Capítulo 2

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A la mañana siguiente me levante sobre las nueve y fui al médico como era habitualmente en mi vida. Mi otra parte de la vida se determina en ir de médicos en médicos cada ''x'' días y meses.

Después de salir del médico mi madre me llevo a desayunar fuera con ella, empezamos hablar de como sería volver a Nueva York a vivir. Yo asentía con la cabeza ya que allí no se me había perdido absolutamente nada, no tenía muchos amigos y seguramente los pocos que tenía ya ni si quiera se acordarían de mi. Me fui de Nueva York a los 7 años, dos años después de la muerte de mi padre.

Llegada la hora de comer invité a Alex a que comiera con nosotros, en serio es un encanto de chica ojalá algún día encuentre a ese chico con el que fantasea conmigo.

¡Hola Alex!-Digo con una dulce sonrisa al verla en la entrada de mi casa.- Bajo las escaleras como loco y me abrazo a ella. Más tarde entenderéis porque es mi mejor amiga y mi pilar más fundamental en la vida.

CONVERSACIÓN DE WHATSAPP Emma & Dylan:

(El + será Emma y el - Dylan ¿De acuerdo people?)

+ Buenas tardes mi vida(Emoticono del mono tapándose los ojos)

-Hola mi niña(Emoticono enamorado)

+¿Qué tal la mañana cariño?

-Bastante bien, no he hecho mucho. Bueno si echarte de menos(Emoticono sonrojado)

+Aaaw(emoticono enamorado)

-Cielo voy a comer, ¿nos vemos después en mi casa no?

+Claro mi vida, nos vemos x (En América la x significa kiss/ besos)

Cuando acabamos de comer a la hora Alex se va y viene Emma. Cuando Emma viene nos subimos a mi habitación, después de echar por así llamarlo un polvo nos quedamos tumbados en la cama. Ella se queda acariciando mis pectorales y sube a mi pecho.-

-¿Anda y esto?-Pregunta curiosa y acaricia mis cicatrices.

-Es lo que quería hablar en persona contigo.-Murmuro mirándola y me siento en la cama. Mi cuerpo ahí empezó a ponerse algo nervioso y verla ahí tumbada, con el pelo revuelto después del sexo... joder no quiero que huya por lo que le voy a contar.

Después de estar un buen rato intentando dar el tema de lado al final se lo acabe contando. Emma me miro muy mal, se levanto rápidamente de la cama y se vistió. Dijo que le parecía una vergüenza que no se haya contado antes y que incluso no a nadie. Lo cierto es que hay una persona que si lo sabe, ya suponéis quien es.

Bien vamos hacer una pausa aquí. Actualmente no estoy aquí lo que estáis leyendo son hojas de mi diario colgadas por todo el instituto, no os imagináis lo duro que resulta  tener pensamientos suicidas. Todos aquellos que hoy os reís de la discapacidad de otra persona o incluso porque sea más alto, más bajo, gordo, flaco o lo que sea. Miraros al espejo y no decirme que os creéis  perfecto, como no os conozco de nada algunos y podría decir a simple vista que ocultáis algo por vergüenza o simplemente os ocultáis en la sombra para no ser vistos. Con las hojas de mi diario quiero difundir que aquellas persona que hoy en día no habéis abierto la mente para entender otras cosas os invito a poneros en mi piel.

Os voy a contar con puntos y comas cada detalle de lo que vino después de esto.

Fui hablarle a Emma por WhatsApp pero estaba bloqueado, no entendía porque, empece a llorar como una magdalena y cuando más o menos conseguí calmarme de los llantos llame a Alex y le conté lo ocurrido. A los pocos minutos se presento en mi casa, mi madre le abrió la puerta y subió a mi habitación, al verme como estaba me abrazó con muchísima fuerza y nos quedamos tumbados en la cama mientras ella me acariciaba el pelo con mimo y suavidad. A los pocos minutos me quedé dormido, acurrucado en sus brazos y con las piernas entrelazadas. Al ser Viernes no teníamos la preocupación de quedarnos dormidos más tiempo.

A las diez y media de la mañana Alex me despertó acariciándome la espalda con las yemas de sus dedos. Voy a describiros a Alex como es físicamente, es una chica de mi misma estatura, con tacones me saca unos mm de altura, no es muy delgada ni muy gorda, esta bien, tiene los ojos marrones, tiene una sonrisa para mi gusto demasiado bonita, es muy cariñosa conmigo y es súper mona cuando se enfada...Infla los mofletes cuando la pico, me da abrazos a todas horas y sobre todo le encanta andar agarrada de mi mano, en ocasiones la pico en el sentido de quitar mi mano y no dársela para que se enfade.

-Buenos días dormilón..-Murmuró mirándome con esa sonrisa tan bonita que tenía.

-Buenos días plasta...-Murmuro algo apenado y escondo mi rostro en su cuello. Después de estar un buen rato en la cama hablando de todo lo que ocurrió con Emma, empezó a decirme que no veía a Emma muy buena, que tenía mala fama desde que su ex novio le puso los cuernos con mitad del instituto. Pero yo sabía que eso no tenía que ver con lo que yo le conté.

Alex se quedó todo el día en mi casa y lo pasamos juntos, viendo películas en el sofá de mi cuarto acurrucados. La verdad es que Alex siempre ha estado ahí para todo y no he querido darme cuenta porque solo la tenía aprecio del cariño de amistad. En un momento nuestras manos se rozaron y lentamente entrelazamos los dedos, ambos sonreímos tontamente pero seguíamos mirando la película.

Cuando llego la noche la noche acompañe a la puerta de la entrada a Alex y abrió la puerta.  Antes de que se fuera la agarre de la mano y le acaricie los nudillos con mi pulgar, ella me miro y se acerco lentamente a mi, se puso de puntillas y paso sus manso por detrás de mi cuello . Yo la abrace por la cadera y le pegue por completo a mi. Nos miramos ambos a los ojos.

-¿Lo podemos intentar Dylan..?-Susurro sobre mis labios. Yo asentí con la cabeza y nos fundimos en un suave y dulce beso, cerrando los ojos lentamente. La sensación del beso fue como... Si nunca hubieras visto a esa personas y te tuvieras que aguantar con hablar con ella por Skype o WhatsApp, en resumen fue perfecto.

Cuando Alex se fue subí a mi habitación, cogí el pijama y fui a darme una ducha. Estuve unos 30 minutos bajo la el chorro de la ducha soñando despierto, sonriendo como un tonto al imaginarme como se movía su lengua dentro de mi boca y como me mordía el labio. Hmm... tiene unos labios tan dulces... Es imposible que mi mejor amiga se haya  convertido ahora en mi novia. Después de estar fantaseando con Alex en la ducha me seque el cuerpo y me mire al espejo. Pase lentamente mis dedos por la cicatrices de mi pectoral y luego lleve mis manos por mi abdominales y acabe quitándome la toalla que rodeaba mi cadera. Me puse le pijama y me fui a dormir.

NO CUENTES MI SECRETOWhere stories live. Discover now