Bastonazos

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Hacia una semana que Ernie estaba preparando en secreto unas pruebas para entrar en una escuela que no era la que en ese momento estaba asistiendo. La razón por la cual ni su familia sabía lo que tenia entre manos era porque la gente podía pensar que estaba loco y tenía miedo de las consecuencias. Quería entrar en una escuela de brujería, la que Reggie, el conductor del autobús escolar, le había hablado y ahora le estaba haciendo un pequeño entrenamiento.

El problema era desaparecer durante las horas escolares, pues no era muy normal que un niño de su edad de golpe no fuera a la escuela ni nadie supiera donde estaba. Cada día a las nueve en punto, justo cuando el timbre sonaba, él abría su taquilla y sacaba un pequeño aparato (cortesía de Reggie) que seguidamente colocaba en su pupitre. Este cachivache, emitía unas ondas que afectaban a los humanos que no tenían ningún talento mágico (comúnmente llamados alienados) y les hacía creer que esa persona estaba entre ellos y por otra parte, el efecto conseguía que las personas no tuvieran ningún interés en interactuar con este "holograma", pasaba desapercibido. Al colocar el aparto, la figura real de Ernie desaparecía a los ojos de los alienados y él podía irse donde quisiera.

Reggie además de conductor de autobús y entrenador de Ernie, construía inventos que muchas veces le causaban conflictos con la autoridad mágica, como por ejemplo su última creadora-de-problemas, la maravillosa MG-450, una gran herramienta de construcción, era una pequeña grúa que convertía piezas pequeñas en grandes. Con ella, podías crear un edificio muy pequeño y transformarlo en la escala que uno quisiera, solo había un problema: el material de la construcción se transformaba en agua al crecer de tamaño. Como era de imaginar, causó una gran inundación en uno de los mejores barrios de la capital del mundo paralelo. Reggie fue multado por la creación de ese invento y fue obligado a destruirlo, a pesar de que él quería intentar mejorarlo para que fuera perfecto. Junto a la multa, se le impuso una expulsión temporal de ese mundo, por eso ahora convivía con los alienados, trabajando de conductor de autobús, aunque por suerte, en su desafortunado camino, encontró a Ernie. —Un chico con un potencial increíble—siempre pensaba Reggie. Quería entrenarlo para que el fuera a la escuela mágica y llegase lejos, así redimía sus errores y ayudaba a otra persona a entrar a ese mundo que el tanto amaba.

La escuela de brujería era muy particular, pues tan solo invitaban a gente que dominara una serie de artes mágicas y pudiera superar los retos de entrada, además de otros requisitos. Tan solo entonces ofrecen una invitación formal. Ernie nunca había visto ni oído hablar de esa escuela, pero Reggie le contó todo sobre ella, pues él estudió allí unos años, aunque entró ya muy mayor (según Ernie, el creía que Reggie tenía sobre unos 50 años actualmente), en el último curso suspendió todas las pruebas finales y se frustró, no quería perder más años allí dentro; dominaba la magia muy bien, por eso decidió dejar la escuela y dedicarse más a crear inventos mágicos para ayudar a la gente en su día a día aunque no se imaginaba que años más tarde eso le traería muchos problemas.

Ernie, salió de la escuela y se dirigió hacia el autobús; tenía las puertas cerradas. Picó con su mano en la puerta de entrada, para avisar a Reggie. Éste apretó el botón de apertura y se levantó de su asiento. —Ei colega, pasa, pasa—le dijo—.
Ernie se sentó en el lateral del conductor  y dejó su mochila al costado. —Vayámonos—Espetó Reggie, dándole gas al autobús—.

Sonaba "Sympathy for the devil" de los Rolling Stones en la radio y Reggie marcaba el ritmo con su pulgar sobre el volante. A Ernie le ponía un poco nervioso que hiciera eso, pero tampoco podía evitar mover el pie, así que no se quejaba. —¿No estás yendo un poco rápido, Reggie?—dijo Ernie un poco preocupado—. —Tranquilo, vamos a cruzar el portal—le contestó mientras aceleraba aún más—. Reggie giró una calle hacia la derecha y siguió acelerando. El autobús hacía ruidos extraños y Ernie se estaba poniendo nervioso; en todos los días anteriores que Reggie le había llevado al lugar donde entrenaban no iba tan rápido. 

Tras unos incómodos minutos, Reggie encontró un sitio donde poder aparcar. Así pues, bajaron del vehículo; Reggie sacó una llave de su bolsillo, la introdujo en el autobús y éste se redujo instantáneamente, dejándolo de la medida de un llavero. Lo recogió del suelo con la mano y se lo guardó en su bolsillo. A Ernie ya no le sorprendía ese "truco" ya que después de tantos días se había acostumbrado, el primer día se quedó de piedra, como era de esperar. Estaban en Ciutadella, Barcelona y ese día estaba lleno de gente sentada en los pequeños montes de césped, tocando guitarras, djembés, bailando, aunque también había mucha gente mirando su teléfono, seguramente twitteando o haciendo fotografias para Instagram. Parecía un buen día para hacer un pic-nic allí mismo, pero no era el momento, tenían que cruzar el portal para ir al mundo paralelo. 



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⏰ Last updated: May 16, 2017 ⏰

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MUERTE AL BRUJO: El Elenco del HechiceroWhere stories live. Discover now