Last Kiss - Charles Aranguiz

Cap 18

El viaje hacia la casa era cada vez más incómodo, mi papá iba en absoluto silencio, solo se escuchaba la música de la radio que iba en un volumen muy bajo. Estaba segura que a penas llegáramos a la casa, mi papá iba a explotar. Cuando llegamos a la casa, el solo se bajó y espero a que yo lo siguiera, entramos a la casa y apenas cerré la puerta, comenzó la batalla campal

- ¿Ahora me vas a responder que carajo hacías en la casa de hombre, o no?- dijo hablándome fuerte. Pegué un salto, ya que mi papá jamás me había hablado de esa manera. Pero supongo que esta vez de algún modo, había sobrepasado los límites de su paciencia. Ni siquiera me dejó responder y siguió retándome- Nos mentiste.. a tui mamá y a mi, nos dijiste que ibas a salir con una amiga de la Universidad y nosotros como te tenemos confianza, te creímos, porque nunca nos has mentido, pero a las horas nos llaman los carabineros diciendo que estabas "detenida" en la comisaria ya que estabas sin documentos en la casa de un hombre que había sido denunciado por violencia intrafamiliar.

- Papá – dije al fin con un nudo en la garganta que iba creciendo a cada segundo Yo no quería decirles porque no era nada oficial.

- Por su puesto que no es nada oficial- respondió mi papa- Si ese hombre esta casado, tu solo debes ser un pasatiempo para el, algo así como la amante, por que eso fue lo que su esposa me dijo y todos sabemos que tu te mereces algo mejor que solo ser la amante- respondió mi papa.

- NO! – exclame- Eso no es cierto, tu no lo conoces papá, no sabes como es conmigo, ni por todos los problemas que esta pasando con su esposa, el se va a separar – le comenté.

- ¿Y luego que? ¿Te vas a ir a vivir con él donde sea que juegue? ¿Nos vas a abandonar a tu mamá y a mi?- me dijo. Me quede en silencio porque la verdad es que no sabia que haría si el Charles se separaba y me ofrecía irme con él donde sea que jugara. Yo recién había cumplido la mayoría de edad, y aunque era libre de poder salir y entrar al país cuando quería, el irme con el Charles traía una serie de problemas que nunca había detenido a pensarme. Mire a mi papá y el me seguía observando con su mirada enojada, luego suspiro y su mirada se ablando- Piénsalo bien hija, se que ya eres grande y tomas tu propias decisiones, pero piensa en los pro y en los contra de esto – dijo para después irse – Ah! Y si no había quedado claro, estas castigada, nada de salir y de ver a ese hombre, de la casa a la universidad y de la universidad a la casa

Suspiré y me tiré sobre el sillón, saque mi celular del bolsillo y le mandé un mensaje al Charles, quería saber como estaba y como había salido todo con la supuesta demanda que le habían puesto. El Charles era un hombre muy bueno, no se como le podrían haber interpuesto esa demanda si el no mataba ni a una mosca. Y también espero que todo este saliendo bien con la Fernanda, que no haya enloquecido de nuevo, aunque creo que sacó toda su furia cuando le dijo a mi papá que yo era una rompe-hogares, menos mal que mi papá no pesco mucho su comentario, o quizás no quiso sacármelo en cara.

Me fui a acostar sin tener ninguna respuesta del Charles, ya era bastante tarde, pero supongo que aun no se desocupaba y yo estaba bastante cansada por las emociones vividas, además de que mañana era Lunes y tenía clases muy temprano en la Universidad

Me levanté al día siguiente sin nada de ánimos para ir a clases, seguía preocupada por el Charles, el no había respondido mis mensajes ¿Y si estaba preso? Eso no sería nada bueno para su carrera y se que él estaría triste porque demás que en la selección lo castigarían y quizás lo dejarían sin jugar.

Me fui toda desganada a la Universidad, casi ni preste atención a las clases, estaba revisando mi celular a cada segundo para ver si el Charles me había respondido los mensajes, pero no era así. A lo que la primera clase termino, decidí llamarlo, no daba más de la preocupación. El teléfono sonaba y sonaba y nadie contestaba, casi cuando ya estaba por rendirme, atendieron.

- ¿Alo? – escuché la voz del Charles del otro lado, pero no era su voz de siempre, no era esa voz animada con la que contestaba mis llamadas o mis mensajes de voz por whatsapp.

- Charlie, hola, ¿Cómo estás? Te llame porque estaba muy preocupada por ti, desde anoche que te he mandado whatsapps y no me los respondes ¿Estas bien? – le dije todo rápidamente.

- Si, es que anoche me desocupe un poco tarde y bueno, hoy en la mañana nos tocó entrenamiento y me acabo de desocupar – dijo como restándole importancia, ni siquiera me comentó como le había ido anoche en la comisaría y algo también me resultaba muy extraño, y es que el día que nos habíamos juntado el me había dicho que tenía libre hasta el Martes y ahora me había dicho que estaba en entrenamiento, esto era muy raro.

- Charles, tenemos que vernos, mi papá me castigo y no quiere que te vea más, tenemos que buscarle una solución a esto y yo se que juntos podremos – le dije esperanzadoramente. Había pensado que si el Charles iba a hablar con mi papá y le explicaba todo lo que había pasado en su matrimonio y todo lo que sentía por mi, quizás el aprobaría nuestra relación y nos dejaría estar juntos en paz, y bueno, por otra parte, él le tenía que pedir el divorcio a la Fernanda y así podríamos estar juntos sin ningún impedimento ni barrera, pensar en eso me hacía muy feliz, yo solo quería estar con él porque él me hacía feliz.

- No lo se Fran, estoy concentrado y no se cuando tenga libre, ¿yo te aviso si? – me dijo, pero eso no era verdad, él no estaba concentrado.

- Charles, no me mientas por favor, el otro día me dijiste que no ibas a estar concentrado hasta el Martes ¿Es que acaso no me quieres ver? – mi corazón comenzó a latir desbocado ante la idea de que el quizás no me quería ver más. Sentí un suspiro del otro lado.

- Tal vez tu papá tiene razón Fran y lo mejor es que no nos veamos más – mi corazón comenzó a latir más rápido si eso fuera posible y sentí como un nudo se formaba en mi garganta.

- ¿Por qué lo dices? Pensé que teníamos algo especial ¿o no es así?- el nudo apretaba cada vez más mi garganta ya casi dejándome sin habla.

- Fue entretenido - ¿Entretenido? ¿Así definía lo que teníamos?- Pero no fue nada importante, solo fue un par de salidas y unos cuantos besos – técnicamente si había sido solo eso, pero para mi había significado mucho más.

- Pero tu me dijiste que yo te gustaba – no se cuanto tiempo aguantaría esto, porque ya sentía como mis ojos se estaban humedeciendo.

- Se nota demasiado que no tienes experiencia en el tema... Si, te dije que me gustabas y eso es verdad, me gustas, eres muy bonita, pero estoy casado, tengo una esposa y la amo y si... en un momento las cosas se pusieron feas en nuestra relación, pero ya todo ha vuelto a la normalidad, así que... te pediría que no me vuelvas a hablar nunca más, ni que me mandes más mensajes.

- Pero Charlie... – dije con un hilo de voz.

- Que te vaya bien Francisca, ya encontraras a alguien, eres buena persona – dijo para después cortar.

No puedo creerlo, ayer todo parecía un cuento de hadas, cuando estábamos en su casa viendo películas abrazados y ahora él me decía que había vuelto con su esposa. Esto era extraño, el Charles no era así, esto me olía a que la Fernanda lo había obligado a hacer esto, quizás lo había amenazado con quitarle a los niños o algo. Tenía que ayudar al Charles a salir de esta como sea.

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Estoy en la depre, es lo único que puedo decir...

Las quiero

Consu