Luchar para estar juntos

Capítulo 46: Ayúdame

-No.- Contesto de forma rotunda.

A continuación la explico todo lo que paso.No me interrumpe, me escucha, me mira, espera a que termine para hablar. Mi enana es la mejor…

-Pero… ¿Por qué no lo has dicho antes? ¿Porque no te has defendido?.- Pregunta frunciendo el ceño.

-Por qué se dio por hecho. Nadie me pregunto, nadie quiso saber mi versión. Lo más importante para mí me dijo que le daba asco, que me odiaba, me dio un bofetón... para mí que los demás me crean o no, me puede molestar más o menos, pero si alguien hubiera querido saber mi versión, habían preguntado. No tengo que defenderme, tampoco puedo.

-Dios tete.- Dice triste.

-No me tengas lastima Carla.- Digo con dolor.

-No te tengo lastima tete. Solo me duele verte así, yo te quiero, joder, eres mi hermano mayor, el único que tengo y verte así me duele.- Dice explicándose.

-Lo se enana y siento que me veas así, en este estado. Lo mejor hubiera sido que no hubieras ido a casa...- Digo sin mirarla.

-¡No digas eso!.- Dice furiosa levantándose de mi lado. -Tengo que llamar a papa y a mama.- Me dice nerviosa.

-No les llames.- Digo muy serio

-Tengo que hacerlo, mírate. Estas herido, tienes depresión, no quieres vivir.- Dice y empiezan a aguarse sus ojos.- No quieres mi ayuda, no quieres la ayuda de nadie.- Solloza.- Y yo sola no puedo convencerte necesito a papa y a mama.- Me dice llorando.

-Carla, no les cuentes nada.- La suplico.- Por favor.

-Pues pon de tu parte joder.- Grita llorando y se aleja de mi vista.

-Carla.- La llamo nervioso.

-¡Que!.- me grita llorando.

-Por favor, no te vayas. No me dejes solo...- Susurro.

Se acerca inmediatamente y nos miramos; La necesito ahora, en estos momentos. No quiero quedarme solo, sé que cometeré alguna locura y no quiero hacerla daño.

Se sienta a mi lado y se acurruca conmigo. Se queda dormida, con la cabeza apoyada en mi hombro. Beso su frente varias veces.. 

Está preocupada por mí y la entiendo, si fuera la situación al contrario, estaría desquiciado intentando salvarla. Lo que ella no sabe es que a mí ya no me salva nadie de esta.

Me paso toda la noche observándola; Duerme a mi lado sin moverse, está tranquila, relajada. Aprieta mi brazo de vez en cuando y yo, no dejo de mirarla. Mi hermana pequeña cuida de mí, vela por mí, mira por mí y solo por mí.

Debería estar feliz pero no puedo; Lo que más quiero ya no está conmigo y yo...no puedo vivir alejado de ella. Siento dolor dentro de mí, me siento herido, siento que me desangro cada minuto y cada hora que paso sin ella.