Capítulo 14.

3.1K 135 8
                                    

Pasé, y como suponía estaba tirado todo sobre el suelo, vestidos, zapatos...

- Que desastre.

- Estoy nerviosa.

- ¿Por qué? Es mi primo, no tiene mucha cosa.

- Eh, que yo no me meto con Edward.

- Pues hazlo.

- ¿Te pasa algo?

- Ahora no voy a contarte mis problemas, estamos con lo tuyo, así que vamos. - empecé a buscar algo con lo que se pondría, hasta que encontré algo perfecto, un vestido azul que llegaba un poco más a las rodillas, perfecto para esta ocasión.

- Pruebate esto. - Dije.

- No lo había visto. ¡Es perfecto! - Yo me reí, se metió al baño y esperé a que saliera, cuando salió me quedé con la boca abierta.

- Te queda perfecto, ahora vamos a maquillarte y a peinarte, déjame a mi, y no te mires a ningún espejo antes de haber acabado.

- Pero...

- Pero nada.

- Está bien. - Se sentó en una silla, cogi la plancha y le hize unas ondas que a ella le quedaban superbien, luego le delineé los ojos, rimel, maquillaje, labial rojo y perfecta, la palabra no era guapa, era preciosa.

- Listo. ¿Preparada? - Ella asintio.

- Preparada. - Se miró al espejo y se quedó mirándose, sonrió y gritó ¡AHHHH, ES PERFECTO! Gracias, gracias, gracias.

- Está bien. - Llamaron al timbre.-Venga que te espera tu principe. -Ella sonrió y le acompañé hasta la puerta cuando la abrió Zayn se quedó con la boca abierta.

- Hola. - Dijo ella.

-Ho-hola, es-estás preci-o-osa.

-Gracias tu también.

- Bueno yo ya me voy, se me hace tarde, adiós tortolitos. - Salí de alli, sin darme cuenta de la hora, mire mi reloj. ¡Las ocho y media! Se me hacía muy pero que muy tarde, pero no tenia ganas de volver. ¿Para qué? Para soportar que Harry me insulte, Edward se pelee con él y empiezen los gritos, mientras Marcel o estaba en la biblioteca o simplemente no estaba, pero sin darme cuenta ya habia llegado, suspiré y me adentré al ascensor, cuando llegué llamé a la puerta ya que se me olvidó la llave, abrieron la puerta para ver a ¿Harry? o ¿Edward? Miré sus brazos y tenía tatuajes entonces era Edward le sonreí y le abracé

-Te hechaba de menos. - Le dije.

- Yo también. - Pasé y vi a Harry, quien solo miraba la televisión y Marcel también, pero en cambio él me sonrió

- Hola Emily. - Dijo Marcel, yo me acerqué y le besé la mejilla.

- Hola Marcel.

- ¿Harry sigue igual? - Le susurré, él asintió y yo bajé la cabeza.

-no te preocupes,pasa de el

- Solo me decís eso.

- Solo podemos decirte eso. - Miré a Harry quien no me hacía ni puto caso como si no estuviera aquí y no quería estar así con él, así que me acerqué hasta donde estaba.

- Harry. - Le llamé pero no me hizo caso. - Harry por dios escúchame.

- No escucho a zorras como tú. -Esto ya era el colmo.

- Joder, estás cabreado conmigo por algo que no tiene sentido, sabias todo. - Apareció Edward -Estás enfadado conmigo porque no estoy contigo. ¿Qué querías? ¿que estuviera contigo? Pues no, porque sabrias que te estaría engañando.

- Me da igual, te enamoraste de él, sin que él no hiciera nada por ti, mientras yo intentaba enamorarte ¿Y dices que no tiene sentido? Claro que lo tiene, lo que pasa es que no lo ves.

- No elegimos de quien nos enamoramos. - Susurré.

- No, claro que no, ya me lo demostraste tú, ahora haz el favor de no volver a dirigirme la palabra y salir de mi vida. - Yo sin poder evitarlo cayeron las lagrimas.

- Eres un gilipollas, estoy intentado lo mejor para que no te sientas así, pero ya veo que no te importa una puta mierda.

- Por fin dices algo con sentido.

- Gilipollas. - Y me fui a mi habitación.

- Está vez te has pasado. - Oí decir a Edward, oí como abrian la puerta pero no podía porque le eché el pestillo.

- Abre Emily, abre. - No pensaba abrir. - No hagas ninguna tontería. - No la haría, ahora no, después de tantas sesiones para recuperarme no volveria a caer, si, me rajaba los brazos, pero cuando lo hacías, tenias un momento en donde te olvidabas de todo, de la paz al dolor pasabas, luego tenia que esconder mis brazos para que nadie las viera, hasta que me descubrieron, pero a mi padre y a mi madre, no les preocupaba. ¿Qué novedad verdad? Nótese el sarcasmo, a ellos lo unico que les preocupaba era "no puedes hacer esto, o si no, no ocuparás lugar en estas empresas, la hija del mayor empresario no debe ser así. " No les preocupaba como me sentía, ni como estaba si necesitaba hablar o no, tenía una vida de mierda, mi unico consuelo era mi primo Zayn.

- Emily, por favor abre. - En un rincón encontré un cristal afilado, pensé en cogerlo, pero no podía hacerlo, pero por mala suerte, ya lo había cogido, lo miré y pensé ¿Por qué no hacerlo? Solo sería un par de minutos, me sentía libre al hacer eso, así que sin prestar atencion a Edward, lo coloqué en mi brazo y empecé, hasta que oí como abrieron la puerta.

-¿QUÉ COÑO HACES? - Dijo mirándome.

- Edward no te acerques.

- No me acercaré pero haz el favor de soltar eso, te lo pido por favor. - Detrás de él estaban los otros dos.

- No.

- ¿Cómo que no? Emily suéltalo. -Miré el cristal y lo tiré, Edward se acercó a mí y me abrazó. - Joder Emily no vuelvas a hacer eso en tu vida. ¿Me oyes?

- Lo siento. - Dije con la voz cortada.

- No pasa nada, ya pasó, pero no lo vuelvas a hacer. ¿Me lo prometes?

- Te lo prometo.

- Así está bien. - Me miró y me besó. - Cuándo miré hacía la puerta ya no estaban, bueno Marcel si.

- ¿Estás bien? - Se acercó Marcel.

- Si, eso creo. - Me abrazó. - Se apartó de mí y me miró.

- Confío en tu palabra.

- No te preocupes. - Salió dejándome con Edward.

-¿ Por qué lo has hecho?

- Lo hacía antes. - Él me miró.

- ¿QUÉ?

- Si, no tenía una vida que se pueda decir "feliz. "

- ¿Por qué?

- Edward, mis padres no me escuchaban, no sabían lo que yo sentía, lo único que les importaban era su imagen y la imagen de su hija, fui solo un error para ellos.

- Eh, no digas eso. - Dijo abrazándome.

- Si, si lo digo porque es la verdad. - Besó mi cabeza y rompí en llanto.

- Supongo que todos pasamos por estapas malas.

- Eso no era malo, mis padres parecian demonios. ¿Para que engañarse? - Sonó mi móvil, lo saqué de mi bolsillo, vi la pantalla y me quedé con la boca abierta.

- ¿Qué ocurre? - Le enseñé el móvil y lo entendió. ¿Me estaba llamando mi madre? o ¿es que me estaba volviendo loca? ¿contestaba?

Los trillizos Styles: ¿Son tres? TERMINADA. #wattys2015Where stories live. Discover now