Capítulo 19"Acepto"

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*Nora*

Salí de aquel despacho lo más dignamente que pude, cerré la puerta y me puse a correr por el pasillo, bajé las escaleras de tres en tres y continué mi carrera hasta salir de la agencia. Estaba a punto de explotar en un llanto desolador y no quería darle el gusto a nadie en Top 10 de verme así.

Cuando por fin pisé la calle dejé que rodarán sin control cientos de lágrimas acumuladas acompañadas de sollozos escalofriantes imposibles de contener.  No me lo creía, le daba vueltas a todo lo ocurrido desde que pise NY y me sentía víctima, engañada y sola, muy sola. ¿Cómo iba a salvarme de ésta?

Perdida en mis pensamientos no fui consciente de que estaba diluviando, hasta que llegué al hotel y la recepcionista me ofreció una toalla para secarme. Subí a la habitación y me metí en la ducha con agua caliente dónde traté de ahogar mil suspiros de desesperación. Al cabo de media hora me tumbé en la cama algo más calmada pero incapaz de dejar de llorar.

Debía llamar a Lola y contarle lo ocurrido, pero esperaba a que se me pasara el nudo que tenía en la garganta antes de marcar su número. Como si estuviéramos conectadas mentalmente, sonó el timbre de llamada de mi teléfono móvil, miré la pantalla y una imagen de Lola sonriente apareció en ella . Me estaba llamando pero yo no me atrevía a contestar, antes debía tratar de respirar un poco y ser capaz de hablar sin armar un drama. Llamó 3 veces seguidas y eso me preocupó, ella no insistiría de ese modo sin un motivo urgente, así que decidí descolgar y con esfuerzo la saludé como si no pasara nada ya que antes de contarle mis desgracias necesitaba saber que todos estaban bien.

— ¡Lolaaa! Perdona estaba en la ducha y no oí las llamadas, ¿pasa algo? — si de modelo no encontraba trabajo podía probar como actriz, era buena fingiendo, pensé.

— Ay Nora ya era hora, pasa algo sí, no quería molestarte pero necesitaba hablar contigo hoy.— Su voz era seria y eso en Lola no era habitual.

— ¿Qué ocurre? ¿Estáis todos bien?¿Dave, mi madre?¿Ha pasado algo?— Estaba angustiada y Lola me corto en seguida.

— No, no, nada de eso tranquila, todos bien, pero la verdad estamos en un buen lío. Esta mañana vino Jose, el propietario del piso y me amenazó en echarnos a la calle sino pagaba el mes que tenemos pendiente. No entendía nada, a ese tío le pasaba algo y lo apreté para que me contara el porqué de ese cambio de actitud con nosotras. El sabe que siempre nos ponemos al día, nunca le hemos acumulado más de un mes y en cuanto podemos lo liquidamos. Al final me reconoció que no es por nosotras, resulta que vino una chica muy interesada en comprar un piso al contado y dijo que quería el nuestro, le ofreció el de la planta baja que está libre pero se negó, sólo estaba interesada en nuestro pisito, joder yo la mato, Jose alucinó porque la pava ni siquiera pidió verlo. Algo raro, raro ¿no? pero bueno.

La cosa es que a José le hace falta la pasta para liquidar deudas que tiene acomuladas con antiguos proveedores, el tema de la crisis de la construcción lo afectó de lleno, tiene propiedades pero no liquidez y asegura que es muy difícil vender nada y bla bla bla... que se me enrolló como una persiana.

En resumen, aceptar esta propuesta le dará tranquilidad porque podrá hacer frente a esas facturas que lo tienen sin dormir. El hombre no sabía cómo decirnos que teníamos que irnos, así que se buscó la excusa del alquiler pendiente para podernos echar. Necesita que dejemos el piso en dos días ¿te lo puedes creer? ¿Nora, estás ahí?— el nudo de mi garganta se hizo gigante y no podía pronunciar una palabra— ¿Nora estás bien?

— Eh si sorry, estoy flipando colores. Esto es grave Lola, menuda putada, y ahora ¿qué vamos a hacer?— mi mundo se derrumbaba por completo, alguien me había echado un mal de ojo, no me cabía ninguna duda.

No Me Juzgues Pero No Me Dejes #FAwards  #PNovels2016 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora