Capítulo 7

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-¿Tu eres mi papá?.- Le preguntó mi bebé a su padre, mientras lo miraba con el seño fruncido.



-Si, yo soy tu papá mi amor.-Le dijo Peter Lanzani. Mientras se acercaba a mi hijo para abrazarlo.












Mis ojos se abrieron, al ver como mi bebé le daba un manotazo al brazo de su padre que lo iba a abrazar. Peter también estaba sorprendido. Y estaba dolido, lo podía ver en sus ojos. Su hijo lo había rechazado, yo no entendía por que, si él siempre me rogaba de conocerlo. Espere que la reacción de mi bebé fuera llenarle de besos a su padre, correr a abrazarlo, de todo menos su rechazo.











-¿No quieres que yo sea tu Papa?.- Pregunto triste, con lágrimas en los ojos el ojiverde mayor.




-Tu, tu has hecho llorar a mamá.- Dijo con el seño fruncido. Mi pequeño hombrecito, le estaba haciendo un planteo de un adulto a su padre. Estaba enojado. Y su postura hacia más obvia su sentimiento.-Tu la has hecho llorar. No la has hecho reír. No quiero que seas mi papá, si haces llorar a mi mamá.- Le dijo negando con su cabecita.









Peter, lo miraba, no podía articular ninguna cosa. Y yo tampoco podía, queria llorar, realmente mi hijo era consciente de como me siento yo. Estamos conectados. Peter se acercó a mi. Se dejó caer de rodillas delante de mi. Yo no entendía absolutamente nada de lo que estaba haciendo.











-Perdón, perdón La, por hacerte derramar cada una de las lágrimas que soltaste por ser una mala persona. Perdón por hacerte sufrir.-Me dijo tomándome con sus manos las mias.-Perdón a ti hijo, por no estar contigo, perdóname. De ahora en adelante tu mamá, y tu, son mi única prioridad.-Dijo llorando.









Mi bebé se acercó a su padre. Le limpio las lágrimas con sus pulgares.











-Hola Papa.-Le dijo mi bebé con una sonrisa.




-Campeón.-Dijo sonriendo Peter.





-Tenemos que ir al parque.-Dijo como si nada hubiera pasado mi bebé.




-Te llevo donde tu quieras campeón.- Dijo emocionado Peter. Estrecho a nuestro hijo entre sus fuertes brazos.- te voy a ser inmenzamente feliz mi amor.-Le dijo llorando.-Te amo hijo.



-Pa mañana es mi cumple. ¿Vas a estar conmigo?.-Le preguntó, el tono de voz en el que lo dijo....Algo escondía mi bebé.






-Si, mi amor.-Le dijo Peter.-Voy a estar en tu cumpleaños.- Continuó sonriendo.





-¿De verdad?.- Pregunto super emocionado Santi.- ¿Ya no te irás de viaje?.- Pregunto con un poco de tristeza, era eso lo que le preocupaba. Separarse de su papá ahora que lo tenía con él. Me sentía super culpable, le había arrebatado a mi hijo una parte de su felicidad.





-No campeón, no me voy a ir.- Dijo despeinandole Peter.- Voy a estar contigo para siempre.-Le dijo mientras lo llenaba de besos.




-¿Para siempre?.- Pregunto mi bebé feliz.




-Si, para siempre.-Le contestó Peter.




-¿Lo prometes?.-Le dijo mi bebé, enseñándole su meñique pequeñito, para sellar la promesa que tenían juntos.




-Te lo prometo campeón.- Le prometió Peter, mientras acercaba su meñique para sellar la promesa con su hijo.











Mi felicidad estaba completa. Yo era inmensamente feliz si mi hijo lo era.










Peter



Ser padre es una responsibilidad muy grande, da igual que uno tenga, ya sea 30, 40,15, 80 seguía siendo una responsabilidad suprema. Un padre tiene que cuidar y brindar por el bienestar de su primogénito y por su felicidad, o por lo menos es la mentalidad de un padre. Hay millones de casos diferentes en los cuales un hombre pasa a ser un padre y mil millones formas de carácter de un padre, alguno que no lo merece por no brindar lo básico a un hijo, no tendrían que tener al fin y al cabo el derecho de llamarse "Padres", hay los que aman a sus hijos con todo su ser, y sólo miran por el bienestar y felicidad para ellos, para ellos. Hay padres que se convierten en uno demasiado pronto, antes de que la madurez que tienen que tener para serlo, hay otros que lo son siendo jóvenes también pero con la madurez suficiente. Hace dos años mi novia, había quedado embarazada, yo no sabía de la existencia de mi hijo. Por una parte estoy feliz de que haya conocido de su existencia recientemente y por una parte no.  Por la parte mala no, ya que me había perdido las primeras etapas de su vida más lindas. Y por otra parte estoy feliz por el hecho, de qué si en aquel entonces mi novia me lo hubiera contado, hubiera sido un completo cobarde y canalla, no tenía la madurez suficiente, carecía de ella. Conocer a mi hijo fue el momento más lindo de mi vida, a parte de conocer a su madre. Yo quiero formar parte del grupo de esos Padres, de los cuales aman a sus hijos, y miran sólo por su bienestar social y felicidad, por su futuro, yo quiero formar parte de su presente y futuro, y no perderme ni un solo minuto de su vida. Santi es un niño replica a mi, igual a como yo era cuando era pequeño como él. Rubio, ojos verdes, a diferencia de que el tenía una contextura más delgada que la mia,definitivamente heredada de su madre al igual a esos labios carnosos. Cuando sonreia tenía mis hoyuelos, pero tenía el carácter de su madre, y la forma de hablar también era como el de ella al igual que el carácter. Santi no parecía un niño de 2 años y más parecía uno de 7 o 8 años. En el momento en que no queria que lo abrazara fue duro para mi, estaba seguro de que no me quería, que me rechazaba pero después entendí el porque de su primer rechazo, él como un hombrecito cuidaba a su mamá, y velaba por ella, no queria verla llorar. Lali definitivamente había hecho un trabajo excelente criando a nuestro hijo. De hoy en adelante, tan sólo miraré por su felicidad, lo haré  feliz cueste lo que cueste, y a toda costa.


¿La Venganza Sigue Siendo Dulce?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora