Capítulo 22.

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Vídrio por todas partes, la puerta tirada y armas en el suelo.

Esto no era buena señal.

Entraron preparándose para lo peor cuando se escuchó un disparo seguido por un grito, un grito de mujer.

Lionel corrió escaleras arriba y cuando abrió la puerta de su habitación se encontró con Ana en el suelo y su pierna sangrando. Corrió hacia ella, la tomó en sus brazos delicadamente como si se tratara de la flor más delicada del mundo y, es que para él eso significaba, aunque de un momento le irritó aquellos llantos ya empezaba a amarlos.

La recostó en la cama y la miró, ella tenía los ojos con lágrimas y mordía su labio inferior ahogando sus llantos porque sabía cuánto le molestaban a Lionel, él pasó su dedo por su labio liberándolo de su agarre soltó un llanto pero cerró sus labios reprimiendolo.

-Pequeña, llora todo los que quieras. -Dijo él acariciándole su pelo, el cuál en algún momento desprecio por su tono rojizo, el más hermoso.

Ella solo soltó un gemido de dolor mientras lágrimas caían a sus mejillas para rodar por ellas y perderse por algún lado de ese deseado cuello por Lionel.

Lionel se levantó de la cama rápidamente y buscó su botiquín de primeros auxilios. Para su mala suerte no había suficiente anestecia y su herida era profunda, necesitaba puntos para poder detener aquella emorragia.

Buscó sin éxito más anestecia pero lo único que encontró fue alcohol y más alcohol.

-Te va a doler pequeña.

Le inyectó anestecia, esperó unos segundos, pero su angustia no lo dejó esperar más, la emorragia crecía. Y él no quería perderla.

La aguja traspaso la suave piel de Ana, haciéndola gritar de dolor.

Además de que era poca anestecia, no había hecho efecto todavía.

Lio volvió a hacer lo mismo, cerrandola por una pequeña parte.

-¡Ah, mierda! -Gritó Ana, su cabello rojo estaba pegado a los lados de su cara por el sudor.

Él se sorprendió, era la primera vez que la escuchaba decir algo así.

Hizo lo mismo 3 veces más, la herida era grande y profunda.

Ana no pudo más, el dolor era muy grande.

-¡Lionel, no más por favor, duele! -Dijo ella con la voz entre cortada y llorando.

A él se le rompió el corazón verla así, pero era por su bien. Siguió no le importo los reclamos de ella o que lo insultara.

Solo siguió.

Después de los 2 minutas más dolorosos para Ana terminaron, soltó un suspiro de alivio, y se durmió.

Jorge López.

Subí las escaleras esperando encontrarme con Chiara, pero lo único que vi fue a Katja. Con Chiara.

Me acerqué enojado.

-¡La estas molestando de nuevo! -le reclamé a Katja.

No, no dejaría que molestasen a Chiara.

(...)

¡Ave María purísima! Ahre.

Todo trágico men.

♡[Si lees alguna historia con el mismo título y/o trama y en ninguna parte dice "adaptada" avísame, me están plagiando.]♡

-Voten y Comenten.

-Javiii lxs ama♡.

La Misión | Elenco de Soy Luna.Where stories live. Discover now