Capítulo 1

21.5K 1.5K 537
                                    

— Coraline, bonita. Sube al auto –me ordenó mi madre.

Simplemente la miré y, sin replicar nada, cogí mis bolsos, una chaqueta, mi teléfono y subí a la minivan; luego, observé por mi ventanilla la aburrida casa de 2 pisos color café, decorada con un par de asquerosos arboles muertos a ambos lados de la misma, sin sentir pena alguna por partir.

—No es justo que debamos irnos si apenas pudimos llegar a estar cuatro meses aquí en Dublín. –gruñó mi hermana muy disgustada.– Otras veces llegamos a perdurar en la misma ciudad durante casi un año completo.

Sophie comenzó con sus quejas de siempre y, para no romper la costumbre, también dio ese maldito portazo con el cual descargaba su jodido disgusto con el vehículo, antes de cruzar los brazos. Ya me conozco de memoria todos sus berrinches, debido a que todas las veces son de la misma y exacta forma.

—Sophie, ¿Quieres por favor ponerte el cinturón?. –le pidió mi madre con su infinita paciencia (la cual le cuesta tener conmigo), y ella obedeció de mala gana. Yo coloqué los auriculares en mis oídos y comencé a escuchar algo de música.

Será un largo viaje, y no deseo oír el discurso de 2 horas de mi padre sobre "las nuevas oportunidades" que nos esperan en Reino Unido.

Soy Coraline R. Moune. Ese es mi apellido Europeo, el cual adopté hace más de cuatro años, cuando llegamos al continente.

¿Edad? 16 años, pero en meses cumpliré 17.

¿Altura? Creo que 1,67, pues no recuerdo cuando fue la última vez que me midieron para entrar a un colegio en especial. Y por si se lo están preguntado; sí, soy soltera y condenada a morir con 15 gatos, consumiendo drogas y coleccionando bajilla de porcelana inglesa... Bueno, talvez no tan así; pero sí sé que algún día voy a morir sola... Si es que puedo morir.

Mi vida se resume en 3 simples palabras: complicada, extraña y solitaria.

Complicada porque nunca pude llegar a disfrutar de tener un hogar fijo ni una vida normal como la mayoría de las personas que me rodean. Afortunadamente mis padres se las han ingeniado para crear una pequeña empresa familiar que nos permite viajar sin estar adheridos a nada ni nadie.

Solitaria debido a que desafortunadamente jamás he tenido el “placer” (si se le puede denominar de tal manera) de tener un amigo o alguien con quién hablar además de mi familia. Sophie es mi hermana melliza y sin embargo no es una gran compañía. Ella (a diferencia de mí) siempre ha sido muy buena para hacer amigos vallamos a donde vallamos, y no le queda mucho tiempo para estar conmigo. No me quejo, yo tampoco soy "Miss simpatía" ni me gusta que me atosiguen demasiado, y mi hermana es de esas personas que irradian luz y entusiasmo cada vez que pasa frente a ti; yo soy totalmente lo opuesto, y también es por esa razón que nunca tuve ni voy a tener pareja. Nunca he podido conocer lo que se siente estar "enamorado" de alguien, debido a que prefiero centrarme en mí misma y nadie más.

¿Egoísta? Sí, talvez. Pero estoy tranquila.
Creo que no necesito decir demasiado para explicar “Por qué” mi vida es anormal. Cualquiera podría darse cuenta y, sin importar que tan loco, tonto o alucinante suene, es 100% real. Yo soy una fenómeno; pero no una fenómeno en el sentido de ser una persona asocial o una lunática. Mi personalidad no es lo único que me diferencia de los demás, sino también mis capacidades tanto físicas como mentales.

Desde los 5 años de edad he comenzado a desarrollar habilidades extraordinarias que nunca nadie se podría imaginar. Llámenme monstruo si lo desean, porque estoy acostumbrada; yo misma me he clasificado como tal porque admito que es la verdad. Soy un defecto de la humanidad, un defecto indestructible. Nada ni nadie puede dañarme físicamente; ni siquiera yo misma. Ya lo he intentado todo; desde navajas hasta cierras. He ingerido toda clase venenos, pero jamás me han afectado en lo mas mínimo. No me hace ni cosquillas.

Problem 1 [Editando].Where stories live. Discover now