¿"No estoy solo"?

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(...)una hermosa alianza y de bonito diseño, con una  "numeración" poco visible grabada alrededor.

Intenté quitármela para observarla mejor, pero estaba muy ajustada a mi dedo y desistí de esa idea.

Conmocionado por lo que recién descubrí, decidí ponerme de pie y continuar mi camino hacia "algún lugar" en busca de ayuda, quizás alguien me conocía o algo me resultaría familiar y recordaría en el camino.

Guarde las latas en una bolsa polvorosa que vi en el suelo, me bebí una parte del agua e intuitivamente ahorre el resto. Tanta preocupación me había quitado el apetito.

Al salir noté algo raro, uno de los arboles seco tenia una hoja de papel clavada entre sus grietas y me pude dar cuenta porque como sea que halla llegado hasta ahí no vino antes que yo y fue ese el primero que observe al despertar, lo que me hace pensar; que no estoy solo como imaginaba.

...........el viento ya no soplaba en la misma dirección, ¿que habrá sucedido en el poco rato que estuve ahí dentro?
Mire ambos lados y me fui acercando despacio hacia el caducado roble.
Tenia miedo y comenzaba a ponerse el sol(...)
Tomé la oportunista hoja de papel y comencé a desdoblarla hasta ver su contenido.

Pero...

-¡¿Qué broma es esta!?- dije en voz entonada-¡sal de donde estés!-

-¿les gusta jugar? Maldito infeliz- seguía protestando, estaba molesto y nada parecía cambiar, nadie respondía mis quejas.

La miserable hoja estaba en blanco y solo se podía leer una esquina "olos satse on", lo que no me explicaba que sentido tenia poner algo tan pequeño en la esquina de una hoja y en alguna especie de idioma no común.

-¡Oh diablos!-exclamé en voz baja.

Me olvidaba que se estaba poniendo el sol, volví a doblar la hoja y la guardé en mi bolsillo...mi preocupación seguía siendo la misma, pero ahora estaban apareciendo problemas; no estaba solo en este lugar y estaba por caer la noche.

Apurado por saber que estaba sucediendo retomé mi caminada por el único camino trazado que había y luego de caminar un rato finalmente llegó la noche.
Había luna llena y creo que era algo confortable para mi porque hacia menos oscura mi travesía, porque no me detuve a descansar como seguro pensaban. No era necesario dormir si me desperté unas pocas horas antes de anochecer, y la verdad tenía que resolver este inquietante asunto.

Camine a un paso constante durante unas 5 horas...y ni siquiera sabía a donde llegar o hacia donde ir así que para mi estaba bien seguir al viento.

Querubines (#Wattys2017)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora