Solo tú. | Kenneth San Jose y tú

Un día normal

Me considero una chica normal. Tengo una vida bastante acomodada gracias al trabajo de mis padres aunque eso signifique vernos muy poco, pero ni a ellos ni a mi nos molesta.

Voy en preparatoria y me es común cursar con "famosos" pero lamentablemente soy horrible haciendo amigos ya que me paso el día completo en mi celular, a pesar de esto mis calificaciones son buenas. 

Hace poco terminaron las vacaciones y toca volver, maldita sea, ni ganas tengo. Preferiría quedarme en cama todo el día con mi gato thomas y stalkeando a Kenny por sus redes sociales. ¿Que quién es? Pues lo conocí cuando buscaba un tutorial sobre la canción "company" de Justin Bieber. Cuando lo vi me encantaron sus pasos y expresiones, pensé "este chico jamás estará a mi alcance" hasta que el año pasado lo vi saliendo del salón del frente. Primero me quedé estática ¿qué hacía el aquí? ¿vendrá por algún amigo/a? Para mi mala suerte el giró y me vió con mi cara de psicópata x100000, imaginando mil cosas en mi mente y sin quitarle la vista de encima, el solo se rió y me hizo señas señalando mi boca, toda tonta pensé que era una indirecta de que quería besarme, pero era mi saliva que de tanto verlo ya llegaba a inundar la prepa. Dios, qué vergüenza. Luego de eso no nos volvimos a ver, solo lo veo por los videos de Matt.

                                            

Finalmente llegó el día de volver a la prepa, meh. Mi pereza está en el nivel más alto.

Me levanté, cepillé mis dientes, me vestí casual y bajé a desayunar. Como era de esperarse estaba sola. Tomé mi mochila y me fui.

Al llegar todos estaban con sus amigos, a mi me dio igual y fui directamente a mi salón. Ví un montón de gente en la entrada, genial, pensé. Logré entrar entre toda la multitud hasta que ví sentado con los pies sobre la mesa a aquel sonrisa perfecta. Sí, era Kenneth. Me vió y yo volteo rápidamente recordando lo que pasó la última vez que lo miré tan detenidamente. Solo pude escuchar un "¡Hey!" y era él, brindándome una cálida sonrisa. Mi corazón latió a mil y las chicas que estaban afuera solo querían matarme. Entre ellas, Bailey. Entró al salón y tomó la mano de Kenneth como si nada, yo me giré y traté de evitar mirarlos hasta que llegó el profesor. Odiaba las bienvenidas así que sólo tomé mi celular y ignoré lo que hablaba el profe. Un chico con rasgos de asiático se sentó junto a mi, cada vez que lo miraba estaba riéndose o mirando su celular, algunas veces dormía.

-Hey- dijo.

-¿Sí?-

-¿Por qué soy tan guapo?- exclamó.

-¿Queeeeé?- Le dije, en mi mente pensé "este es muy egocéntrico"

El solo se dedicó a reírse y veía como se achinaban sus ojos, lindo, pensé. 

-Es broma-

-Okay- dije.

-Mi nombre es Sean ¿cuál es el tuyo?-

-____- respondí amable.

-Lindo- dijo.

-Obvio-

Nos largamos a reír por un rato hasta que el profe nos regañó, yo miré a Sean y el me hablaba en voz baja diciendo "como fastidia este" hasta que mi mirada se desvío hacia cierto chico que nos miraba seriamente. Mierda. Era Kenneth. Es la segunda vez que me mira en el día, estoy algo preocupada, me pone incómoda. El siguió mirándome hasta que una chica toma su mano y me mira con disgusto. Era ella, Bailey. Kenneth se gira y yo también. No le tomé más importancia y dejé que el día siguiera normal hasta que llegó la hora de irse, me despedí de Sean haciéndole un gesto con la mano a lo que el me imitó. Me fui feliz de haberme hecho este "amigo". Saliendo de los casilleros y yendo hacia afuera escuché un breve "adiós" por lo que me giré y sólo podía ver como alguien se escondía rápidamente. Tal vez no era para mi, meh, tan ilusa.  

Me fui a mi casa y llegué a comer, como no había nadie subí a mi habitación y empecé con el psicopateo diario. Revisé cada red social de Kenneth, todo normal, sus fotos en Snapchat, vídeos en Instagram, y una publicación en Twitter. miré y era mi nombre. Mi nombre en su publicación. DIOS MÍO. Me senté rápidamente a pensarlo, tal vez era un nombre de sus amigas o alguna conocida, sí, eso debe ser. Me puse a ver películas por Netflix hasta que me dio sueño. Me dormí y recién sentí a mi mamá llegar. Besó mi frente y me susurró "buenas noches". Ojalá pudiéramos conversar sobre su día o el mío, pero jamás hay tiempo.

Me dormí ansiosa esperando el próximo día para conversar de idioteces con Sean en clases y quizás mirar a aquel chico de sonrisa perfecta.

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Ahí va el primer capítulo, espero que les guste. :) 

¡Saludos!