CONFIANZA EN MI

61 6 0
                                    


Al levantarme siento una confianza en mí, un deseo de hacer tantas, cosas, que por lo primero que empiezo es el Florencia, marco el número de Carolina

—Buenos días señorita en que puedo ayudarla.

—Buenos días caro necesito un informe de cómo ha estado el Florencia en mi ausencia, también necesito que me consigas bocetos de pinturas para interiores.

—Muy bien señorita trabajare en ello.

—Gracias Caro.

Al colgar me baño me arreglo para ir a entrenar tomo todo lo que necesito y me voy.

Al llegar Arturo me mira de manera distinta, o a lo mejor es mi imaginación.

—Buenos días Arturo ¿Podemos hablar antes de empezar?

—Claro Ale.

—Será que podamos cambiar los horarios del entrenamiento, es que tengo que volver al trabajo, necesito trabajar.

—Mmm veré que puedo hacer ok tengo que ver si no tengo que mover otro cliente, si tengo un espacio vacío te aviso ok.

—Gracias Arturo.

—Mmm Ale otra cosa estas mejor.

—Si claro estoy muy bien solo fue el momento de la adrenalina.

—Mira Alejandra, a mi parecer tú ya puedes defenderte sola, tienes una energía que no cualquiera posee y a eso agrega le el deseo de partirle su suerte a ese cabrón mucho mejor, yo solo te recomendaría que vieras videos sobre defensa y así apoyarte más, pero si quieres continuar conmigo está bien la decisión es tuya.

—Muy bien Arturo lo pensare.

Pasamos el día entrenando, todo va muy bien, ya no me agarra desprevenida cuando cambia de movimientos y soy más rápida como quiso el que mejorara esa parte, pues lo he hecho, pero aun así duele de vez en cuando estar en la colchoneta, cuando terminamos, llego a mi casa temprano, preparo la lavadora una de las pocas cosas que dejaron esos hombres, se paró la ropa blanca de la de color que en si no es mucha porque no es salido, me mantenido alejada de todos, pero ya no más. En lo que la lavadora trabaja yo estoy sacando el colchón roto de la segunda habitación, me cuesta algo de trabajo pero lo hago. La base del colchón está bien así que no necesito deshacerme de ella. Y así lo hago sucesivamente tiendo la ropa en la terraza pongo el segundo montón de ropa y sigo limpiando, barro muy bien el cuarto, continuando por el mío, el pasillo y hasta llegar a la sala, limpio muy bien y por último la cocina, saco todo lo que no sirve y lo que no he hecho por que no he tenido tiempo, si lo se debe ser estúpido siendo yo una chef que tenga una cocina descuidada, saco todo lo que me queda por tirar y mi cocina ahora que la veo está casi vacía, tendré que comprar muchas cosas, quizás muchas de ellas en pagos por que ahora mi capital financiero anda en amarillo.

Cuando termino de limpiar, prendo la última pasada de ropa lavo mi terraza, y por ultimo me baño yo, cuando he terminado de asearme, aplico crema desde mis tobillos hasta mis piernas, después mis brazos, me pongo la ropa interior, unos pantalones y una camiseta tipo polo color rosa palo.

Alguien toca a mi puerta y son mis amigas las que llegan con comida y no me lo puedo creer también traen ¡un colchón matrimonial! ¿Pero qué carajo es esto?

—Esto es un colchón matrimonial — Dice Valeria

—Eso ya lo se me refiero el por qué han traído un colchón a mi casa.

—Lo hemos traído por que no puedes seguir durmiendo en el piso como vagabunda somos tus amigas y esto lo hemos comprado Valiera  y yo, y no aceptamos un no por repuesta Alejandra — Dice Jazmín.

—Ay niñas que haría sin ustedes, nos unimos en un abrazo y en lo que entre las tres ponemos el colchón en la habitación de visitas, que es la única que tiene base para colchón por el momento dormiré aquí.

Cuando nos separamos un olor a comida inundan mi olfato, que rico huele, es lo que creo que es, digo a mis amigas.

—Abre lo y lo sabrás — Dice Valeria.

Cuando saco todo de las bolsas encuentro lasaña, papas fritas, helado de chocolate y por último y no menos importante espagueti a los tres quesos, ay niñas todo es increíble, pero en donde han comprado esto, si ustedes no cocinan.

—Lo hemos encargado con Carolina, tu asistente-gerente.

—¡Ay niñas gracias son un amor! y como si estuvieran cantando las dos dicen al mismo tiempo.

—Ya sabíamos —No reímos las tres sacamos todo lo necesario para comer.

—Niñas tengo que decirles algo.

Las dos me miran como si les fuera a contar lo peor del mundo.

—Te escuchamos Dice Valería

—Ayer estuve en el hospital, por un bajo de presión, pero estoy bien.

—¡Queeeee! ¿Por qué no nos avisaste?- Articula Jazmín.

—No les avise por que no fue nada grave, aparte no me desmalle por completo, Arturo me llevo al hospital y me trajo a casa

—Mmmm ya tendré que darle las gracias a Arturo por tan buen entrenador, en una de esas hasta yo me apunto a sus clases — Dice Jazmín con cara picarona y con el tono de voz bastante sensual.

—Ale ahora que te veo bien tu cuerpo está más tonificado y más firme se ve espectacular, hasta yo me inscribo para mejorar el mío Jajaja.

—Ay Valeria que cosas dices, pero si todo tu cuerpecito se ve bien con lo que le pongas hay más de uno de tras de ti.

—Ya lo sé cariño pero tú y yo somos alérgicas al amor, ya lo sabes.

—Y ¿Si llega alguien al que no podamos olvidar y con el que queramos pasar todo el día y más?

—Pues si es el bueno cariño, lo aceptaremos.

—Ay por favor y que sean buenos en la cama — Dice Jazmín que solo había hecho dos preguntas, en un tono pícaro y con sonrisa maliciosa.

La cena esta buenísima, nunca he ido de esas mujeres que hacen dieta ni de las que cuentan cuantas calorías están consumiendo, al contrario cuando estaba en la carrera todo lo que cocinábamos cuando ya sacábamos la presentación del plato después de que el chef daba su visto bueno, era una de las que siempre comían ahí mismo sin necesidad de llevar algún toper.

Cuando mis amigas se van recojo todo y limpio la cocina, cuando he terminado, me voy al cuarto busco mi ropa para dormir y voy al cuarto de baño, me desvisto y entro en el agua, lavo mi cabello, mi cuerpo, me depilo las piernas, las axilas y el bigote, y en cuanto a mi parte intima estoy decidiendo si lo depilo o no cuando decido que si lo hare, empiezo con ello, al terminar, me enjaguo bien el cabello y el cuerpo.

CONTRA LA PARED #InsideAwards2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora