Cuando la nueva estudiante de literatura inglesa de la universidad Washington Anastasia Steele, llega al campus sorprende a todos los estudiantes con su elegancia y reservada actitud, ella llama la atención de todos sobre todos de los chicos y de e...
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Mientras abro y entro por la puerta del local una campana suena, me paro en la entrada dándole un vistazo al lugar y parece ser agradable mientras busco con mi mirada a Liam puedo ver que en una de las mesas se encuentra nada menos que los hermanos de Mia, sus amigos y las muchachas que siempre paran pegados a ellos como un chicle, miro como ello el grupo se da cuenta de mi presencia así que desvió la mirada y sigo buscado a mi castaño amigo, ya pareceré ya se fijo en mi porque me sonríe y me saluda con una mano, yo le sonrió y avanzo hacia el, se para y me saluda con un beso en la mejilla.
-Ana, te había extrañado-dice mientras no sentamos.
-ni que decir de ti Liam, me hubiera gustado que hubieras venido con nosotras –le digo sinceramente.
-lo se pero ya estoy aquí cierto-dice el sonriéndome,
recuerdo cuando lo conocí el año pasado en una cena benéfica en la cual fuimos invitadas Kate y yo, cuándo lo vi me pareció uno de los chicos más atractivos que había visto con su cabello castaño claro y su ojos marrones, pero lo que me gusto fue su personalidad ya que es una persona llena de vida, pero me sorprendió en ese entonces el que me dijera que le gustaba los chicos ,ya que no estaba muy acostumbrada a la aceptación de su orientación sexual ,en mis tiempos eso no se vía y si había personas que lo hacían pero a escondida, luego de que me hice la idea el que él fuera gay no me molesto así que nos volvimos amigo.
Una camarera se os acerca y solo pido un jugo de fresas y continuamos con nuestra conversación.
-cierto ¿y ya pensaste que harás cuando te gradúes?–le digo con una ceja enarcada.
-primeramente iras a mi graduación cierto-dice entrecerrando los ojos.
-sabes que no me lo perdería por nada y además quería presentarte a nuevas personas que conocimos aquí, además no cambies de tema-le digo sonriendo.
-no cambio de tema solo quería asegurarme pero me intrigaste con lo de tus nuevos conocidos, y respecto a que hare pues creo que quizás venga un tiempo aquí a Seattle haber como me va y según dicen hay muchos chicos sexys en estos lugares friolentos-dice el pícaramente. a lo cual yo suelo una carcajada por la personalidad de mi castaño amigo.
-pues no lo sé, tu sabes que soy más inexperta que una niña de diez años-le digo riendo y él me sigue.
-y por qué no vino mi rubia favorita-dice el refiriendo a Kate con la cual tiene una relación de amor-odio.
-pues tuvo unos encargos que hacer, y cuéntame cómo te fue con tus exámenes-le digo ya más calmada. Mientras la mesara nos colocas nuestros pedidos y se retira.
-pues sabes que eso no son problemas para mí-dice el restándole importancia, y se que tiene razón ya que a sus recién cumplidos 20 años ya se graduare en informática, y es por eso que está ahora reunido conmigo, por sé que él me puede ayudar con lo que quiero saber.
