Soy Tuyo |j.b|

39.

Justin.

Adam entro a la habitación con la corbata en su mano, le di una sonrisa nerviosa. Puso una de sus manos en mi espalda e hizo que ambos nos miráramos frente al espejo.

-Justin, tranquilo-hablo mirándome a través de el, suspire-solo piensa que todo saldrá con total éxito y que será un muy buen matrimonio, como el de Jessica y Mike.

-Eso espero, Adam.

-Ten-me dio la corbata-termina de prepárate, estaré esperándote en la sala.

-Claro-le di una sonrisa.

Y como dijo, abandono la habitación dejándome a solas como lo estaba hace unos pocos segundos. Tome la corbata con ambas manos y la ajuste en mi camisa.

Ha llegado el día, el día de mi matrimonio junto a _______, tengo los nervios a flor de piel, quiero que todo salga como lo hemos estado planeando durante estos meses.

Nuestro matrimonio es en treinta minutos más, debo terminar de prepararme y relajarme antes de irnos junto Adam a la iglesia en donde nos esperaran todos nuestros invitados.

Me asegure de poner perfume en algunas partes de mi cuerpo y de arreglar mi cabello perfectamente, antes de salir de la habitación. Encontré a Adam sentado en la sala tecleando en su celular.

-Adam-hable para llamar su atención, el me miro con una sonrisa-¿ocurre algo?

-No, claro que no-hablo de inmediato-solo estoy hablando por mensajes con Lucy, ¿estás listo?

-Si, ¿todo luce bien?-pregunte.

Se levantó del sofá y se acercó a mi a pasos lentos.

-Estas excelente-sonrió-me da mucho orgullo verte vestido así, de novio... a punto de casarte con mi hija.

Espere a que continuara.

-Hazla muy feliz, Justin-puso sus manos a los lados de mis brazos-te quiero mucho, eres un hijo para mí y solo quiero que ustedes dos sean muy felices y puedan formar una hermosa familia.

-No te preocupes, hare que ella sea la mujer más feliz del mundo a mi lado, porque yo a su lado ya lo soy.

Sonrió soltando sus manos de mis brazos.

-Bueno, es hora de irnos-dijo-¿preparado?.

-Preparado-dije firme.

Ambos caminamos hasta la puerta del departamento y salimos del asegurándonos de dejar todo bien cerrado. Nos acercamos hasta el ascensor para bajar a la primera planta.

En el primer piso está el portero realizando su trabajo diario, nos miró con una enorme sonrisa.

-Mucha suerte, señor Bieber-me estrecho su mano-que su matrimonio salga muy lindo y espero que su novia y usted sean muy felices.

-Muchas gracias, enserio.

Finalmente, abandonamos el edificio hacia el auto de Adam que esta estacionado a unos metros de la entrada. Subí en el asiento copiloto y el a mi lado, encendió el motor y en un segundo comenzó a conducir hacia la iglesia.

Adam tardo unos pocos minutos en llegar a la iglesia, la misma en donde bautizamos a Jake. Se estaciono a unos pocos metros, mire hacia la entrada y vi algunos invitados llegar.

Bajamos de el y lentamente comenzamos a acercarnos, todos me miraron con una enorme sonrisa. Pude divisar de inmediato a mis familiares, me acerque hasta ellos para saludarlos.