‹‹ Final ››

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Con resignación de que otro mensaje le llegase de él, Mía cerró su computadora portátil lentamente y la dejó sobre su cama.

Había desactivado su cuenta en fakeland, su cuenta de facebook falsa. Ya nada más le quedaba, solo dolor, el cual no lo necesitaba, tenía de sobra.

Lágrimas caían por sus mejillas pálidas y sin una gota de color.

El dolor, la impotencia y la sensación de decepción recorría su cuerpo desde las puntas de sus pies hasta su cuero cabelludo, penetrándose por completo en lo profundo de su corazón.

No hay nada peor que decir adiós, decían, pero es todavía peor cuando la otra persona ni siquiera lo hace. Te da la esperanza de que va a volver, pero solo es una cruel fantasía en esta triste realidad.

• Un mes después •

Bienvenido, Elían. Saludó facebook.

Éste será un nuevo comienzo, ésta vez haré las cosas bien. Seré lo que las personas quieren que sea, no dañaré a nadie y tampoco dejaré que me dañen a mi, no vale encariñarse con las personas como lo he hecho antes, ya no más.

Porque aprendí, soy fuerte y sé como manejar las situaciones de forma ocio y profesional, es solo un simple juego de roles para entretener, porque al fin y al cabo nada es real.

Bienvenida nuevamente, Mía. Sabíamos que volverías. Pero, ¿Sabes? Sigues siendo la misma de siempre, porque ya han pasado dos semanas y ya estás encariñandote con todos; esto no funciona así, querida.

Fakeland - Dear, S. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora