"¿Por qué pones eso en mi bolsa?." Tenía miedo de su respuesta.
"No me mires así. No vas a estar trabajando 24/7 en este viaje, vas a tener momentos en que necesitarás salir y divertirte. Este vestido, sin embargo, es para cuando desees hacerlo sufrir." Todos sabíamos quién era y por qué querríamos hacerlo sufrir. Yo no sabía si eso era la mejor idea.
"Um, tal vez esa no es la mejor idea. Debería actuar como una adulta." No había mucha confianza en mi voz.
"Oh, terca, eres una adulta. La edad no importa. Este es el vestido que llevarás cuando quieras romper su mandíbula sin llegar a tocarlo. No estoy diciendo que tienes que usarlo, estoy diciendo que estará ahí si se presenta la ocasión. Todo depende de ti, eso es todo lo que digo." Rose dice brillantemente, sacando más ropa para mí y poniéndola en el bolso.
Dejé el vestido allí, a pesar de que me llamó la atención un par de veces más, decidí dejarlo debajo de toda mi ropa.
Tomé una respiración profunda tratando de mantenerme tranquila a medida que miraba el reloj, sintiendo el peso de lo que estaba a punto de suceder, y todo eso estaba estallando en mi cabeza. Rose me ayudó a terminar de empacar mientras Chase nos miraba, junto con comentarios sarcásticos escapándose de sus labios en cada instante.
Rose y Chase fueron los que me mantuvieron en tierra estos últimos 2 años, ellos fueron todo lo que tuve, cuando Lucas se fue. Cuando mi ansiedad empeoró, Chase dejó todo y me ayudó en cada paso. Cuando me temía lo peor, sentada sola en el baño frío, sin siquiera haber pasado un mes después de que él me había dejado, había sido Rose quien me había acompañado, y se sentó conmigo a la espera de los resultados, asegurándose de que no me desmayara o hiperventilara. No pasaban muchos días en los cuales no los viera. Eran mis mejores amigos.
Cuando mi maleta por fin estuvo completa, la dejé junto a la puerta, con todo lo demás que iba a necesitar para este largo viaje que duraría meses, lista para irme. Luego los tres nos derrumbamos en la cama, boca abajo en las sábanas.
"Chase, no merece descansar, él no hizo nada." Yo golpeé su hombro mientras él se disponía a ocupar un espacio en la cama junto a nosotras.
"Estaba dando apoyo moral, eso no es fácil. Creo que merezco descansar y comer pizza." Él responde, sacando su teléfono para ordenar una pizza para nosotros.
"Ambos se quedarán entonces?."
"Alguien tiene que llevarte al aeropuerto mañana." Rose murmuró, todavía boca abajo en una almohada.
Es una bofetada en la cara, un recordatorio de que tendría que salir de este círculo familiar y de la vida que he construido para mí aquí. Estoy feliz aquí sola. Esta asignación se sentía como el comienzo de algo completamente distinto. Al igual de que toda mi vida estaba a punto de cambiar.
Con ese inquietante pensamiento en mi mente, traté de disfrutar de la última noche aquí. Comí pizza, me reí con Rose y nos burlamos de Chase, comí helado compartiéndolo con Rose en mi cama mientras Chase, dormía en el suelo. Ellos se durmieron antes que yo, y yo me quedé despierta, escuchando sus respiraciones, mientras pensaba en Luke.
En momentos como estos, los tiempos entre el día y la noche, entre la vigilia y el sueño, es cuando me permito pensar en él. Tal vez si la luna me tragara entera, no me dolería tanto. Pero por ahora estoy mal. Me duele tanto, siento como si me estuviera deslizando entre las grietas del infierno. A veces, el dolor vale la pena. A veces vale la pena recordar la forma en que él solía hacerme sentir, viva y sin límites. Y, a veces, sólo duele.
Esta noche, es ambas cosas. Es tan agridulce. Puedo saborear nuestro último beso en mi lengua, sentir las lágrimas saladas que no permití dejar fluir durante tanto tiempo. Recuerdo la forma en que su mano se deslizó sobre mis caderas la primera vez que nos conocimos. Recuerdo nuestro primer beso, desesperado e incontrolable. Trazando sus tatuajes en la arena, golpeando una pared de ladrillos a causa de lo enojada que me puso. Él subiendo a través de mi ventana a la 1 am, empapado, sólo para asegurarse de que estaba bien. Escuchándolo tararear cuando pensó que estaba dormida. Recuerdo la forma en que su pecho se movió contra mi oído, con su ritmo cardíaco llenando mis sentidos. Recuerdo que me dio mi propio concierto privado en la playa, recogiendo las piezas cuando me desmoroné, hasta que él fue el único que me destrozó. Recuerdo la nota que realmente debí de haber quemado el día en que él se fue, arrugada y manchada, escondida en mi maleta con una imagen que era todo lo que tenía de nosotros.
Rose se meneó a mi lado, dándose la vuelta para ponerse cómoda. El sonido me sacó del especial agujero en mi mente en el cual estaba, y me enfrenté a la realidad de que en 24 horas estaré cara a cara con el hombre que intenté desesperadamente olvidar, pero no pude. No estaba segura si lo iba a golpear aún. Yo quería eso. Él me había roto el corazón y yo quería romper algo de él también.
Pero Chase tenía razón, Rose tenía razón. Necesitaba seguir adelante, de veras esta vez, poder conseguir el cierre de este capítulo, y la única manera de hacerlo era realmente enfrentándome a él.
Tomé una respiración profunda y cerré los ojos. Yo podía hacer esto. Me había hecho una promesa de ser fuerte hace mucho tiempo, y yo iba a cumplir esa promesa.
***
"Puedo hacer esto." Lo repito, tratando de convencerme. Los sonidos del aeropuerto, la gente corriendo a mi alrededor, las voces en el intercomunicador, los aviones afuera, todos me amenazaban con derrumbarme.
Rose estaba a mi lado, agarrando mi mano con la suya.
"Sí tu puedes."
"¿Y si lo estropeo? ¿Qué pasa si lo dejo entrar en mi cabeza y desordenarme a mi misma y la asignación?." Expreso mis miedos en voz baja, asegurándome de que Chase, quien estaba mirando a una atractiva asistente de vuelo junto a nosotras, no pudiera oír.
"No lo vas a dejar. Eres más fuerte que eso, te lo prometo. Tienes que ir y probarlo por ti misma. Chase y yo estamos a sólo una llamada telefónica, y tendrás a Niall, Michael, Ashton y Calum contigo. Nada pasará. No puede hacerte daño a menos que lo dejes. Ahora vas a dejar que el miedo de verlo otra vez arruine esto para ti o vas a conseguir patear su culo y darle su merecido y vivir? Este es tu momento para usar toda la maldad que hemos estado haciendo en los últimos 2 años. Recuerda, Lucas no importa."
"Luke no importa. Puedo hacer esto. Tengo esto." Murmuré, más para mí misma que para Rose.
Ella se abalanzó contra mí, abrazándome fuertemente, y Chase se unió, diciéndome adiós también. Cuando nos separamos, me sentí más fuerte, lista para irme. Agarré mi bolso, sonriéndoles a mis mejores amigos.
"Es hora de ir a patear culos."
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HOLAAAAAAAAA CHICAS! ¿como están?... sé que ha pasado bastante tiempo sin actualizar y de verdad que lo siento mucho, no tenía tiempo, y además no tenía cabeza para pensar en la historia:( mi mente estaba bloqueada, pero seguiré con esto, a lo mejor algunas ya olvidaron la fic, realmente no sé, sin embargo, trataré de actualizar un poco más seguido, todo depende de mis tiempos libres, así que ojalá entiendan.. De todos modos, espero que les haya gustado el capítulo, perdón por si hay algún error, suelo equivocarme en las palabras. Que tengan una bonita noche✨
🌸teffy, xx
✖Chapter 3.
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