Average girl (Una chica mediocre)

Hola, me llamo María

¡Hola!

Mi nombre es María, María García López, y soy lo que podrías considerar la persona más mediocre del mundo. Y que conste que no lo digo como algo malo, sino como un adjetivo cualquiera que me define a la perfección.

¿Que por qué? Por que no destaco en nada. En absolutamente nada. Nunca lo he hecho y sé que nunca lo haré. 

Físicamente soy la chica promedio: pelo castaño, ojos color avellana y una cara en general poco reconocible, pálida y con algo de acné pero no lo suficiente para dejar marca. Ni sin siquiera tengo un lunar llamativo. Mido exactamente 163 centímetros y peso 53 kilos, ni gorda ni delgada y sin curvas espectaculares. En definitiva, no soy el tipo de chica que te volverías a mirar por que sencillamente soy lo que ves todos los días

Mis aficiones, de nuevo, las típicas: cantar, bailar y escribir, todo muy artístico y que, si bien no lo hago mal, tampoco destaco en ello. Vamos, que ni presentarme a la voz, o ganar el nobel de literatura. Aparte de eso hago lo típico de la gente de mi edad, nada más y nada menos.

Estoy en el último curso de un instituto público en el que tampoco destaco demasiado. No soy especialmente brillante, no participo en ninguna actividad extra escolar y no soy ni de las populares ni una marginada aunque conozca a gente en esos dos grupos. 

En fin, soy lo más normal que te puedas encontrar en el mundo. Y no creo que eso sea malo. Claro, hay días que me encantaría ser otra persona, alguien que atraiga la mirada de todos o que sea especialmente buena en algo pero la verdad es que ser normal no es tan malo. La verdad es que no entiendo por que decir que eres mediocre podría ser algo malo, pero como sé que a nadie le gusta que le llamen así creo que mejor me definiré en ingles, que todo el mundo sabe que las cosas en otro idioma suenan mejor.

Yo soy una Average Girl y esta es mi historia.