» 𝐈𝐧𝐦𝐮𝐧𝐞 𝐚 𝐥𝐨𝐬 𝐆𝐨𝐥𝐩𝐞𝐬 « || Fʀᴇxʏ 's Fɪᴄ. || Freddy X Foxy

【Capítulo„ ００２】

【Narrado por Freddy】

Habíamos llegado a la escuela con Chica, aunque cada uno se fue por su camino. Con Chica tenemos la misma edad, así que vamos al mismo salón de clases, y mientras ella socializaba con quien se encontraba, yo me fui por otro camino, pensando que tocaría el mismo salón del año pasado. . . Fue muy estúpido de mi parte irme por otro lado, el salón del que hablaba quedaba en el tercer piso y me había ido al pasillo en donde habían miles de escalones para llegar.

— Son muchas escaleras. . . Debí ir por el camino corto y soportar a Chica. — Murmuré para mi mismo estando ya rendido y aceptando mi estupidez. . . Deberían hacer un ascensor, o al menos eso pensaba mientras subía.

Estuve sumergido en mis propios pensamientos durante cada escalón que subía, pero de repente fui consiente de mi al rededor sentí a alguien subir por los mismos escalones que yo estaba tomando, no le hice mucho caso y tampoco agarre tanta importancia en voltearme para ver quien era, fue así hasta que ese desconocido que también iba subiendo me tocó el hombro, automáticamente volteé a verlo. . . Rayos, tenía que ser él.

— Oh no. . . Tú. — Dije con cierto desagrado al ver de quien se trataba, es Foxy.

— Ou- ehm. . . ¡Hola Freddy! — Me saludó, gesto que no dude en responder, no había nada de malo en saludarlo, no quiero amargar las primeras horas de primer día de último año.

— Hola. . . ¿Te toca el mismo salón? — Pregunté entre el silencio que se me hacía incomodo para mí.

— Sí, bueno, yo. . . Tuve ganas de venir por acá porque estaría solo así que. . . — El tarado es malo para mentir, siempre juega con sus dedos y sus nervios lo delatan, esto era algo de lo que siempre me he dado cuenta cuando solíamos hablar y convivir más cuando llegué al colegio por primera vez. Decidí no decir nada y seguirle la corriente, si quiere estar solo lo dejaría seguir su camino.

— Bueno, si quieres estar solo puedes adelantarte, no tengo problema. — Me hice a un lado para que pasara y se adelantara, él no dijo nada y solo noté como se ponía rojo mientras subía un par de escalones para seguir subiendo.

No faltaba mucho para llegar al piso destinado, y comencé a pensar que él estaba en el segundo piso y se unió a las escaleras para llegar, de todos los caminos escogió el largo, digamos que volví a entrar en el mundo de los pensamientos por ese hecho. Él subía con lentitud las escaleras. . . Me gustaría que fuera un poco más rápido. 

De repente detuve mi caminar, estábamos a punto de llegar y el torpe de Foxy se enredó entre sus propios pies y cayó en el piso, bueno, al menos no se hizo mucho daño o eso creo.

— Ten más cuidado, ¿quieres? — Dije con cierta molestia mientras me hacia a un lado para por fin llegar al piso, diablos, si que es un torpe sin remedio. — Que molesto. . .

— ¡Hey, tú!, ¿cuál es tu problema? se cayó frente de ti y tú solo sigues como si nada, que poca empatía y buena voluntad la tuya. — Volteé al instante pero no dije nada al ver quien me dirigía la voz, no era Foxy, él estaba en el suelo quejándose y siendo socorrido por una. . . Chica supongo, de cabellos largos y morados y rostro redondo. . . Es linda.

— Yo, pues. . .

— ¿Viste Foxy? —La linda chica se dirigió a él mientras que yo me quedaba paralizado, ¿qué rayos me está ocurriendo? — La timidez tiene remedio como las heridas de una torpeza o agresión, si trabajas en tu autoestima y cariño propio todo irá para mejor. . . En cambio la estupidez como la de este idiota, lastima que ni cura tiene, se quedará así. Vamos, iremos al baño y luego me guiarás a la sala que nos toca para no llegar tarde.