Nuestro Futuro

Una mentira, un cambio.

Theodore Nott siempre se caracterizó por ser una persona fría, calculadora y directa; pero hay ocasiones donde no sabes como actuar para que todo salga como lo planeas.

No importa si eres el primero o el último lo importante es aprovechar el lugar que te corresponde, así era su forma de pensar pero en este momento aun siendo uno de los últimos en pasar a decirles a esos adolescentes lo que les esperaba en el futuro no estaba listo. Sabía que casi no habría problema alguno pues él quería, de adolescentes a esa excéntrica rubia pero se rehusaba a ser directo con ella pero también le costaba ser frío y los cálculos le salían mal; y aun adulto todo eso causaba en él esa rubia de ojos soñadores y azules.

Se levanto de su lugar y posicionó enfrente del grupo de adolescentes; los hechos ya eran muy evidentes, sólo quedaban los gemelos, Hermione, Draco, Luna y su yo adolescente, dos mujeres y cuatro hombres y todos sabían que había algo entre Draco y Herms sólo quedaban los gemelos, Luna y él.

-Amigo te haré sufrir-dijo Theo adulto a el Draco de su época, éste sonrió y afirmo un poco nervioso por lo que haría su versión joven-, bien ya saben quien soy así que seré rápido porque ya tengo mucha hambre. -todos rieron- después de la guerra y salir sin ningún problema del juicio fui a pedirle perdón a todas aquellas personas  a las que mal juzgué o a las que les hice daño, fui a casa de los Weasley y ahí me encontré con la que sería mi esposa la cual siempre ha sido una mujer inteligente y hermosa pero yo no me arriesgue a pedirle ni una cita hasta que nos encontramos en un viaje meses después, cenamos juntos y descubrimos que ya estábamos enamorados desde antes de esa cita y siendo ambos directos y sin rodeos pusimos las cartas sobre la mesa

-Literalmente pusieron algo sobre la mesa y no fueron cartas- dijo en un intento de susurro Ron a  Neville pero todos escucharon y rieron a excepción de ambos Theo y una rubia adulta rió sonrojada.

-Bueno, después de esa primer cita regresamos a Londres como novios/comprometidos, nos casamos y tuvimos hijos. Trabajo de profesor de defensa contra las artes oscuras y esa es mi vida.

-¿Y?-dijo su versión adolescente.

-¿Y qué?- le pregunto haciéndose el desentendido.

-¿Con quién te casaste?-término Draco, adolescente , sólo faltaba la castaña de sus desvelos y la rubia amiga.

-Con Granger, Hermione Granger- dijo lentamente esperando de todo.

Los adolescentes, o mínimo la mayoría, sabía que era mentira. Luna notaba que su Theo, más bien dicho la versión adulta de Theo mentía, lo veía en sus ojos. Los Slytherin, a excepción de Draco notaron que mentía,  Theo era malo mintiendo sobre lo que sentía alguien más. Los Gryffindor, a excepción de Hermione, notaron que mentía por su timbre de voz.

Draco se levanto de su lugar, que era a un lado de Hermione; y la beso, cumplió su sueño.

-Espero seas feliz- le susurró y se fue.

-Esperaba de todo menos eso.- dijo Theo adulto.

-¿A qué te refieres?- dijo Hermione, adolescente.

-¿No te diste cuenta?- pregunto Theo adolescente. Hermione negó con la cabeza.

-Le gustas a Draco.- comenzo George.

-Es más, te ama.- continuó Fred.

-Te ama tanto que espera seas feliz con alguien más.- dijo Ginny.

-Aunque-dijo Neville.

-Estes con él en el futuro.- dijo Harry.

-¿Cómo?- pregunto Hermione, pérdida.

-¿En serio Hermione?- dijo incrédulo Ron.

-Y te haces llamar la chica más lista de nuestra generación.- dijo Pansy.

-Theo miente.- continuó Daphne.

-Él estará conmigo.- concluyo Luna mientras se levantaba y se paraba enfrente de Theo para darle un corto beso que él alargo. No se alejaría jamás de esos labios, de su rubia.

Hermione al oír eso salió corriendo; tenía, debía encontrar a Draco antes de que hiciera algo de lo que todos se arrepentirían. Y sabía donde estaría.

Corrió hasta llegar a la Torre de Astronomía, utilizando todos los atajos que conocía gracias a gemelos.

-Sin ella no hay vida- escucho que dijo antes de entrar.

-¡Draco, no!- grito mientras corría para estar a su lado, estaba apuntándose con su varita.-No lo hagas,- empezó a llorar.- yo te amo, era una mentira, sólo una mentira.

-¿A qué te refieres?- dijo sin bajar su varita; lloraban, ambos lloraban.

-Theo mintió y aunque fuera verdad yo quiero estar a tu lado.- dijo mientras lo agarraba de la muñeca para bajar la varita con cuidado.

Draco lloraba, amaba a esa mujer y no la dejaría ir nunca más. La agarro de la cintura y la abrazo hundiendo su cabeza entre su cabello castaño; amaba su olor.

Después de lo que parecieron largas horas que realmente sólo fueron unos minutos él hablo.

-Te amo; te amo desde que vi tu cabellera castaña en el tren en primero, desde que te vi levantar la mano por primera vez en clase, te amo desde que me golpeaste ese día mi nariz no volvió a ser la misma.- ambos rieron-Me odie y odio por tantas veces que hice que tus ojos derramaran tus lágrimas, me odio desde que te dije sólo dos palabras que me mataron por dentro, odio a Krum porque él si fue capaz de invitarte al baile y me odio por provocarte tanto daño y te juro que siempre te cuidare; desde hoy nadie te hará daño, nadie te hará llorar- le puso el dedo sobre sus labios para que dejará de hablar.

-Está es mi promesa; si tu vuelas yo vuelo, si tu corres yo corro, si tu caes yo te levantaré y si tu mueres Draco yo Hermione Jean Granger moriré contigo.

Un beso siempre inicia, termina o cambia algo y este beso inicio una nueva historia llena de amor, termino un pasado lleno de dolor y cambio una vida llena de soledad.