"Tras terminar su largo trabajo de investigación exhibió su nuevo don ante el rey de Mysticland. El rey lo considero una excelente invención siempre que se usara con buenos fines. Con el tiempo el resto de los habitantes de Mysticland se enteraron de sus poderes y le apodaron la wiccana, que en su mundo significaba "bruja de la ciencia", antes de que fuera malinterpretado en el nuestro. Poco a poco Minerva aprendió a utilizar sus poderes y se dio cuenta de que era más poderosa cuando sus sentimientos eran positivos."

Mi abuela hizo una pausa y cambio el tono de su voz.

"Sin embargo, algunas mentes codiciosas, sobre todo la de varios magos, querían utilizar el don de Minerva para su propio beneficio. Un mago descubrió como lo había conseguido Minerva. O casi. Lo que en realidad había descubierto era lo opuesto, la forma de utilizar los mismos poderes y otros más peligrosos con sentimientos negativos. Uso un colgante con el dibujo de una rosa que se tiñó de negro al entrar en contacto con el cristal que él había utilizado. Cuando el rey se enteró lo expulsó y como respuesta, el mago robó al rey su más preciada posesión material, el Haz de Luz. El Haz de Luz era un objeto de gran poder que funcionaba igual que los cuatro cristales de Minerva, de un color azul muy claro y en forma de esfera, además de ser una de las fuentes principales de energía de Mysticland."

"Fue por eso que el rey la pidió que fuera tras el mago que había huido a nuestro mundo. Minerva llegó a la Tierra, a Inglaterra concretamente, en el siglo XVI. Durante varios días busco al mago hasta que lo encontró. Consiguió arrebatarle el Haz de Luz, pero el mago huyó a Norteamérica, en uno de los barcos que viajaba al Nuevo Mundo en busca de una vida mejor. Minerva encontró la forma de hablar con el rey y le sugirió que si podía dejar a la humanidad el Haz de Luz para ayudarles a evolucionar. El rey aceptó, ya que, aunque el Haz de Luz era importante para Mysticland, poseen otras fuentes de energía. Aunque a cambio, Minerva debería permanecer para siempre en nuestro mundo, encontrar al mago y proteger el Haz de Luz. Aunque la elección no fue fácil, Minerva aceptó. Dejó el Haz de Luz a los ciudadanos de un pequeño pueblo de Inglaterra para que pudieran utilizarlo y protegerlo, puesto que se fiaba de ellos. Después se marchó a Norteamérica con la esperanza de encontrar al mago. Aunque no volvió a saber nada de dicho mago, Minerva sí que conoció al amor de su vida, con el que se casó y tuvo cuatro hijas, todas ellas pelirrojas. Su marido sabía de sobra lo que era capaz de hacer Minerva y sus hijas obtuvieron un cuarto de ese don (al parecer ser, este don solo lo han podido obtener las mujeres de nuestra familia), que se manifestó cuando estas cumplieron los dieciséis. Por alguna extraña razón cada una tenía un poder, en vez de los cuatro. Minerva no dudo en enseñarlas a utilizarlo."

"Pero un día Minerva tuvo un sueño en el que, en un futuro la Tierra se vería en un gran peligro y en el que habría una última wiccana, siempre y cuando ella hiciera algo. Calculo de alguna forma cuando llegaría ese día e ideó un plan para intentar evitar aquella catástrofe. Volvió a Inglaterra, al pueblo donde había dejado el Haz de Luz y usando su energía, introdujo un líquido en la sangre de sus hijas, pues desconocía cuál de ellas sería el antepasado de la última wiccana. Lo que haría ese líquido era almacenar parte del compuesto químico de los poderes y liberarlo diecinueve años antes de que sucediera dicha tragedia. Dieciséis para que se manifestar el don, dos para aprender a usarlo y otro por si había algún error en los cálculos de la fecha de la tragedia. De modo que, la última heredera podría controlar los cuatro poderes. Esto implicaría que habría una generación que se vería privado de este don."

"Paso el tiempo y surgieron numerosos grupos de mujeres que aseguraban ser wiccanas (brujas), mas no sabían lo que era en realidad, de ahí el claro ejemplo de los juicios de Salem. En el siglo XX, surgió la wicca, una estúpida religión pagana que, en mi opinión es un insulto para nosotras y de ahí surgió la incorrecta definición de wiccana. Sin embargo, las verdaderas wiccanas, las descendientes de Minerva, se dedicaron a vivir tranquilamente. Por desgracia, tuvieron que verse obligadas a cambiar el apodo que una vez había recibido Minerva y en su honor cambiaron su apodo por el de silbaliana, que hace referencia a aquella que posee dones proféticos y gran sabiduría. Ante todo, siguieron protegiendo el Haz de Luz hasta que desapareció durante la Segunda Guerra Mundial ─hizo otra pausa y continuó─ Las silbalianas solo usaban sus poderes si era estrictamente necesario. Algunas de ellas tuvieron hijos e hijas y estas obtuvieron la posibilidad de controlar algún elemento, independientemente de cuál de las cuatro hijas de Minerva fuera su antepasado. No obstante, actualmente solo quedan dos. Tú y yo."

La Hechicera ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora