The only truth [Larry Stylinson] |EDITANDO|

Capítulo VII

''Querido Harry.

Nuevamente escribo cariño, espero y te encuentres bien. Por favor cuídate lo más que puedas, Louis no soportaría si algo te llegase a pasar, además yo no sé qué haría sin él.

Él sigue llegando con golpes, no sé qué está sucediendo cariño, trato de averiguar pero él simplemente se rehúsa a decirme.

Con cariño. Jay xx''

Niall jaloneaba con fuerza la mano de su novio, quería poder soltarse e ir a defender a su pequeño amigo el cual estaba siendo golpeado por el grupo de Tyler y Jair.

-¡Suéltame! Lo están lastimando, déjame ayudarlo.

-¡No, Niall! Luego tú serás el que salga perjudicado

El blondo empujó al moreno tratando nuevamente de zafarse. Zayn tomó con brusquedad al menor y lo cargó tal cual un saco de papas.

-¡Bájame en este maldito instante bastardo!

-Cállate. Maldita sea -masculló rodando sus ojos.

Los lentes de Louis estaban rotos, apenas y quedaban las lunas, pero aquellos bordes estaban hechos pedazos, se reincorporó del suelo, era horrible ser la burla principal del grupo de chicos malos. Vaya que lo era.

Recogiendo su maleta se dirigió al baño. Era imposible no ver su reflejo, tan demacrado.

Su labio estaba partido, chorreaba gotas de sangre, su estómago dolía por las incontables patadas que recibió. Se sorprendía de él mismo por aguantar tantos abucheos. Louis no debía permitirlo pero no era lo suficientemente fuerte como para defenderse.

Lavó su rostro con rapidez limpiando cualquier rastro de sangre y lágrimas. Cada vez se le estaba haciendo más difícil esto.

Abandonando el baño se dirigió a la salida. Hoy no asistiría a clases.

Louis caminaba apoyándose cada vez que podía, su vista era irregular. Todo se veía borroso y no lograba distinguir los rostros, no sabía cómo llegaría a casa sin terminar bajo un vehículo.

-Hey. Hola, ¿Cómo es...? ¿Qué te paso?

-¿Quién eres?

El pequeño castaño restregó sus ojos con desesperación, odiaba necesitar unos anteojos.

-Soy Luke. ¿No ves?

-S-Se rompieron mis lentes, me caí.

El rubio no le creyó nada, sabía que esos golpes no eran de una simple caída.

-¿Quieres que te ayude?

Louis iba a negar, pero justo ahora necesitaba llegar a casa a pesar de que no era la hora de salida.

-Quiero ir a mi casa. No puedo distinguir nada y-yo n-

-Yo te llevo.

El menor sintió la mano del chico en su propia mano, sintió también un leve apretón en esta.

Luke llevó a Louis hasta su auto guiándolo para que no llegara a caerse, dentro de este todo estaba muy tranquilo. En todo el trayecto Louis solo dijo la dirección de su casa, de ahí contesto con monosílabos a todas las preguntas del rubio.

-No.

-¿Tienes novio?

-Sí.

-¿Por qué no lo llamaste para que te viniera a recoger? Digo, no es que a mí me moleste, en realidad me siento afortunado de estar llevándote a tu casa, por más insignificante que parezca el momento.