Mi octavo reto.

47 5 141
                                    

Bueeeno

Fantasía urbana, todo el cliché posible y en la semana LGTB+

¡Pues aquí está!

Lizzy atraviesa la multitud cuando a lo lejos ve a Zac y a Ashley charlando. Es el desfile del orgullo gay en Nueva York y las calles están abarrotadas de gente con la bandera arcoiris y vestidos con colores vistosos. Hay muchas parejas homosexuales también. A Lizzy le encanta aquello. Es tan... no sabe cómo explicarlo. La gente así suele estar muy presionada por la sociedad actual. Allí pueden ser tal y como son realmente. Libertad. Llega hasta ellos.

– ¡Zac, te dije que te quedases cerca de mi! –le riñe, claramente molesta.

Así es. Ella es su niñera. De su misma edad; pero mucho más responsable. Ella necesitaba el trabajo y los padres de Zac necesitaban un canguro. Y así fue como el odioso chico guapo y popular del instituto pasó a convertirse en el chico al que tenía que cuidar.

– Lo siento. Es que vi a Ashley llorando y vine a consolarla.

Lizzy pone su mirada sobre la rubia y se da cuenta de que es cierto, pues esta tiene los ojos rojos y muy mala cara.

– Es por Tom –prosigue Zac–. El muy cerdo estaba enrollándose con Alyson justo delante de su casa.

Por lo que Lizzy sabe, Ashley estaba con Tom. Pero éste la dejó por Selene. Después no sabe bien qué pasó que le pidió perdón y cuando parecía que estaban bien ahora le hace esto. En fin, la pobre chica... Ella es la típica nerd, así que ni siquiera sabe cómo Tom pudo fijarse en ella.

– Ya veo... Bueno, no tardes. Voy allí.

Lizzy se acerca al escenario. Se mimetiza con el ambiente, coge un vaso de alcohol que ni siquiera sabe qué es y salta repetidas veces con la canción que está sonando, como todos. Entonces se fija bien en el cantante: es Harry Styles. Ella, que es una fan incondicional de Harry, salta y grita con más ganas. Así que, llevada por la emoción del momento, deja de vigilar a Zac.

Un vaso de más. Bueno, un par de vasos de más y Harry se despide de su público. Entonces Lizzy aprovecha para colarse tras las vallas y acercarse a la caravana con la que ha venido Harry a Nueva York. Los guardaespaldas en seguida la frenan, pero ella empieza a gritar el nombre del cantante y éste decide salir a conocerla.

– Hola Harry –dice casi desmayándose.

– ¡Hey! ¿Cómo te llamas?

– Soy... –se marea levemente, pero se recupera– Lizzy.

– Para Lizzy... –dice escribiendo en un papel–. Y ahora una foto, ¿te parece?

Lizzy, flotando en una nube, se hace la foto con Harry Styles y luego este se despide con la mano y se da la vuelta para meterse en el camerino-caravana. La expresión de Lizzy se vuelve seria.

– Espera... –le dice, a lo que él vuelve a girarse hacia ella–. ¿Ya está?

– ¿Cómo que "ya está"? –pregunta Harry, extrañado.

– A ver, nos acabamos de conocer. Soy muy fan tuya... ¿no me vas a invitar a dar un paseo?

– Mmh... –Harry no sabe qué decir, todo es muy confuso.

– Se supone que esta iba a ser nuestra historia de amor verdadero e infinito.

– Pues... lo siento pero tengo prisa.

– ¡No huyas de mi! ¡Este es mi fanfic, no lo estropees!

– Tu fan... ¿qué?

– ¡Oh, vamos! Cállate y bésame; de lo contrario, nunca triunfaré en Wattpad.

Retos y Chorradas variasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora