Luchar para estar juntos

Capítulo 48: Él no es así...

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Por fin! Primero wattpad no me deja subir.. o eso pensé yo. Hasta que mi internet murío. :|

Aquí os dejo el capitulo número 48. Ya vereís. A partir de aquí se nos va a caer la babita a todas con Raúl. Van a sufrir ambos. Sí. Chicas vengadoras, África sufrira ;) de una forma distinta a Raúl.

Enfin, que os voy a contar... ¡Nada! Lo ireís descubriendo.

Espero que os guste el capitulo. ¡¡VOTAR!! ¡¡COMENTAR!!

Nos vemos en el siguiente capitulo y en dame tiempo. (Espero poder subir pronto)

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Sentado en el jardín, con la espalda apoyada en la fachada de mi casa lloro sin parar. Me han desgarrado el alma y me han arrancado el corazón de cuajo sin miramientos. Mis hijos me odian, mi mujer me abandona,  dudan de mi palabra y hasta que no estallo y confieso todo, no ven que estoy completamente destruido.

-Tete...-Dice mi hermana secando mis lágrimas.- Estoy contigo...-Susurra con voz suave.

-No puedo más...-Digo con un hilo de voz.

-Cariño...-Dice mi madre con la voz tomada.- Mi pequeño lo siento, perdóname por no haber estado a tu lado…-Me dice destrozada.

-Mama no te sientas culpable...-Digo acariciándome el pecho.- yo no te deje acercarte.

-Debí estar a tu lado igualmente...-Dice cogiendo mi mano.

-Siento... haberos...-Intento disculparme por decepcionarlos, pero siento que no puedo respirar.

-Shhhh....-Me intenta tranquilizar mi madre.

-...decepcionado...-Termino la frase con dificultad.

-No nos has decepcionado.-Dicen mis hermanas mayores. Sollozo aún más, soy la decepción de la familia, la mancha....

-Si....-Digo mientras me cuesta cada vez más respirar.

-¿Te encuentras...bien enano?.- Dice Sergio.

-Yo....-Intento decir.- Lo siento....

Noto que todos se apartan de mí y me niego abrir los ojos para ver sus caras llenas de odio y decepción. Me altero más cada segundo y respiro con dificultad.

-Campeón....- Dice una voz masculina.

-No...-Niego con la cabeza.- Ya no...

-Si.- Dice autoritariamente.- Eres mi campeón,  el tío más valiente y fuerte que conozco.

-No es verdad....-Digo abriendo los ojos.

Mi padre me mira; Ni rastro de la decepción que creí que vería en sus ojos, tampoco hay lastima... Pero si tristeza.