Eran las tres y poco de la tarde, no recuerdo mucho. Estaba recostada en mi cama, con el aire acondicionado encendido, hacía calor y no sabía que hacer. Pensé en ir a la casa de Florencia, pero como debe ser, no iba a ir sin preguntarle antes. ¿Te podrías imaginar ir a la casa de tu mejor amiga y que no esté? Me ha pasado, por eso decidí enviarle un mensaje de texto.
Yo: Flor, ¿estás en tu casa? ♥
Flor: Sí, ¿querés venir?
Yo: Bueno dale, pero después tenemos que ir a ensayar, ¿te acordás?
Flor: Sí, traete el bikini así nos metemos a la piscina y las cosas para ir al ensayo.
Yo: Bueno, ya voy para allá, te quiero ♥
Flor: Yo más ♥
Me levanté de la cama y empecé a arreglarme, casi salgo del cuarto con un problema: Toqué mis bolsillos y noté que había algo que faltaba, era mi celular. Lo agarré y bajé a saludar a mamá que estaba en la cocina.
-¡Mamáaaaaa, me voy a lo de Flor!
-No te vas de la casa sin saludarme.- Me dijo mamá cocinando algo que parecía una torta
-¡Chau mamá!- Le dije corriendo a la puerta.
-¡Ashley, vení acá, y saludame! A parte tengo que avisarte algo!
Allí fui y me acerqué a regañadientes:
-¿Si mamá?- Le dije simulando una sonrisa que mostraba molestia.
-Luego del ensayo, vengan para acá, que estoy preparando una torta helada de chocolate para merendar. ¿A que hora termina más o menos?- Dijo lavando unas cucharas.
-A las siete terminamos y ponele que y cuarto lleguemos acá.- La saludé y me fui.
Me fui andando en skate, el día estaba soleado y no hacía tanta calor como dentro de mi casa. El cielo estaba despejado y el sol deslumbraba todas las cuadra que estaba a mi vista. Cuando llegué a lo de Flor, toqué al fin el timbre, oí su voz por el portero eléctrico, ella, definitivamente me estaba viendo por la cámara.
-Aló, ¿Quien es?- Dijo una voz entre risas, era la inigualable voz de Florencia.
-¿Y quien más?- Le digo riéndome.
-Ya te abro, pero mira la cámara.
Miré a la esquina del muro, que estaba la cámara, sonreí y le tiré un beso. De repente empezó a abrirse el gran portón y la vi, allá, en la puerta de su casa esperándome sonriendo.
Florencia, es una chica baja, bastante flaquita y rubia, de ojos azules y sonrisa blanca, ella era muy risueña. Somos amigas desde jardín de infantes.
Salí corriendo a abrazarla y saludarla, como si no nos hubiésemos visto en mucho tiempo.
-¡Al fin viniste!- Me dijo Flor, terminándome de abrazar.
-Sí, jaja, estoy muerta de calor.
-Bueno, entremos que acá afuera está insoportable.- Me dijo Flor tomándome la mano.
La casa de Florencia es una casa de ensueño, ella vive solo con su madre y siempre hay olor a incienso, siempre de flores. Una vez compraron uno que al parecer era de vainilla y yo pensé que estaban horneando algo y me explicaron que era un incienso que bla, bla, bla. Ya hablaremos de la vida de Flor.
Llegué a su cuarto y me puse mi bikini y fuimos corriendo a la piscina, nos recostamos en unos colchones inflables y en seguida Carla, su madre nos trajo jugo de naranja para tomar, me saludó y se fue adentro. De repente Flor me miró de manera cómplice, yo no entendía lo que sucedía, ella se reía.
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Stars Dancing: Con toda la energía
Mystery / Thriller"Star Dancing" es una historia que no pararás de leer, una historia inspiradora, una historia de baile. Ashley es una chica de 16 años, que tiene un sueño: Participar del mayor concurso, las Regionales de baile. Junto con Florencia, su mejor...