Capítulo 24: Nuevas reglas

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Un ligero golpe en el hombro me devolvió a la conversación. Miré al culpable, era Josh. ¿Y ahora qué quería?

Hasta ahora todo había ido bien. Cuando entramos en la sala pensé que todo el mundo me iba a mirar y murmurar, pero nos integramos como una pareja más a la fiesta. La sala me dejó bloqueada unos segundos. Era un espacio amplio y, al igual que el resto de la casa, tenía un estilo clásico, pero lo que sin duda cautivo mi atención fue la gran lámpara de araña que colgaba en medio del techo. Nunca había visto nada igual. Intenté disimular la impresión, pero no debí de tener mucho éxito, porque Josh me dio una vuelta por la sala antes de unirme a un grupo de cuatro jóvenes de nuestra edad que charlaban.

Me presentó de forma rápida antes de apartarme a un lado con uno de los jóvenes. Era un chico de melena rubia y del único que retuve el nombre, debido al simple hecho de que se llamaba Jake, para ser más exactos: Jake Harrison. En la presentación no pude evitar lanzar una mirada recriminatoria a Josh que la ignoró para ordenar a Jake que no me dejase sola en ningún momento. En otras circunstancias me habría molestado, pero Jake parecía simpático, no tenía ese gesto altivo que presentaba el resto del grupo y sonreía con facilidad.

La conversación del grupo rápidamente me aburrió. Debatían sobre una infraestructura que El Consejo había aprobado realizar en el Sector 2. Pronto mi cabeza se fue por otro lado examinando las personas de la fiesta. Había contado una veintena de personas, la mayoría rondaban entre los veinte y los treinta años. Curiosamente mi vestido no resaltaba, buena parte de las chicas de la fiesta llevaban vestidos similares, así que deduje que debía de ser una moda del sector. Lo único que me diferenciaba del resto de mis compañeros de grupo era que en lugar de beber el líquido amarillento con burbujas que ellos bebían estaba tomando un refresco. Un camarero me había ofrecido una copa del líquido pero Josh se negó pidiendo un refresco para mí. Eso hizo que tuviese curiosidad por esa bebida de la cual Josh me había privado, pero pronto se me olvidó concentrada en analizar a la gente. No podía evitar quedarme embelesada observándoles. Se movían de una forma suave como si bailasen a pesar de que no lo hacían. Su forma de hablar también me intrigaba, era calmada y melodiosa.

Ninguno de ellos me llamó tanto la atención como una de las dos chicas que formaba parte del grupo. Rezumaba elegancia y clase, además de ser la chica más guapa que había visto en mi vida. A diferencia de la otra chica y de mí, ella no llevaba uno de los vestidos recargados. Vestía un bonito vestido largo donde la parte de arriba era plateada y la de abajo era de una tela fina negra transparente que dejaba ver unas piernas largas y bien moldeadas. Tenía el pelo largo y liso de un color negro intenso que le cubría la espalda que llevaba al aire, sus ojos eran azules y la boca carnosa la tenía pintada de rojo pasión. Nunca había imaginado que una persona pudiese transmitir tanta belleza. Seguía dando pequeños sorbos a mi refresco todavía impresionada por la chica cuando sentí el ligero golpe de Josh que me devolvió a la tierra. Ahora me hacía indicaciones con disimulo hacía el resto del grupo. Todos me miraban. No tenía ni idea de qué esperaban de mí porque no había estado prestando atención.

—¿Qué opinas sobre la infraestructura que va a hacer el Gobierno? —me preguntó Jake apiadándose de mí. Tenía cinco pares de ojos pendientes de mi respuesta.

—Eh... —empecé algo cortada. Me intenté infundir valor y sonreí a la par que decía—: Realmente no tengo ninguna opinión sobre la infraestructura.

La muchacha de la que hacía unos segundos había admirado su belleza hizo un gesto suave de desdén, pero fue tan elegante que casi fue imperceptible.

—Ese es el problema con la gente de sectores inferiores. Les da lo mismo La Ciudad. Solamente se preocupan de sus problemas —comunicó a sus compañeros como si yo no estuviese allí. Pero mi cabeza y mi estómago habían obviado ese detalle para centrarse en otro ¿¡¿Sabían de que sector era?!? No tardé en contestarme, por supuesto que sabían de dónde era, si no era Gregory quien lo había dicho no habrían tenido problemas en atar cabos sueltos y deducir que yo era la chica que salía junto a Josh en todas las cadenas.

Sector 0: El despertar (libro 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora