¿Qué haces aquí?

Nada te vi dormida y también me dio sueño.

¿Dormí demasiado?

Si rubia, hasta roncabas, que horror.

¿Qué?, ¿de verdad?, ¡qué vergüenza!

Es mentira, no roncabas, sólo babeaste un poco.

Deja los chistes.

—¿Por qué estabas durmiendo? Tú no te duermes en hora de clases. —Porque si mal no lo recuerdo ella estaba durmiendo en clases también.

Me quedé hasta muy tarde ensayando la canción que cantaré con Nero, él es demasiado bueno cantando, yo debía estar a su nivel y no pude resistir mas.

—Al nivel de él, ¡qué bien! —dije con sarcasmo, y de nuevo me sentí celoso.

Tú también eres bueno, has mejorado.

Gracias, ¿qué canción van a cantar?

De nada, vamos a cantar Shape of you de Ed Sheeran. La elegimos ayer.

Ok, ya regreso. dije.

Como estoy enojado voy a ir a comprar algo para mí y de paso algo para la rubia.
Compré dos jugos, uno de banana y otro de naranja. Regresé al aula, pero paré en la puerta, porque vi a la rubia conversando con Nero.
¡Súper! Me voy un momento y Nero ya está aquí.
Me acerqué a Nero y lo empujé, luego le entregué el jugo, enojado. Me fui del aula, luego tendría que entrar porque tengo clases.

Sunmer's pov

Rin se quedó viendo como salía Len por la puerta, asombrada, por la forma infantil en que se comportó.

Bueno, mañana yo seguiré practicando.

Ok, yo también practicaré.

Nero dejó el aula, mientras tocaba su hombro, debido al golpe de Len.
Rin decidió quedarse en el aula, tomando el jugó que le había dado Len, pensando en cómo hacer para convencerlo de ir.

En la salida

A la hora de salida Rin volteó su vista a Len.

Len, vamos, apúrate que nos esperan. Rin agarró del brazo a Len, incitándolo a levantarse de su puesto.

Relájate un momento, ¿a dónde?

A una cena con tu hermano y mi hermana.

Bye rubia, yo no voy. Len sabía para qué era la cena.

No me interesa tienes que ir, vamos.

Sorry, I don't care, is your problem.

No hablo inglés, tienes que venir.

Muy tarde ya tomé mi maleta y me voy. y en realidad se estaba yendo.

¡Detente!

¿Y si no me detengo, qué harás? le preguntó desafiándola, Rin se puso seria.

Esto mumuró y comenzó a husmear en su mochila, hasta que encontró lo que quería —, mira lo que tengo en mis manos. dijo y le enseñó una fotografía de él cuando estaba pequeño.

Dos corazones y una llave Where stories live. Discover now