Viuda A Los Veinte

CAPÍTULO 3:

Hoy es sábado en la mañana, hay clima de lluvia, algo no muy extraño en esta época de Noviembre. Sophie está cansada por todo el trabajo que tuvo en la semana y decidió que la mejor forma que tendría para pasarlo hoy seria reviviendo toda la trilogía de sus películas favoritas, o sea "Los juegos del hambre" y como ya estoy lo suficiente aburrida me pongo de pie para ir a la nevera y extraer un poco de la ensalada cesar que deje ayer, sí, soy vegetariana y esta es mi mayor adicción. Regreso al sofá donde sophie grita como una loca "¡Peeta, real, no la mates. Katniss te ama!" y un ruido que apenas logro escuchar en medio de las exclamaciones de mi amiga me sobresalta, sin embargo reviso mi teléfono y no consigo nada, ni notificaciones ni mensajes. Así que procedo a meterme una cucharada de mi ensalada en la boca cuando el mismo sonido se repite pero, esta vez sophie da pausa a la tv y tuerce los ojos.

—El timbre, ¿Por qué rayos la gente no puede dejar de molestar los sábados? Seguro es el conserje o algún idiota fastidiando.- Se queja Sophie antes de ponerse de pie.

—Sophie, si quieres continua viendo al rubiecito del pan mientras yo voy a ver ¿Vale?-sugiero en medio de risas, antes de que le arranque la cabeza a cualquiera que "osara" interrumpir su tiempo a solas viendo al "amor de su vida"

Vuelve a sonar el timbre.

—Se llama "Peeta" pero, te la dejo pasar solo porque tengo flojera de ir a ver, así que ándale que parece que quiere acabar con mi timbre.-Responde entornando los ojos y dándole play a la película nuevamente.

Me encamino hacia la puerta, veo a través del pequeño agujero en la puerta y diviso al detective Roberts que dirige su mano hacia el botón del timbre por lo que podría ser una cuarta vez.

Abro la puerta y el me ve de arriba abajo, al menos llevo unos vaqueros y una camisa holgada negra que dice "I LOVE DONUTS", voy descalza y llevo mi pelo recogido en una coleita. Aun así, me logro sentir intimidada por la mirada de este hombre. No digo nada.

—Nos vemos nuevamente, señora Brenden ¿O debería decirle Brooks ahora que su esposo está muerto?—Así me saluda de manera sarcástica el oficial imbécil, como he decidido denominarle.

Sin embargo, frunzo el ceño y decido ignorar su comentario.

—¿A qué se debe su visita, detective Roberts?-pregunto al detective, mientras mantengo mi mirada firme, esperando saber a qué se debe tan desagradable visita.

Sonríe otra vez y me estira un sobre amarillo, lo tomo con mi mano izquierda y con la curiosidad aumentando dentro de mí.

—Una notificación referente a su juicio competente el día Lunes a las 9:00am, allí adentro estarán las indicaciones,—Explica señalando el sobre que ahora se encuentra en mis manos, luego se inclina un poco hacia mí y yo doy un paso atrás pero no lo suficiente para alejarme de la puerta—Tiene suerte de que los Brooks tengan mucho dinero pero, cuando el juez le pregunte tantas cosas y no aguantes más la presión; ni tu abogado ni todo el dinero del mundo podrán salvarte de pudrirte tras las rejas y yo estaré allí para verlo.—Finaliza con una mirada llena de odio dirigida hacia mí, que yo le devuelvo instantáneamente.

—Nada de eso pasara, porque yo no soy culpable y usted estará allí para ver cómo me dictan inocente, así que con o sin su permiso me despido. Feliz fin de semana, detective.-Cuando estoy a punto de cerrarle la puerta en la cara, mete el pie y responde con una voz que me pone la piel de gallina.

—El alma de Alex no descansara hasta ver que pagues todo lo que has hecho, Alice Brooks... y yo tampoco—su respuesta es casi un susurro y antes de poderle responder, ya se ha marchado.

Presiono mi mano, quería hacer un puño pero, el ruido de un papel arrugándose me sobresaltó y recordé que tenía el sobre en mis manos, cerré la puerta y me dirigí de vuelta a la sala, donde sophie me debe estar esperando.

Es un departamento de alrededor de ochenta metros cuadrados, tiene dos habitaciones, una sala-comedor, tres baños y una cocina. Es muy cálido y está decorado de manera muy alegre y sus mayores tonalidades son de rosa pálido.

—Katniss, debes permitirte ser feliz por Prim, ella lo hubiese querido y ¡Peeta papasito rubio te ama!-Le habla otra vez mi amiga a la tv.

Al verme entrar nuevamente a la habitación le da pausa al televisor y pone el bowl de palomitas en la mesita que está al frente del sofá, se para y me analiza.

—¿Qué pasó, por qué estas como si hubieras visto un fantasma y que contiene ese sobre?-Interroga sophie

—El detective de la vez pasada estaba en la puerta y me dijo que es una notificación y que no debo faltar ¡Odio a ese imbécil y todo por lo que estoy pasando!- suelto exasperada, le entrego el sobre y me siento en el sofá.

Ella examina el sobre y frunce el ceño, me devuelve la mirada y se sienta a mi lado; seguidamente comienza a sacar el papel que está envuelto y comienza a leer.

—El Estado de California notifica a la Sra. Alice Brenden, de estado civil: Viuda a hacer acto de presencia en los tribunales ubicados en ...—sophie dicta la dirección frustrada y procede— el día Lunes 19 de Noviembre del presente año a las 9:00am, en el cual se le incautan los delitos de homicidio en primer grado culposo y agresión doméstica. Debe dirigirse a la hora y dirección que se le ha asigna y tiene derecho a llevar un abogado y en caso de no poseer uno el Estado se lo asignara, sin más a que hacer referencia y esperando su presencia para rendir declaraciones, nos despedimos. Juzgado del Estado de California.-Finaliza mi amiga, suspirando antes de llevarse una mano a la frente y dejando el papel en la pequeña mesa decorativa que está a su derecha.

Mantiene silencio por unos segundos y cuando creí que no diría nada, por fin habla.

—¿Tienes un abogado? Tengo un tío que tal vez pueda ayudar y no cobra mucho.-Intenta ayudar sophie.

Yo sonrió, le hago un gesto para que se quede tranquila y sé que debo hacer.

—Tranquila, el abogado de la familia me ayudara, el Doctor Jhonsson. Debo llamarle justo ahora y esperar sus instrucciones. No hay problema. Si quieres quédate viendo películas, yo iré llamándolo.-Tomo mi móvil y echó a andar hacia la cocina. Me paro a mitad de camino y volteo cuando sophie me nombra.

—Vale Ally, no estas sola, llama y me avisas en que quedo.-Me dice en tono de apoyo, levantando el pulgar derecho.

—Vale sophie.-Guiño un ojo y sigo hasta la cocina.

Esa tarde duro un buen rato hablando con mi abogado y me dice que me apoyara en esta situación, no me preocupo por el dinero porque aún tengo suficiente, nunca deje de trabajar para la empresa de mis padres y aún estoy trabajando en el proyecto de Brenden Inc. Y siempre he sido de ahorrar así que sí, tengo dinero suficiente para pagar al abogado y mucho más.

Me citó en una hora en un restaurante elegante que está un poco cerca de la casa para discutir estrategias, espero que no me haga mentir. Estoy cansada de todo esto, Alex nunca me demostró ser alguien conflictivo ni mucho menos que tuviera miles de enemigos. Todos exigen una justicia que no les puedo dar.