How many walkers have you killed? (Daryl Dixon.)

Te emborrachaste por tu cuenta.

—Así que lo mantendremos en secreto, solo entre nosotros.— agrego Rick, mirando a Ellie pues la chica siempre se le terminaban saliendo los secretos.

—Ahí viene.— suspiro Ellie, mirando al caminante que hace segundos escuchaban desde lejos.

—Yo me encargo.— se ofreció Daryl levantando su ballesta.

—Espera.— le detuvo Carol, levantando el arma que ella traía.

La mujer le disparo seguidas veces en el cuerpo del caminante, dejándolo aun de pie y luego de unos cuanto disparos le atinó a la cabeza para que éste cayera al piso sin vida.

—Dijimos que me estaban llevando a practicar.— explico Carol, por su supuesta mala puntería al caminante.— no puedo volver con el cargador lleno.

—Por suerte se apareció este.—

—Hay que volver.— recomendó Rick, al ver como ya habían terminado su reunión.

—Tu te encargas del pestillo y nosotros escogeremos el momento.— agregó Rick, mirando a Carol quien seria la principal en el plan.— nosotros no dependemos de la suerte.

—¿Qué es eso?— preguntó Ellie, deteniéndose a un lado del caminante que Carol derribo.

—¿Es una W?— preguntó ahora Daryl, al ver como Ellie había visto algo raro en aquel caminante.

Y efectivamente, tenia una W grabada en su frente. Ni siquiera estaba tatuada o dibujada con algo, pues se notaba que había sido provocaba con un objeto filoso, como un cuchillo.

Rick sólo se agachó, mirando de cerca la marca y miro confundido a los demás, era más que raro ver aquello.

Carol y Rick se adelantaron para regresar a Alexandria, tenían cosas que hablar con Deanna. Mientras que Ellie se quedo acompañando a Daryl en las afueras del lugar, aunque éste no quisiera.

Era relajante estar afuera, caminando por el bosque y estando atentos de cualquier sonido sospechoso. Aunque estuvieran a salvo dentro del lugar, aun seguían sintiéndose un tanto encerrados.

—Deberías volver, yo estaré bien solo.— le recomendó Daryl, caminando delante de ella y despertando a la castaña de sus pensamientos.

—¿Por qué?— fingió un tono triste, haciendo bufar al cazador.

—Has estado con la cabeza en otro lado toda la mañana.— le respondió Daryl, sorprendiendo un poco a Ellie pues siempre se daba cuenta de todo lo que le pasaba.

—Sí.— suspiro Ellie, siguiendo los pasos del cazador.— solo tenia un poco de sueño, es todo.

Miro como el cazador se había quedado en silencio, y seguía caminando por el bosque. Por minutos se quedó pegada mirando su espalda, y aquella chaqueta de alas que siempre le gusto, y suspiro al ver como aun no pasaba nada interesante.

—Sabes, Deanna hablo conmigo hoy en la mañana.— le entro conversa a Daryl, escuchando como este hacia un sonido con su garganta, haciéndole saber que la escuchaba.— dijo que haría una fiesta de bienvenida esta noche.

—¿Para qué?— bufo Daryl, pareciéndole un poco estúpida aquella idea.

—Pues, es una fiesta de bienvenida para todos nosotros.— le respondió, tratando de observar la reacción de Daryl.— dijo que estaría feliz si todos asistían.

—Si claro.— escucho el bufido de burla que provino de Daryl.

Ellie sopló el cabello de su cara un tanto cabreada, desde toda la mañana venia ensayando mentalmente como poder decirle a Daryl que fuera con ella a aquella fiesta. Estaba intentado relacionarse como le dijo miles de veces Carol antes de hacer aquella reunión entre ellos, y no negaba que deseaba que el cazador asistiera.