No se suelten

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Sábado 31 de Octubre del 2015, 05:55 PM.

Esa tarde todo parecía muy tranquilo en los suburbios de Hiddeville. Era un día fresco y con muchas nubes, como en cada otoño, pero eso nunca fue razón para tener las calles vacías, porque con todos esos niños disfrazados que iban de aquí para allá pidiendo dulces, las calles no estarían para nada vacías, igual que cada Halloween.

Vampiros, brujitas, hombres lobo, hadas, monstruos, había todo tipo de criaturas míticas deambulando por las calles y banquetas. Muchos de los niños más grandes iban junto a sus amigos, alguno de sus padres o simplemente iban solos. Únicamente los más pequeños solían ir acompañados por ambos padres.

Pero entre todos ellos, había una pequeña disfrazada de pirata, que caminaba en medio de sus hermanos mayores, mientras cada uno la tomaba de la mano. Chloe y los gemelos Thunderman habían salido hace poco tiempo, y la pequeña estaba muy emocionada al ver a otros niños corriendo por la acera con todo tipo de disfraces, algunos de ellos con sus calabazas repletas de caramelos.

"¡Wow! ¡Miren!" Exclamó la pequeña al ver a una niña disfrazada de princesa.

Todo parecía tan nuevo, y tan divertido para ella, y estaba feliz de poder ir junto a sus hermanos. Pero lejos de lo que ellos pensaron antes, ella no los eligió solo por un simple capricho. En la inocente mente de Chloe eso debía bastar para que Phoebe y Max pudieran llevarse bien como antes. Y si debía pasear con ellos tomando sus manos para hacerlos sonreír otra vez, no se rendiría hasta lograrlo.

Muchos de los adultos que acompañaban a los niños también usaban disfraces o partes de ellos, pero no los gemelos. Ellos simplemente fueron con la ropa que normalmente usaban en los días frescos, aunque claro, Chloe les ayudó a elegir, después de que prácticamente los arrastró fuera de la casa sin darles tiempo de cambiarse.

Algunos minutos antes, Phoebe y Max le habían dado algunos consejos a su hermanita, antes de salir a la calle:

"Okay Chloe, recuerda que no puedes teletransportarte ahí afuera." Dijo Phoebe a su hermanita, casi sonando como Barb.

"Cierto... sólo si ves la oportunidad de conseguir más dulces antes que otros niños." Susurró Max, con una voz conspiradora.

"Max, no le des malas ideas. No lo escuches Chloe, es más divertido caminar de casa en casa." Aseguró la joven heroína, causando una sonrisa burlona en el rostro de Max.

"Si, ¿ya podemos irnos? Por favor." Preguntó la niña, con una aburrida expresión.

"Okay, okay." Respondió Phoebe, tomando su mano otra vez, y justo después, Max imitó su acción.

Y así, mientras iban los 3 caminando por la acera, se aproximaban a la primera casa en la que Chloe obtendría sus primeros dulces de la tarde, y la pequeña pirata no podía dejar de sonreír. Esa casa tenía adornos de Halloween por todas partes, telarañas artificiales, algunos fantasmitas en las ventanas, igual que la mayoría de las casas del vecindario. Incluso había varias calabazas con luces en el patio. La pequeña estaba maravillada con todo.

Pero en un momento dado, ella corrió para llegar hasta el patio de la residencia, y como sus hermanos no la soltaron, los arrastró con ella causando que los dos tocaran sus brazos por accidente, solo por unos segundos. Ninguno de ellos se dio cuenta, pero ese era el primer acercamiento real que tenían en días. Ambos trataron de fingir que nada había pasado.

Cuando finalmente llegaron a la casa, Chloe soltó las manos de los gemelos y Max se dispuso a entregarle la calabaza.

"Muy bien Chloe, recuerdas lo que hay que hacer, ¿verdad?" Preguntó él cuidadosamente.

Truco o tratoWhere stories live. Discover now