Un día, me despedí. [FIN]

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Hipitos, ese día mis llantos fueron acompañados por hipidos incontrolables. Trataba de contenerlos, me tapaba la boca, pero se hacían cada vez más fuertes, así que ¿por qué detenerlos? Lloré.

Mi garganta dolió tanto que sentí que me lo desgarraba.

Mis ojos estaban tan rojos e hinchados pero no importaba, nada importaba. Él ya no estaba.

Mi mamá llegó apresurada y al ver el desastre que estaba hecho me abrazó como solo una madre sabe hacer, con dulzura y delicadeza, como si fuera alguien vulnerable. Y yo me dejé mimar.

Ella no preguntó y yo no le dije nada.

Mi compañera silenciosa.

Los días pasaban y yo quería saber las causas, quería saber la historia de TaeHyung. Pedí más tiempo en el trabajo,  investigué e investigué, tuve la suerte que los vecinos fueron amables y se acordaban de mi rostro, la información fue recolectada y cuando la tuve toda junta, lo comprendí.

La familia de TaeHyung estaba compuesta por 4 personas: mamá, papá, su hermano menor y él. Ellos habían vivido hace 15 años en esta casa. Él había dormido donde ahora era mi habitación.

En cierta forma yo era el invasor y no al revés como pensaba hace años.

Puede que un principio él me haya confundido con su hermano menor e intentó jugar conmigo, recrear aquellos momentos que habían vivido. Puede que hasta entonces se haya olvidado de los rostros de su familia e incluso que estaba muerto.

¿Pero por qué solo él? ¿por qué solo él se había quedado atrás?

Un día hubo un carnaval, TaeHyung esperaba tanto por ese día, un chico tan alegre y vivaz, amado por todos sus vecinos, era felíz con lo poco que tenía y mostraba una sonrisa para todos con quien trataba. Tan desconfiado, tan ingenuo para su edad.

Sus padres no iban a trabajar ese día, toda la familia iban a ir al carnaval.

Pero TaeHyung enfermó, la gripe empeoró y se había vuelto fiebre.

Sus padres cancelarían su salida para quedarse a cuidarlo, trajeron pastillas y pusieron pañitos para que el calor bajara.

Él se sentía culpable por destrozar la salida tan esperado por todos, especialmente por su hermano menor, se puso terco y mandó a sus padres al carnaval.

Había tomado su medicina y los pañitos ya enfriaban su cuerpo, estaba casi bien les decía. "Yo les acompañaré la próxima vez, vayan a esta juntos"

Dubitando se fueron.

Gran error.

Uno nunca sabe cuando verán a una persona por última vez.

Aprovechando que la mayoría de la familias se iban a ir al carnaval, un grupo de gente de mal vivir comenzó a robar casas.

El periódico local dio la noticia. Había una foto de TaeHyung en ella, lo recorté y lo miré detenidamente, era él. 

La familia de TaeHyung, solo se habían ido un par de horas, preocupados quisieron regresar para verlo. Ellos fueron los primeros que encontraron el cuerpo.

Había ruido en la casa y TaeHyung pensó que sus padres habían olvidado algo, tambaleante se acercó a la sala y vio sus rostros. Cuánto habría sido el terror que lo albergaba.

Intentó correr, se resistió y eso solo empeoró.

Me abracé a mi mismo mientras leía y mi corazón se encogía.

¿Qué había sentido esa familia al ver eso? ¿Qué había sentido los padres cuando le arrebatan a un hijo? ¿Qué habrá sentido su hermano? ¿Cuánta culpa?

¿Cuántos años aquella imagen les habrá atormentado?

Los últimos días de vacaciones lo aproveché yendo a aquella dirección en el que él estaba, sé que estaría allí el cuerpo, solo eso, su alma se fue y Dios lo tendría consigo.

Busqué en el cementerio aquel nombre, compré unas flores que caían con lo que pensaba de él y anhelaba verlo, solo esta vez.

Cuando encontré su nombre ví varias flores sobre su lápida, tres ramos de flores estaban allí, su lápida estaba limpia y el césped que lo rodeaba se veía verdoso, supe que aún era amado.

Me alegré tanto, dejé mis flores encima y comencé a rezar.

Porque cuando creces te das cuentas aquellas cosas que de pequeño ignorabas, porque cuando creces dejas de temer y hallas el por qué.

TaeHyung solo quería compañía, jugar un rato y olvidar por algún momento el motivo por el que su familia ya no vivía allí, ignorar las preguntas que se formulaba y caer en los mimos que estaba acostumbrado. Era un chico que había perdido gran parte de su vida y seguía estancado a la edad de 16 años.

Porque TaeHyung no odiaba, me perdonó como perdonó a quien le quitó sus sueños, su futuro, su vida.

Porque TaeHyung se despidió y era hora que haga lo mismo.

Un día ✄ VkookWhere stories live. Discover now