~POV KAGAMI~
Me presento, mi nombre es Kagami Taiga, tengo 16 años, mi cabello es rojo y en las puntas negro, mis cejas son
"raras", mido 1,90, curso segundo de secundaria y... me gusta el Basketball.
~FIN POV KAGAMI~
-- Tsk... es muy tarde --pensó al ver que eran las 11:00 am
Se vistió con ropa deportiva y, sin desayunar, salio.
Iba tranquilo, caminando, hacía la cancha de Basketball que estaba cerca de su apartamento.
Al llegar escucho el ruido del rebote de la pelota.
Y lo vio. Un doncel moreno de más o menos 14-15 años, 1,75 de altura, cabello azul, y un cuerpo delgado.
Se le quedo mirando un rato, al parecer el chico sintió su presencia, pues había volteado a verlo.
Sintió que su corazón se aceleraba al ver los ojos de este, azules, tan azules como su cabello.
~ Hola ~ le saludo el desconocido.
-- Hey -- respondió al saludo. -- "Que forma de saludar tan educada, idiota"-- pensó para sus adentros.
El menor se acercó y con una sonrisa se presentó:
~ Mi nombre es Aomine Daiki, mucho gusto... eh... ~ se quedo mudo, pues no sabia el nombre del muchacho que tenia en frente.
-- Kagami Taiga, el gusto es mio, Aomine -- se presentó, con una pequeña sonrisa.
Ambos se miraron a los ojos y se sonrieron, después de esa presentación comenzaron a hablar.
- ¿A que Secundaria vas, Kagami? -
-- Seirin, ¿y tú? --
~ Yo voy a la Preparatoria Teiko ~ sonrió ~ ¿Cuantos años tienes? Yo 14 ~
-- 16 --
~ E-eres más gra-grande que yo ~ menciono sonrojado.
-- ¿Y que tiene de malo? --
~ Bueno... yo... no lo sé... so-solo dije lo que pe-pensé. ~ confesó mirando sus pies como si estos fueran lo más fascinante del mundo ~ Creo... que ya debo irme a casa ~ susurro después de ver su celular, pues ya eran a las 12:30 y debía ir a almorzar.
-- Si quieres te acompaño -- propuso el pelirrojo.
~ Eh?... No... no hace falta... vi-vivo aquí cerca ~ chillo, con la cara más roja que un tomate, literalmente.
-- Quieras o no iré contigo -- declaró serio
~ Es-está bien ~
Después de que Daiki por fin aceptara ambos tomaron rumbo hacía la casa del moreno. Al llegar Taiga quedo impresionado al ver la casa, esta era de dos plantas, tenia un hermoso jardín y un columpio en frente.
-- Wow... tu casa es bonita Aomine --
~ Ya lo sé ~ sonrió arrogante ~ Bueno... si quieres puedes pasar. ~
-- Ok --
Quedo más impresionado cuando entro, la casa estaba en orden.
- Daiki, ¿eres tú cariño? - una voz se escuchó desde la cocina, para después escucharse el sonido de pasos acercarse.
~ Si mamá soy yo ~
- Oh mi vida, te llame por horas - dijo mientras se acercaba para abrazarlo a su retoño.
El pelirrojo estaba mudo, frente a él se encontraba una mujer de curvas pronunciadas, piel nívea, cabello azul, igual al de Daiki y ojos de un hermoso color chocolate.
La mujer volteo a ver al chico que estaba con su hijo.
- Oh. Disculpa, cariño, no te vi - hablo apenada. - ¿Cómo te llamas?
-- No tiene por que disculparse, señora -- sonrió -- Kagami Taiga, un gusto conocerla.
- Aomine Mei - sonrió - Daiki... ¿Por qué no me dijiste que traerias a tu novio?
~ ¡Mamá! ¡Ka-kagami no es mi no-novio ~ grito sonrojado.
-- Aomine tiene razón Mei-san solo somos amigos -- hablo sonrojado tratando de no tartamudear.
- Oh... yo creí que por fin mi pequeño tenia novio... -
- ¿Quien tiene novio? -
Los tres elevaron la vista encontrándose con un moreno peliazul de ojos chocolate.
- Daiki - comento la mujer, mintiendo.
- ¡¿Que?! ¡¿Quien es el bastardo que quiere llevarse a mi hermanito?! - pasos acelerados se escuchaban y en un segundo un chico de cabellos negros, ojos azules y piel blanca se encontraba al lado del, al parecer, moreno mayor.
- Es él - sonrió la ojimarrón - Se llama Kagami Taiga.
Y como si ambos hermanos fueran flashes se encontraban frente al pelirrojo mirándolo seriamente
- ¿Edad? - pregunto el pelinegro
-- 16 -- respondió un "poco" asustado
- ¿Teñido? - interrogó, esta vez, el peliazul-
-- No --
- ¿Pervertido? -
-- No --
- ¿Psico- el pelinegro, no pudo terminar ya que recibió un golpe por parte de su hermanito
~ ¡Ya basta Sora-nii! ~ grito aconcojado
- Pues yo creo que siente algo por ti - contradijo el peliazul mayor.
~ ¿De qué hablas, Shiro-nii? ~
- Se nota que este chico - señaló a Kagami - está enamorado de ti.
~ ¡Pero que dices apenas nos conocimos hoy! ~
- Bueno, entonces es amor a primera vista - hablo seriamente. - Verdad? Kagami-kun
-- Yo... yo, ya me tengo que ir, tengo que ir a hacer la tarea ... A-adiós -- se despidió de forma apresurada, para luego girar sobre sus talones, abrir la puerta e irse.
- Es obvio hermanito, ese chico te quiere - sonrió el pelinegro - me agrada.
Después de ese día pasaron dos semanas y Aomine no vio a Kagami en la cancha. Se había dado cuenta que el también se enamoró de ese chico, solamente con mirarlo.
~ ¿Y si voy a Seirin? , seguro todavía no habrán salido ~ pensó, y sin duda, tomó sus cosas y empezó a correr hacía la Secundaria Seirin.
Llego, y se detuvo cerca de la entrada, entonces vio como los alumnos empezaban a salir. Con la mirada, buscó una cabellera rojiza y la encontró, con una sonrisa decidió ir hacia el pelirrojo.
~ ¡Kagami! ~ grito llamando su atención.
El pelirrojo le vio sorprendido.
-- ¿Qué haces aquí, Aomine? --
~ Yo qui-quiero hablar con-contigo ~ hablo apenado y sonrojado.
-- Está bi-- no acabo de hablar pues un chica pelicastaña lo empujó.
- Bakagami, ¿Porqué no me dijiste que tenias novio? - pregunto sonriente la chica - No sabia que te gustaban los pequeños.
-- ¡Cállate, Riko! -- pero la chica no le hizo caso y continuó hablando.
- Kawaii es adorable - dijo tomando con ambas manos las mejillas del menor para empezar a apretujarlas.
-- ¡Aléjate de él! -- grito enojado tomando del brazo al morenito para luego salir corriendo, llegando a un parque - Uff... bien Aomine ¿que querías decirme?
~ Yo que-queria decirte que... ¡QUE ME GU-GUSTAS MU-MUCHO, TAIGA! ~ chillo, para luego cubrirse la cara con las manos, totalmente avergonzado.
Unos minutos pasaron, en total silencio, y el peliazul al no recibir respuesta sintió sus ojos arder, se había confesado y el chico no decía nada.
~ Sabia que mi hermano estaba mal , Kagami no siente nada por mi, después de todo como va a gustar de un mocoso como yo ~las lágrimas empezaron a brotar de los hermosos ojos del menor.
Kagami estaba mudo, Aomine, el pequeño y adorable Aomine, gustaba de el. Un sollozo lo saco de sus pensamientos, bajo la mirada y vio como el moreno lloraba a mares.
-- Aomine, no, no llores -- intento abrazarlo para calmar su llanto pero el menor lo alejo de un empujón.
~ Kagami, por favor no te me acerques ~ sollozo el menor ~ Yo ya lo sabía, sabía que me rechazarias, después de todo como podrías sentir cosas por un mocoso como yo, de seguro tienes novia y yo vine a cagartela diciéndote que me gustas. Kagami por favor olvídate de lo que te dije, olvídate de mi, olvida to~ la palabra murió en su boca, pues Kagami lo había besado.
Con lentitud y la cara completamente roja, Taiga se separo del menor. Le tomó de la barbilla haciendo que le mirara a los ojos y le dijo:
-- Nunca , nunca me pidas que me olvide de ti -- susurro -- Tu también me gustas, me gustas mucho, no me importa que seas menor que yo... después de todo son solo dos años de diferencia... Aomine se que es apresurado, se que te hice llorar por no responderte rápido es que estaba en mi mundo festejando el que tu sintieras lo mismo... -- le dio un casto beso en los labios -- Aomine Daiki, ¿Quieres ser mi novio?--
Él menor bajo la mirada y con las mejillas rojas dijo:
~ No ~ susurro sonrojado.
-- Eh? -- el corazón del pelirrojo se partió en miles de pedazos.
~ Yo no quiero ser tu novio... quiero ser tu esposo ~
-- Ah? -- la cara de Kagami estaba más roja que su cabello.
~ Lo que oíste ~ dijo para después tomar de la mano a su novio y llevárselo de ahí.
Y así fue como Daiki y Taiga terminaron juntos. Todo comenzó con una mirada, sus vidas cambiaron desde que conocieron, desde que experimentaron lo que era "un amor a primera vista"
