Secreto de Hermanos ©

Capitulo 17 "Lo siento, ya no quiero mas secretos."

Me comencé a mover entre las sabanas, había algo que me faltaba en cuanto abrí los ojos ya sabia que era, no estaba Niall, frote de nuevo mis ojos con un bostezo me levante de cama camine hasta el vestidor, tome una polera manga larga y me la puse, unas zapatillas y listo solo con el short de la pijama era cómodo aparte estaríamos en casa. Baje a la cocina, y vi por la ventana que Niall se encontraba afuera podando el césped, estaba con un polo plomo y seguía con el pantalón de la pijama se lo veía tranquilo. De volví mi atención hacia la cocina tome pan y lo puse en la tostadora, luego saque unos huevos y jamón, comencé a hacer el desayuno, olía delicioso. Al terminar puse todo sobre la barra, camine hasta la puerta para avisarle a Niall que entre.

-¡Niall!- grite

-¿Qué paso amor? – dijo parando de podar el césped.

-A desayunar. –dije sonriendo.

-¿La palabra mágica? – dijo apoyándose en la podadora.

-¿Por favor? – pregunte.

-No, la otra palabra mágica la que hace que esta relación se complemente a un mas. –dijo moviendo las manos frente su rostro de un lado al otro, formando las dos un arco.

-¿Amor? – dije divertida.

-Va, Lia dilo con más entusiasmo, como si en verdad me quisieras. –dijo sonriendo

Reí por lo que me dijo, pero a veces sentía que Niall le gusta que le repitieran cuanto lo aman tal vez es por que siente que aun le falta amor o por que en su infancia tubo la ausencia del mismo.

-No seas idiota te amo mucho, ¿amor puedes venir?, el desayuno ya esta servido. – dije sonriendo

-Por supuesto amor ya voy.

Corrió hasta donde yo estaba, cuando estuvimos frente a frente me planto un beso en los labios sin tocarme, cuando termino ese beso dulce, me mostro sus manos.

-me iré a lavar las mano.

-Apúrate.

En cuanto se dio la vuelta le di una nalgada en el culo, haciendo que el se diera la vuelta e hizo que mis mejillas se cubrieran de un rubor intenso.

-¿Señorita Lia, acaba de darme un golpe en el culo? – dijo mirándome sorprendido.

-Creo que si – dije riendo.

-Oh… le prometo que esto no se quedara asi, pero tengo hambre y prefiero disfrutar de su comida primero y luego ir a amarla al cuarto por que yo se que no saldremos de ahí hasta que se ponga el sol.

Con sus palabras tan delicadas pero prometedoras me dejo boquiabierta, pero seguí divertida y volví a la cocina, saque el café que ya estaba listo.

-¿Quieres café con leche? –grite para que me escuchara.

-¡por favor!

Comencé a verter el café en las tazas, sentí como las manos de Niall me tomaban por la cintura apegándome a el, dando pequeños besos en mi cuello, haciendo provocar una reacción placentera abrigándome a cerrar los ojos, y haciendo que mi mano se pase por su cabello sintiendo esa deliciosa sensación.

-me… mejor vamos a tomar el desayuno. –dije un poco mareada.

-Te ayudo preciosa. –dijo por ultimo dándome un beso en la boca, y tomando las tazas y llevándolas a la barra.

Camine tras el hasta la barra, aun sin tomar alimento, de pronto el estomago de Niall rugió haciendo que los dos riéramos.

-Lo siento, es que tengo hambre. –dijo un poco sonrojado.