—Buenos días, Zack.— le sonrió al chico, y le ayudo a dejar sus cosas detrás de la carrocería.

—¿Vere a la chica machetes en acción?— bromeo Zack viendo como Ellie ya tenia sus machetes detrás de su espalda.— seria genial si me enseñas a usarlos.

—Si, sigue soñando.— carcajeó Ellie sentándose en la carrocería.

Sonrió al ver como Beth se acercaba caminando, cargando un cesto. Estos dos chicos se habían hecho novios, y a la castaña de verdad le divierte ver parejas jóvenes en la prisión.

—Hola.— le saludo Zack acercándose a la rubia.— iba a ir a buscarte.

Ellie hizo sonidos con su boca cuando los dos chicos se besaron, sacándole una risa a Beth. Era bastante divertido molestar a los jóvenes enamorados.

—¿Qué pasa?— le preguntó Beth mirando a su novio.

—Bueno, el comité retiró a todos los del equipo del carbón...de salir afuera.— le explico Zack, haciéndose el genial frente a Beth.— ahora le falta personal. Se me ocurrió que debería ayudar, ir con ellos.

—Y ya sabes, me quería asegurar de verte antes.— agrego el chico.

—De acuerdo.— sonrió Beth como si no importara, sacándole una carcajada a Ellie.

—Porque, ya sabes es peligroso salir.—

—Lo sé.— rió Beth, besando su mejilla y alejándose de Zack.

—Auch.— susurro Ellie mirando como la rubia se alejaba del lugar caminando feliz.

—¿Vas a despedirte?— pregunto Zack mirando como la rubia ya se alejaba.

—No.— rió Beth.

Ellie solo miro aguantando la risa la escena, Zack quedo de pie en el lugar mientras que Beth se iba como si no le importara nada.

—Es como una maldita novela romántica. — llego Daryl dejando unas cosas detrás de la camioneta, y haciendo reír a Ellie.

La chica se bajo de la carrocería y ayudó al cazador a cerrarla, no sin antes sentir como la acorralaba contra la camioneta, haciendo reír nerviosa a la chica.

—¿Piensas ir con esas pintas?— le susurro el cazador mirándola de pies a cabeza.

—¿De que hablas?— le gruño la chica, desafiando la mirada del cazador.— es ropa normal.

Escucho el suspiro cabreado de Daryl, sabia que en la prisión habían unos cuantos jóvenes que encontraban hermosa a la castaña, y que Ellie mostrara sus perfecta piernas le enojaba un poco.

—No empieces, no tengo demasiada ropa, no te quejes.— bufo Ellie separándose de Daryl y caminando hacia Shasha.

Pero como lo esperaba, el cazador cogió su brazo deteniendo su paso. Sonrió encima de los labios de Daryl, mientras este le besaba devorando los labios de la chica, le encantaba recibir este tipo de besos en las mañanas.

—Buenos días, chicos.— le interrumpió Glenn pasando por su lado.

—Maldito Glenn.— susurro Ellie abalanzándose encima del coreano y molestándolo.

Mientras que Daryl solo gruño, al ver como siempre el chino les interrumpía en algunos momentos que tenía con su chica.

—Hola.— escucharon saludar a Bob, quien estaba frente a los automóviles.— me gustaría comenzar a hacerme valer.

—Bob, sólo ha pasado una semana.— le sonrió Ellie mirándolo, y tapando el sol con una de sus manos.

—Esa es una semana digna de comidas.— dio a entender el hombre moreno, mirando a Ellie quien estaba a un lado de Shasha.— un techo sobre mi cabeza. Déjame ganar mi sustento.

How many walkers have you killed? (Daryl Dixon.) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora