El bar del desamor

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-¿Por qué todo está tan triste por aquí?

-Es el bar del desamor, ¿qué esperabas?

-Lo sé pero nunca había visto tantas personas llorando en un solo lugar. Normalmente está más vacío,

-Además, ¿por qué demonios tienen canciones de Ed Sheeran? Eso no está ayudando al ambiente.

-Son ordenes del jefe, si ponemos canciones movidas es menos probable que compren más.

-¿No se supone que tienen que ayudar a sus clientes?

-Lo hacemos, somos como una especie de psicólogos para ellos, analizamos lo que tienen y al servirle les decimos cosas para que se sientan mejor.

-¿Ves a aquel chico?

-¿El qué está lleno de mocos?

-Ese, bueno, a él lo dejó su novia.

-¿Cómo lo sabes?

-Esta llorando con mucho sentimiento, ha estado con su celular viendo mensajes y estaba cantando una de las canciones de Ed. Sin contar, que hace rato cambió su fondo de pantalla, donde tenía a una chica.

-¿Él se los dijo?

-No. Nosotros tenemos que estar atentos para saber cómo ayudar. Por ejemplo, esa chica de allá, no la aceptaron en la universidad que quería.

-¿Y por qué ha venido a aquí si no tiene desamor?

-A veces el amor no es hacia personas, el amor puede ser a animales, a tu trabajo, a tu pasión o a tus sueños.

-¿Alguna vez has tenido desamor?

-En realidad no. Yo... no he estado tan enfocado en esas cosas del amor, ni he tenido mascotas, y tampoco he encontrado mi pasión.

-Supongo que soy un poco extraño.

-¿Entonces cómo puedes entender a las personas?

-No lo sé, no creo que sea necesario haber pasado por lo mismo para ayudar a alguien.

-Además, ¿de qué serviría si estuviera roto? Sé qué en algún momento tendré que estarlo pero por ahora, me agrada ayudar a pegar los pedazos de corazones rotos.

-¿Lo harías con el mío?

-¿Juntarías los pedazos de mi corazón?

-Sí, definitivamente lo haría, Wendy.

-¿Incluso si eso significara romper el tuyo?

-Supongo que valdría la pena.