Accidente de corazón, secretos olvidados...

Capítulo 22

Lo pensé toda la clase. Y durante el recreo me encontré con Alice y Joy. Hicieron todas las preguntas que pasaron por sus cabezas. Se tomaron todo el recreo para hablar.

Yo necesitaba urgentemente hablar con Alex, y ellas no cerraban la boca.

De un momento a otro Alice soltó la pregunta:-¿Y que, te gusta mi hermano? Abrí la boca para responderle, pero Joy interrumpió:-¿No, a ella le gusta Alex no?-Ambas me miraban expectantes. Cuando me salvó el timbre, y contenta fuí a mi asiento. Luego caí en que se había ido mi oportunidad de hablar con Alex. Y ahora debía esperar hasta el almuerzo.

Horas y horas de historia, que yo vagué con mi vista en la ventana.

Si todo lo que pasó, fué por su culpa, no podía perdonarle tan facil.¡Dios, como deseo salir de esta sala!-Pensé.

Y lo mas inesperado pasó, se ve que unos alumnos habían puesto bombas de humo en cada salón de la escuela, como broma.

La profesora dijo que salgamos ordenadamente por la puerta, mientras ella abría todas las ventanas. Pude ver que en todas la aulas pasaba lo mismo. Y los chicos corrían desenfrenados por salir. Al igual que en mi salón.

Tomé rapido mi celular y le envié a Alex el mensaje:-Veme en la sala de arte. Allá te explico.

Lo guardé, agarré la mochila, y salí rápido hacia nuestro encuentro. Cuando llegué Nil estaba guardando todas las pinturas y lienzos por temor a que el humo los arruine. Lo ayudé.Y noté, que no había una bomba de humo en la habitación. Por eso cerré la puerta para que el humo de afuera no entrase. Me senté junto a él mientras el desorden se volvía en silencio. Y ambos suspiramos aliviados.

Me llegó un mensaje:-Eh? Yo ya estoy en casa, salí cuando comenzó el deesorden.¿Quieres que vaya para allá?

Mierda!-Dije. A lo que Nil, quien me observaba arrugó el ceño.

No. Voy para allá.-Texteé.

-Nil.- Necesito que me lleves a tu casa.

-Eh? Que pasa?-Dijo.

-Necesito preguntarle a Alex como era la mujer que nos capturó en el edificio. Porque creo que se quien es.

-Nil se levantó.- Bien nos vamos. Toma tu mochila y..

Miró algo en la ventana. Yo seguí su mirada, el hombre sospechoso estaba en el aula del otro lado de la ventana, que está a cincuenta pasos de donde estamos. Nos estaba observando. Se dió la vuelta.

Sin decir nada Nil tomó mi mano y largamos a correr. Sentíamos sus pasos detras de nosotros.

-No tengas miedo.-Me dijo.

En instantes pasamos del segundo piso al estacionamiento. Nos montamos en la moto y le pasamos por delante al hombre, cuando el recien salía de la escuela. Estaba abrazada a Nil fuertemente. Y el nervioso me dijo:-Escucha, no te voy a dejar sola, pero me estoy quedando sin gasolina.

-Está bien acércate lo más que puedas a tu casa. El resto lo haré corriendo.- Me dió las llaves.

-Le mandaré un mensaje al idiota ni bien detenga la moto.-Respiró hondo.-Al menos el tipo ya no nos sigue. Eso les debería dar algo de tiempo.

Llegamos, faltaba una cuadra para su casa cuando la moto se detuvo. Yo largué a correr, Nil no podía dejar la moto, así que se quedó llamando a alguien que la recogiera.

Toqué la puerta tres veces y Alex me abrió. Me metí adentro, cerré todo muy bien. Y me dejé caer al sillón aliviada.

-Que pasa?-Preguntó.

-Necesito saber como era la mujer que nos capturó.

-Si, era alta, de cabello rubio.

-Detente.-Dije.-Pensé que podría ser mi madre, pero no lo és. Ella tiene el cabello castaño.

-Tu madre? Pero, por qué?

-No lo sé, mis conclusiones apuntaban a ella. Y ya que es una de las únicas que no recuerdo.

-Mmm. Te llevo a casa? Pareces asustada.

-No! Temo que el hombre podría estar afuera.

-Te siguió hasta aquí?

-No, creo que Nil lo perdió en el camino.

-Ah.- Se quedó en silencio.- Y que más te hizo pensar que podría ser tu madre.

-La profesora le entregó esa carta de "Abrir si pierdes la memoria.", y ella no sabía que era falsa, pero igual no me la hizo llegar.

-Mm, eso es raro.- Se levantó.-¿Quieres café?

-Si.

-Y quien estaba entre tus otras opciones?

-Joy. Porque no la recuerdo.-Lo pensé.-No quiero sospechar de ella.-Tomé la carta y comencé a leer mientras Alex hacía el café.

-Tienes razón.-Dijo Alex.

"Joy es una chica de cabello corto y rizado, muy bonita y torpe. Pero siempre dulce

Es mi mejor amiga, al igual que Alice, y la quiero mucho. Más el otro día la ví en el baño tapando, unos golpes que tenía por sus brazos.Le pregunté si había sido el idiota de Lucas. Y negó con la cabeza. Entonces le tomé en el brazo. Y enojada dijo:-No todos tenemos un padre como el tuyo.- Yo aún enojada, no le respondí. Solo, solté su brazo y me alejé.

Joy sufre violencia doméstica, por parte de su padre. Quien en reiteradas veces me demostró ser un hijo de puta."

Alex con dos tazas de café en la mano dijo:-Que haces?

Recordar.-Dije con lágrimas en mis ojos.

Me sentí mareada, ví a Alex soltar las tazas de café que cayeron al suelo. Mientras yo me sentía adormecida, y caía con la misma lentitud que las tazas.

Estaba atrapada en mi propio cuerpo, y cada vez me sentía mas debil. La cabeza me dolía, y podía ver todo lo que pasaba, aunque no podía hablar, ni moverme.

Alex me tomó la cabeza, y con desespero repetía:-No, no, no.

Llamó a una ambulancia y recapituló en varias ocasiones, que debía obligatoriamente llegar y llevarnos hasta el hospital en menos de treinta minutos. Ahí comprendí, yo era una idiota, había ignorado las advertencias del doctor. Esta era la tercera vez que perdía el conocimiento en un mismo día. Si esa ambulancia no llegaba a tiempo, podría morir.