Cap 6

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Nunca antes habían pedido la carta, siempre la dejaban al control de la gente y este era mi escondite perfecto, mi salvación del día. ¿Qué haré? ¿Tanto esfuerzo para no quedar demasiado mal se ira a la basura?

Sin mirar, o intendo no mirar, entregué la carta con el rostro a mi izquierda observando la pared de ladrillos blancos como si fuese la actividad más divertida del universo, obvio que al lado derecho estaba Jessie.

-No me tardo en traer su orden.

Dios... ¡Que miedo pasé!



-Alissa

El Chico Del CaféWhere stories live. Discover now