Trapped with a demon.

Peter Pan never fails.

-Bah, tonterías.- respondió Evolette, lo cual sólo sirvió para ensanchar la sonrisa de Peter Pan. Su parte favorita de este juego siempre era el "creer/no creer". -Eso no es posible.-

Los ojos de Peter centellearon bajo la pálida luz de la luna mientras miraba a la chica con diversión.

-Claro que lo es. ¿Porqué habría de mentirte?- dijo él mientras retrocedía un paso para dejar de respirar el mismo aire que respiraba ella.

-Bueno, no lo sé. Quizás por que...- intentó buscar una escusa -Por que sí. No pareces de fiar.-

Una pequeña risa brotó de los labios de Peter al escuchar la más pura verdad.

-Tienes razón en eso, niña, no lo soy.-

-No me llames niña.- bufó ella mientras se cruzaba de brazos. Para sorpresa de Peter, fue lo único que dijo.

¿En verdad su única preocupación era esa? ¿El ser llamada "niña"? Al menos eso quiso dar a entender, lo cual sólo hizo a Peter más curioso. La chica parecía un interesante caso.

-Ya te he dicho, lo eres.-

Evolette se mantuvo firme en su postura.

-Venga, ¿porque no me acompañas?- dijo Peter extendiendo una mano hacia ella de manera amable, algo muy poco común en él.

La chica miró su mano con cierto resentimiento.

-No me hagas repetirlo de nuevo.- gruñó Peter, aún sin dejar de ofrecerle la mano.

-No.-

-¿No?- Peter soltó una carcajada al aire, con un toque siniestro. -¿Me has dicho que no, a mi?- enarcó una ceja con superioridad.

-Así es. He dicho que no.- dijo Evolette con decisión.

La carcajada de Peter cesó y este se mantuvo serio, carente de expresión.

Volvió a tomarla del brazo, esta vez haciéndole un poco de daño y acercó su boca al oído de la chica.

-En realidad no te estaba dando a elegir.-

Evolette intentó soltarse del agarre, provocando aún más la repentina furia de Peter. Pero cualquier esfuerzo que ella hizo por soltarse fue en vano, ella no estaba enterada de que Peter Pan nunca falla.