Roommates

Capítulo 10 - Nuevo trabajo ¿nuevo ligue?

Capítulo 10 - Nuevo trabajo, ¿nuevo ligue?

Narra Daniela

Me había levantado hace más de una hora, ya estaba lista y justo estaba bajando el último escalón de la escalera que da con la primera planta. Doy un paso más para ir a la cocina cuando de ese mismo lugar sale una mano con un plato desechable lleno de barbasol que se estrella en mi rostro. Abro mi boca en una perfecta "O" y quito de mis ojos el barbasol.

- ¿Que rayos pasa contigo, Diego? - pregunto enojada.

El voltea y camina hacia el bote de basura para botar el plato. - Nada, solo que eso y mucho más debería hacerte por meterte conmigo. Nadie te dijo que enviaras mensajes diciendo que yo era gay. - volteó y me miró serio.

Rodé los ojos - ¿Aún sigues con lo mismo? No deberías enojarte si sabes que no es verdad. - dije limpiando mi rostro con servilleta y agua en el fregadero.

- Aquí lo que pasa es que las chicas no saben si es verdad o no.

- Conociéndote ya mañana tendrás un ligue nuevo, descuida. - dije seria.

- De hecho, ya tengo uno. - dijo arrogante.

Maldito ¿porque todas las chicas (menos yo, obvio) tenían que ser tan tontas como para estar con él?

Tú una ves fuiste parte de esas tontas.

Ignoro esa vocecita inoportuna e imprudente y vuelvo a mi habitación.

(...)

- Daniela, Daniela, Daniela ¿por qué me has estado evitando todo el día? - pregunta Xian.

- Xian, ya voy de salida. - dije cansada, tenía muy poco tiempo para llegar a mi casa y luego ir a mi primer día de trabajo.

- Solo responde mi pregunta.

- Está bien, la voy a responder. Te he estado evitando porque quiero y me da la gana, perdón pero esa es la verdad. - dije seria

- No creí que fueras así.

- Y yo no creí que fueras amigo de Diego.

- ¿Es por él? ¿Por Diego?

- Si si por él, porque no quiero tener nada que ver con alguien cercano a Diego, además te vi con aquella chica saliendo del baño ¿qué te crees que soy? - dije y seguí mi camino.

- No no, espera - me detuvo y se posicionó frente a mi.

- ¿Qué? - dije impaciente.

- Todo eso tiene una explicación, te lo juro.

- Ajá si claro, ahí te ves imbécil. - caminé hasta mi auto y subí a el saliendo a toda velocidad de la universidad.

Llegué a la casa y dejé mi mochila en la sala. Fui hasta la cocina y bebí un poco de agua. Me miré al espejo y sonreí, como siempre hacía. "Vas a ganarte ese trabajo, Daniela." Me dije a mi misma mirando mi reflejo. Cogí las llaves y una cartera donde puse las cosas necesarias y abrí la puerta encontrándome con Diego.

Rodé los ojos.

- ¿A dónde vas? - preguntó

- Al trabajo - contesté simple - ¿Y tú qué haces aquí a esta hora?

- Se me quedó un trabajo que tengo que entregar. No me esperes que llegaré tarde.

- ¿Muchas clases?

- Una chica con unas piernotas que ni tú las tienes. - respondió arrogante.

No estaba celosa, tampoco molesta pero no le dije nada y salí de la casa ignorandolo. Él con muchas chicas detrás de él aún cuando yo esparcí el rumor de que era gay y yo que pierdo un ligue por su culpa y no consigo a nadie más, genial. Camino hasta la cafetería por que está haciendo un lindo día, mas bien una linda tarde. El trabajo queda cerca y yo no soy muy atlética que digamos, caminar me hará bien. Llego a la cafetería y voy hasta la caja donde está una señora, la misma de ayer.