Servine, tengo otro plan! Agárrate con Látigo Cepa a cualquier cosa, y aguanta ahí todo lo que puedas, recuerda que Gerania no se puede dar cuenta de la verdadera estrategia, tal y como antes lo hemos hecho. Hay que atraer a Swoobat hacia allí."
  Servine se sujetó como pudo a una de las paredes con su Látigo Cepa, justo antes de que se diese lugar una fuerte ráfaga de viento.
  Servine, agarrada con fuerza, aguantó el viento, y esperó como antes la llegada de Swoobat.
  —¡Swoobat, no pierdas la oportunidad y usa Buena Baza! ¡Vuela hacia Servine cuando venga una ráfaga de viento!
  Dalia volvió a sonreir. Eso era lo que quería. Si Swoobat se acercaba, sería su fin.
  Puede que Servine no tuviese gran fuerza por sí misma, pero su Látigo Cepa era fortísimo.
  El viento comenzó a ser más fuerte, a lo que Swoobat se acercó hacia Servine. Cuando iba a realizar su ataque, Servine se impulsó mediante el Látigo Cepa por encima de Swoobat.
  Swoobat iba a esquivar su ataque, cuando Servine le asió las alas y la lanzó hacia arriba para una vez teniéndola inmovilizada saltar sobre su abdomen.
  Swoobat, que no pudo lograr el equilibrio de nuevo en el vuelo, fue propulsada y lanzada de nuevo por Servine contra la pared del fondo del gimnasio.
  Servine saltó al suelo, y tras una pared en la que se encontraba segura de las ráfagas de viento observó como las mismas se encargaban de finalizar la estrategia de Dalia golpeando a Swoobat contra la pared, debilitándola. No habría sido posible de no ser por las fuertes ráfagas de viento del gimnasio de Gerania, que lejos de beneficiarla, le habían hecho perder un combate. Swoobat había sido derrotada con su propia medicina.
  —¡Has debilitado a mi Swoobat! ¡Ha sido increíble! —Gerania parecía tener una gran consideración hacia Dalia, admirando sus estrategias.
  Acto seguido, Servine se debilitó por el cansancio, y Dalia la volvió a meter en su pokéball. Había ejecutado sin ningún fallo sus estrategias, merecía un descanso digno de su combate.
  —Muy bien, Servine. Cuando aumentemos tu resistencia serás imparable. ¡Tu turno, Porygon2!
  Porygon2 salió de la pokéball. Flotaba sobre el suelo con un pequeño balanceo, esperando combatir.
  —¡Buen trabajo, Swoobat! ¡Tu turno, Skarmory! Con ella sí que no podrás, Dalia Suzuki.
  Dalia registró a Skarmory en la Pokédex. Era un ave de acero, con su cuerpo de metal y unas alas afiladísimas que cortaban incluso el viento.
  —¡Ya lo veremos! ¡Porygon2, usa Triataque!
  —¡Contrarréstalo con Aire Afilado!
  Porygon2 creó tres esferas, una de hielo, otra eléctrica y una última de fuego. El viento que Skarmory levantó logró volver las tres esferas en su contra, pero antes de que impactasen contra Porygon2, el psíquico del Pokémon las lanzó de nuevo contra Skarmory.
  El Pokémon de Gerania era tan veloz, que logró esquivar la esfera eléctrica y la de hielo, pero la de fuego le causó un gran daño.
  —¡Porygon2, usa de nuevo Triataque!
  Porygon2 hizo caso a Dalia, y lanzó de nuevo tres esferas hacia Skarmory, que por suerte la debilitaron un poco más. Aún así seguía en pie, y Porygon2 debía esforzarse más si quería vencerla.
  —¡Skarmory, Ala de Acero!
  "Porygon2, deja que se acerque, y entonces usa psíquico para lanzarlo hacia el techo. Skarmory es muy rápida, por lo que debes superar su velocidad y usar en el momento específico Triataque."
  Porygon2 no respondió, pero hizo caso a Dalia. Skarmory se acercó a gran velocidad hacia Porygon2, con sus alas metálicas fortalecidas, pero segundos antes del impacto, el Pokémon de Dalia controló a Skarmory.
  La fuerza del psíquico de Porygon2 era muy fuerte, pero la velocidad de Skarmory la igualaba. Aún así, Porygon2 lanzó a Skarmory y utilizó de nuevo Triataque, haciéndole un gran daño esta vez usando las tres esferas. Dalia era consciente de que estaba en desventaja. El tipo volador no era su fuerte.
  Skarmory se recuperó y descendió en picado de nuevo con la intención de golpear a su adversario, pero este utilizó Psíquico y en vez de lanzarlo hacia delante, Porygon2 lanzó hacia atrás a Skarmory, debilitándola finalmente.
  —Tu Porygon2 es muy fuerte. Nadie había debilitado nunca tan rápido a Skarmory, y menos un Pokémon de tipo normal con ataques de tipo psíquico a la defensiva. Te felicito, pero no creas que ya tienes la victoria. ¡Adelante, Swanna!
Dalia guardó a Porygon2 en su pokéball con una gran sonrisa, pues percibía desde sus adentros que el combate ya estaba ganado. Confiada, se decidió por su estrategia final.
  —Yo tampoco cantaría victoria tan rápido, Gerania. Aún tengo un as bajo la manga. ¡Dunia, tu turno!
  Dunia salió de su pokéball pletórica. Tenía muchísimas ganas de combatir, y la derrota no estaba a la orden del día. Por hoy, Dalia había hecho una excepción. Quería que su aparición fuese sorprendente, por lo que la metió en su pokéball por primera vez en mucho tiempo.
  —Es gracioso, al decir lo del as bajo la manga y sacar un Pokémon de tipo siniestro me has recordado a...
  —¡Dunia, Garra Umbría! —Dalia intervino al momento. Estaba totalmente decidida a hacerse con la victoria.
  —¡¿Qué?! Supongo que en ese aspecto también os parecéis... Pero un Liepard ¿variocolor? No podrá hacerle ni cosquillas a Swanna.
  —¡Dunia no es un simple Liepard variocolor!
  "Dunia, agárrate a la pared con Garra Umbría, tengo un plan para dejar exhausta a Swanna."
  Dunia, con sus garras sumidas en las tinieblas de Garra Umbría prosiguió a saltar contra Swanna, con el verdadero objetivo de amarrarse a la pared. Swanna se apartó y le dejó el camino libre, por lo que Dunia quedó sujeta a la pared.
  —Swanna es mi Pokémon más ágil y veloz, Dalia. No sé qué te traes entre manos esta vez, pero te aseguro que no te lo voy a poner tan fácil como antes. Si bajé la guardia con Porygon2, ahora no la bajaré con tu Liepard,
  —Es fácil decirlo, Gerania. ¡Dunia, Garra Umbría!
  Dunia se abalanzó sobre Swanna, que en un intento por salvarse del ataque pretendió iniciar el vuelo en vano. Dunia hincó sus garras en el ala derecha de Swanna, provocándole una pequeña herida. Swanna continuaba intentando alzar el vuelo, mas le resultaba imposible.
  —¡No! ¡Swanna, tu puedes! ¡Usa Respiro!
  Mediante el movimiento Swanna pareció recomponerse un poco y disminuir su herida. Inmediatamente echó el vuelo, y comenzó a sobrevolar en círculos a Dunia, quien en tierra seguía con gran ímpetu todos sus movimientos.
  "Dunia, debemos tener cuidado con Respiro. Te puede llegar a agotar antes de lo que piensas. Creo que ya sé qué hacer, comienza a correr en círculos."
  Dunia ejecutó la orden y comenzó a correr en círculos hasta alcanzar la velocidad de Swanna. Un poco más tarde, ya la había adelantado en tierra unas cuatro veces.
  Gerania seguía todos los movimientos de Dunia con la mirada.
  —¡Swanna, ahora! ¡Pájaro Osado!
  Swanna descendió a gran velocidad hasta el suelo, con la intención de impactar contra Dunia.
  —¡Dunia, ahora!
  —Si lo que pretendes es saltar, así la vas a llevar clara.
  Dunia desplegó unas brillantes alas blancas, con impulso logró saltar por encima de Swanna. Cuando esta iba a placarla con Pájaro Osado, Dunia aprovechó la ráfaga de viento de Swanna para volverla en su contra. A pesar de su poca maestría con el vuelo, logró ponerse por fin por encima de Swanna.
  —¡Garra Umbría una vez más!
  Dunia giró en el aire hasta arañar con sus garras a Swanna con gran potencia.
  Entre el daño producido por Pájaro Osado y la fuerza de su segundo ataque, Swanna se había debilitado.
  —¡No puede ser! He sido una estúpida... ¿Cómo no he podido ver esa maniobra? ¡Si la aprendí en mis inicios como entrenadora!
  —Ya sabes lo que se dice de nunca olvidar de dónde vienes, Gerania.
  Gerania parecía sumamente frustrada, era algo que se veía a simple vista en su mirada. Había sido vencida demasiado fácilmente.
  —Bueno, habrás ganado la medalla de mi gimnasio, pero no vencerás al Alto Mando. He de avisarte de que una conocida mía lucha en el Alto Mando, y a pesar de su desventaja puede volver las tornas a su favor.
  —Gerania, ha sido un placer combatir contra ti.
  —¡Cómo no, si has ganado!
  Dalia y Gerania se estrecharon las manos, y la líder le hizo entrega de la medalla Jet.
  —Mucha suerte en tu viaje, Dalia Suzuki. Nadie me había vencido nunca tan rápido, siéntete afortunada.