En la escuela, me puse a hablar con Diego, mi mejor amigo.
Tu te enojaste, y le dijiste que no se acercara a mí a menos que tu estés cerca.                                

Era ridículo, y te lo dije.

Recuerdo muy bien tus palabras "Lo prefieres a el? " . Fue como si ubieras tocado algo en el interior de mi corazón, y en ese momento, te preferí a ti. Ahora puedo ver mi error.

Pequeñas CosasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora