Plot? What plot? ||HideKane||

Indecente.

—Nos vamos. —Tomó su mano y buscó sus abrigos en el perchero junto a la puerta.

—Say it ain't so, I will not go —Kaneki le pasó su abrigo, y, luego de fallar dos veces a la manga, suspiró y lo ayudó a ponérselo—, turn the lights off, carry me home.

Lo obligó a salir de la casa, terminando de acomodar el cuello de su chaqueta en lo que intentaba parar un taxi. Los Nagachika eran tantos que estaban repartidos por toda la prefectura, y justamente ese año habían decidido reunirse en la casa más lejana a su vecindario.

"Cuando sea oficialmente parte de esta familia,ofreceré la casa cada año" pensó mientras subían al taxi y Hide dejaba decantar lo que sea que estaba cantando unos instantes atrás.

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—All I wanna do is fuck your body —llevaba cantando la misma canción desde que habían bajado del taxi, y le había apretado el trasero unas siete veces desde que se subieron al ascensor—, tonight's your lucky night, I know you want it. —Ni siquiera entendía lo que estaba cantando, y quizás eso le frustraba más que el hecho de que estaba cantando a todo pulmón y que posiblemente los vecinos saldrían a quejarse en cualquier momento.

—Ni siquiera entiendo lo que estás cantando, ¿¡y podrías dejar de masajear mi trasero!? —El rubio sonrió ampliamente y se aferró a su lado izquierdo antes de bajar en su piso.

—Lo que quiero hacer, es tomar tu cuerpo —recitó en un susurro contra su oreja y volvió a apretar su trasero—, es tu noche de suerte, sé que lo deseas. —Su rostro, orejas y hasta nuca se tornaron completamente rojos, Hide seguía riendo y prácticamente siendo arrastrado hasta su apartamento.

—¡H-Hide! —Kaneki se tapó el rostro con una mano—. Qué indecente.

El rubio rió estruendosamente y el pelinegro llamó a la puerta, esperaba que Nishio estuviera de buenas pulgas esa noche y no se quejara por el deplorable estado de su compañero de piso.

—Oh, Nagachika. —Dijo en cuanto abrió la puerta, con su inmutable expresión de siempre—. Oh, el novio de Nagachika. —Kaneki no iba a corregirlo, esa era una de sus metas en la vida. Nishio miró a la bola rubia que reía sin control ni razón aparente, aún abrazado a Kaneki, y con las mejillas rojas—. ¿No dijiste que evitarías que tomara de más?

—Lo intenté, pero desapareció y cuando volvió ya estaba así. —Hide musitó un pequeño "Oi", como si el comentario lo ofendiera y frotó su rostro contra el pecho de Kaneki.

—Como sea, ¿puedes llevarlo a tu casa? Kimipasará la noche aquí, y este tipo es jodidamente ruidoso cuando estáborracho. —Se cruzó de brazos y el pelinegro asintió, suspirando,después de todo, estaba en lo cierto.

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Hide había insistido en ir por las escaleras, y Kaneki no se negó, quizás así se le bajara la borrachera y dejara de cantar tan ruidosamente. Pero apenas habían bajado un piso cuando comenzó a cantar nuevamente, esta vez, con un extraño baile y todo.

—And we danced all night to the best song ever, we knew every line, now I can't remember, how it goes but I know, that I won't forget her. —Comenzó a caminar hacia atrás, señalando a su mejor amigo—. 'Cause we danced all night to the best song ever. I think it went oh, oh, oh—Corrió unos metros y el corazón de Kaneki subió hasta su boca cuando saltó las escaleras—, I think it went yeah, yeah, yeah. I think it goes "Oohh". —Hizo una pequeña ola él solo y el pelinegro llegó a su lado, agitado y preocupado como si fuera su madre.