Mi lugar esta a tú lado

Prólogo

Realidad: Alternativa

Rating: K+

Pareja: George x Fred

Disclaimer: Todo lo reconocible es de J.K.  La trama es mía pero no me pagan por esto y lo hago solo por ocio (~o.o)~

Advertencias: Puede que encuentren discordancias en la batalla final, un poco de lenguaje altisonante y un "poco" de incesto como es de esperarse.

Esta historia se compondrá de este bello prólogo y un solo capítulo. Es la primera vez que escribo sobre el universo de Harry Potter y también la primera vez que participo en un festival así que estoy emocionada, sin más dilación. ¡Empezamos!

Luego de la bienvenida de Percy los gemelos salieron corriendo hacia los exteriores del castillo para pelear cuando la guerra por fin empezará. Después de la herida de George decidieron no volver a separarse, era preocupante el que sólo esa vez se habían separado y uno de ellos saliera herido ¿Que sería a la próxima? ¿Uno de ellos muerto? No señor, ellos no iban a morir ese día, ellos saldrían con vida de esa pelea.
Llegaron a uno de los laterales del castillo y pegados hombro con hombro esperaron el ataque de los dementores, mortifagos u hombres lobo, se sentían invencibles mientras estuvieran juntos.

La batalla era intensa, después de la caída de las protecciones fue como sí una puerta del infierno fuera abierta ahí mismo, hechizos volaban de un lado a otro, personas morían parejo, la muerte no distinguía bandos. Fred y George actuaban como un sólo ser cubriendo certeramente los ataques que iban dirigidos hacia ellos, sacaban entre ataque y ataque algunos artículos de su tienda de bromas que fueron usados como armas y distractores.
Cuando por fin se vieron rodeados y con pocas posibilidades de salir vivos de eso, lanzaron un polvo peruano de oscuridad instantánea y aparecieron metros lejos, cerca de uno de los pasillos del Castillo. Al darse media vuelta Fred vio como si el tiempo pasará más lento.

Greyback saltó hacia el, un expeliarmus le desarmo pero eso no iba a detenerlo, esquivo las siguientes maldiciones cortantes y aturdidoras que le fueron lanzadas sin apenas parpadear, en un descuido, mientras George peleaba contra Dolohov y el trataba de alejar a Fenrir la vio, un Avada Kedavra que iba directo a su gemelo, la decisión fue tomada mucho antes de que siquiera se formulara un pensamiento coherente. Dejó de atacar a Greyback dándole una apertura para atacar, pero deteniendo efectivamente la maldición asesina. El dolor le hizo volver la vista al frente, el hombre lobo había clavado sus garras en su pecho, con un ademán juguetón y una mirada lasciva recorrió desde su oído izquierdo hasta su clavícula con su afilada uña, dejando una profunda herida a su paso.

—Ahora eres mío Weasley— La ronca voz le hizo estremecerse, sentía ganas de vomitar
—¡CRUCIO!— Fenrir empezó a retorcerse y gritar de dolor, arrastrándose lejos de él- Avada Kedavra— Un rayo verde impacto justo en el pecho del semi- humano.

Fred volteó a ver la fuente de los hechizos, George se hallaba rodeado de varios cuerpos de mortifagos con una mirada de furia que sólo desapareció cuando volteó a ver a su gemelo.

—Freddie ¿Estas bien?— Se acercó rápidamente y le lanzó varios hechizos de sanación.

De pronto la voz de Voldemort inundó sus mentes, su primera reacción fue abrazarse, el mensaje era claro pero ellos no traicionarian jamás a Harry.
En el gran salón se instalaron junto a sus otros hermanos, todos con distintos grados de daño. Fred fue rápidamente atendido por Madame Pomfrey y su madre, quien casi los ahogaba en su abrazo. George sólo se separó un momento de su lado, había arrinconado a Hermione y después de lanzar un Muffliato a su alrededor y luego de una acalorada discusión volvió con él, aunque con gesto decaído.

—¿Qué pasa Georgie?— Preguntó tratando de aligerar el ambiente— Sólo me mordió un perrito, verás que pronto me recuperare— Le sonrió a su hermano

Su hermano le sonrió de lado y lo abrazó, se sentía una extraña aura alrededor de todos los Weasley pero esta se terminó cuando supieron que Harry iría a plantarle cara al señor oscuro.
Después de los primeros 10 minutos de espera consiguieron acceso a una red flú e hicieron una llamada a Sortilegios Weasley donde Verity y su familia estaban escondidos. En menos de lo que canta un gallo ya tenían un cargamento de productos Weasley altamente letales. Estos fueron repartidos entre varios estudiantes de menor grado cuya experiencia en hechizos era poca.
Los mortifagos volvieron con Harry siendo cargado por Hagrid, parte de la esperanza murió al ver al azabache muerto... hasta que Neville ayudó con su discurso, Potter saltó de los brazos del semigigante y la batalla empezó de nuevo, a pesar de las heridas que presentaban muchos todos los que estaban disponibles pelearon. Molly mató a Bellatrix por fin y la batalla final entre Harry contra Voldemort fue para muchos el cierre de un ciclo y el inicio de lo que se espera uno mejor.

Después de la batalla fueron a San Mungo, Fred tenía la licantropía como era de esperar, Molly lloró, George dejó de sonreír y los demás Weasley empezaron a formular un plan o algo así.

La primera Luna llena cayo en Mayo 11 y fue demasiado dolorosa. Fred estaba irritable y merodeaba por la casa de un lado a otro, George siendo su sombra con una idea casi suicida en mente y asegurándose de que nadie le separará de su gemelo, sabía que lo tratarían y estaba a la defensiva esperando que en cualquier momento alguno de sus familiares le lanzará un hechizo aturdidor. El atardecer se acercaba, Bill llegó una hora antes de que el sol se acabará y trató de hablar con el para que volviera a la casa, él se negó.
Minutos antes de que la Luna apareciera finalmente Fred le paso un vaso con jugo de calabaza, al tomarlo cayó dormido instantáneamente, podría jurar que escuchó a su gemelo disculparse pero la inconsciencia no le dejaba definir si eso había sido un sueño o algo real. Al día siguiente despertó tranquilo, había descansado adecuadamente después de no haberlo hecho en semanas pero en la bruma de su despertar no lograba recordar porque no habia dormido bien, hasta que escuchó quejas de su hermano. Toda neblina desapareció de su mente y bajo corriendo a la cocina, se encontró Bill riendo mientras su madre desinfectaba las heridas de su gemelo. Sintió su enojo aparecer y salió azotando la puerta con un par de voces siguiendolo hasta que se apareció en Sortilegios Weasley para tratar de calmarse.
Verity le dio la bienvenida y juntos empezaron a recoger y acomodar como un día cualquiera.

—¿Dónde esta Fred, Sr. Weasley?— La rubia preguntó mientras barria de arriba hacia abajo el acomodaba el mostrador.
—Estaba... lidiando con un pequeño problema peludo— Sonrió de lado el pelirrojo
—Oh... entiendo—Verity bajo y se sentó a su lado— Bueno, ya se solucionará eso jefe— Sonrió de lado

George se aferró a esa idea, todo estaría bien, su hermanos volvería a ser lo que eran antes de la guerra...

Fin del Prólogo