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Capítulo 4 Publicar estado

Mis papás no saben nada de que soy homosexual, mi papá me mataría si se entera, aunque creo que debo decirles, no puedo estar ocultándome por siempre, y aún más si planeo tener algo con Andrés, aunque no esté seguro de esto último.

-¿Así que hoy les vas a decir?- pregunta Kaoru, estamos en la escuela, nos encontramos en un pequeño lapso entre clases, -Sí, creo que me siento preparado para ello-, de verdad me sentía así, la relación con mis padres no es tan mala y creo que estoy mas feliz que lo de costumbre, aunque he de admitirlo, estoy nervioso por comentarles. -Bueno, pues suerte y estaré desocupado hoy, por si necesitas algo- ¿Necesitar algo? ¿Cómo qué? -Claro, gracias- entre a mi clase normalmente pero mi mente se hallaba en otro lado, ¿Qué dirán mis padres de lo que les estoy apunto de decir? ¿Estará todo bien? ¿Y si reaccionan de una manera mala?

Toda la clase me la pase revolviendo mis pensamientos, inventaba versiones de lo que seria, versiones en las que mis padres lo aceptaban, en la que no lo hacían, donde simplemente no les decía, pero siempre llegaba a la misma conclusión, necesitaba decirles, y necesitaba decírselos ya. Al salir de clase seguía profundizado en mis pensamientos, pero otro cubre mi mente, Andrés va a pasar por mi como ayer, así que supongo que no todo este día debería ser tan tortuoso. [Andrés: Ya voy pequeño, estoy de camino a tu escuela], al menos cumple su palabra. Espero en la entrada un rato en el mismo pilar que el día anterior, [Terry: Vale, te espero], comienzo a sentir nerviosismo, siento mi estómago arder y me mareo un poco, por suerte estoy sentado y paso el momento, veo mi teléfono, aun es temprano para arrepentirme y no decir nada, no, debo hacerlo por que si no ¿Cuándo?, no quiero seguir viviendo a escondidas de esto. Andrés llega después de un rato, lo veo a lo lejos, me levanto antes de que él llegue, al aparcar al frente mío lo veo, tan lindo como siempre, su melena tan suave y esponjada, -Hola pequeño- me sonríe y subo al auto,  -Hola.... ¿Grandote?- lo miro esperando que  no me diga nada por lo que acabo de decir,  lo dije sin pensar y es que tengo la mente divagando en el asunto de mis padres, me mira y sonríe -¿Cómo te fue hoy?- el auto avanza y vamos camino a mi casa, mi estómago es una fiesta, siento que voy a vomitar -Bien, todo normal-  creo que lo estoy arruinando por mi manera de contestar, lo miro y le sonrió aunque el no despega la vista del camino, siento las manos entumecidas y tengo frío, aun cuando es verano y esta el sol, -Genial, oye te tengo una sorpresa- ¿Sorpresa? Por unos segundos mi mente queda en blanco a excepción de la idea de recibir el regalo por parte de Andrés, -Esta en el asiento trasero- continua, mientras yo volteo a ver el asiento donde hay una pequeña caja parece de joyería, de esas donde por dentro son suaves para evitar dañar el contenido, la abro y hay un pequeño collar sin dije, solo la cadena, -vaya... es ... muy lindo- no tengo palabras, recibir un regalo de el chico que creo que me gusta es muy lindo y ahora estoy muy feliz,  me pongo el collar y lo miro en el espejo retrovisor -¿Te gusto?- pregunta , -Y mucho, gracias- lo miro otros segundos, y me relajo.

Aparcamos al frente de mi casa, Andrés se despide y se va sin mas, estoy muy contento, me encanto el hecho de que me haya regalado algo pero... ¿Qué significa? ¿Qué le gusto? Supongo que tendré que averiguarlo con el tiempo, camino por el jardín a la puerta de mi casa, miro la cerradura, ¿Enserio estoy preparado para decirlo? mis pies tiemblan y mis manos sudan, respiro de forma rápida y siento un nido de pájaros en el estomago, si lo digo hoy no tendré que preocuparme por ello nunca más y podre intentar estar con Andrés de una forma cómoda y seria. Abro la puerta y camino de forma rápida hacia mi cuarto para no toparme con mi madre, -¡Llegue!- grito hasta que estoy en la seguridad de mi cuarto, creo que no debería ponerme tan paranoico, -¡Esta bien!- grita mi madre desde su recamara, [Kaoru: ¿Ya les dijiste?], mi teléfono vibra, alguien llama a la puerta, los nervios se me ponen muy tensos, mi respiración se altera y siento el corazón latiendo a alta velocidad.