Que hubiera pasado si...

6. Zoológico

Después de desayunar Severus y Harry, salieron del departamento en compañía de Shiryu quien se había enrollado en la pequeña manita del infante, manteniéndose calientito bajo la chamarra de Stitch.

-Bien Harry- Severus lo tomo en brazos, caminando por la calle. -Iremos a comprar ropa y todo lo que necesites- Estiro la mano, haciendo detener un taxi, subiéndose acomodo a Harry en el sillón, poniéndole el cinturón de seguridad. -Al centro por favor-

-Claro que si- Fue la respuesta del conductor, antes de arrancar el taxi. El cual condujo por distintas calles, y algunos centros comerciales. Minutos después estaciono frente a un establecimiento de ropa para niños. Severus le pago lo correspondiente y bajo del taxi cargando a Harry.

-Papi, puedo camina solito- Harry se encontraba abrazado al cuello de su papá cuando le dijo aquello.

-Lo se cielo, pero no quiero perderte de vista de nuevo- Besando su mejilla, se adentraron en la tienda de ropa, caminando hasta el mostrador -Buenos días señorita- Comento con coquetería Severus, haciendo uso de lo aprendido por su esposo y sonrojar a la dependienta.

-Bue_buenos días, en que puedo ayudarles?- Mirando tímidamente al guapo pelinegro en frente suyo.

-Me gustaría comprar un guardarropa completo para mi bebé, y todo lo que sea necesario para cuidar de él. Vera hace tiempo se quedó con mi ex y acabó de obtener la custodia de él, pero la inconsciente de su madre solo me ha dado lo que traía puesto...- Poniendo cara de cachorrito apaleado.

-Oh, que horrible, madres como aquellas no deberían tener hijos tan lindos, y esposos tan apuestos- Guiñándole el ojo.

El pelinegro sonrió victorioso, mirando a la chica -Entonces ¿Podría ayudarme?-

-Claro que si- Moviéndose de detrás del mostrador, con una seña llamo a un chico pelirubio dejandolo a cargo de la caja. -Le parece si primero vamos por la ropa casual?-

-No, para nada-

-Exelente- La señorita camino tranquilamente, siendo seguida de cerca por sus clientes hasta la bodega, de dónde saco un par de revistas con niños vestidos de distintas maneras. -Aquí están los modelos con los que contamos en este momento- Entregándole la revista.

Severus tomo asiento en el sillón de dos plazas, dejando al menor sentado en una de sus piernas mientras ambos veían la ropa.

Cada vez que les gustaba algo, la dependienta tomaba nota del modelo, color y talla en una libreta. En cuanto hubieron terminado, les entrego otros más de ropa formal, aunque de esos no les llamaban tanto la atención, enseguida fueron los zapatos y tenis.

Pasadas dos horas Harry ya tenia un guardarropa completo, compuesto por 15 pantalones de mezclilla, en colores: azul, negro, verde, blanco y cafe, 20 playeras en conjunto con camisas en los mismos colores, con rayitas, cuadros, o con algún dibujo, tres trajes completos de vestir, 5 pares de zapatos en los mismos tonos, dos pares de tenis unos blancos y otros azules, 10 suéteres: uno de osito Pooh, de Sully y Mike de MonsterInc, de un león (muy a pesar de Severus, sin embargo fue el único suéter que Harry pidió), uno de chimuelo de How you train your dragon; todos con capuchita (gorrita) del rostro del dibujo animado, uno verde con una perpiente plateada, y tres estilo deportivo en tonos: negro, verde y gris, para finalizar con 7 pijamas, tres eran verdes en distintos tonos: pantalón y suertercito, una de un oso café, una de Stitch, y dos de un short a media pierna, y playera en tonos blanco y azul rey.

De 57 cosas Harry solo había pedido siete, lo demás lo habían escogido Severus y la dependienta.

Severus había pagado en efectivo y despidiéndose de la chica habían salido con varias bolsas, se adentraron en el baño donde Snape encogió todas las cosas metiéndolas en el bolsillo de su chaqueta.